Rub¨¦n Blades: ¡°Yo siempre he sido parte del p¨²blico¡±
El m¨²sico paname?o act¨²a el s¨¢bado en el festival Cru?lla en el F¨°rum de Barcelona
El pr¨®ximo s¨¢bado, el Parc del F¨°rum en Barcelona acoger¨¢ el regreso de Rub¨¦n Blades. El astro paname?o se presentar¨¢ en el festival Cruilla con la Big Band de Roberto Delgado, la misma que le ha acompa?ado en los ¨²ltimos a?os y con la que grab¨® su celebrado disco Salswing! merecedor del ¨²ltimo de los 10 premios Grammy (m¨¢s otros 13 Grammy latinos) que ha conseguido a lo largo de su ya larga y prol¨ªfica carrera profesional. Rub¨¦n Blades (Ciudad de Panam¨¢, 1948) atiende a este diario desde Nueva York v¨ªa Zoom. Locuaz como de costumbre bajo su ya emblem¨¢tico sombrerito negro y desplegando su sonrisa perpetua que solo se altera, mucho, al hablar de pol¨ªtica paname?a.
El concierto barcelon¨¦s ser¨¢ la ¨²nica actuaci¨®n europea que ofrecer¨¢ este verano. ¡°Estoy haciendo la serie Fear The Walking Dead¡±, comenta, ¡°y a finales de julio empezamos a filmar. Este ser¨¢ el ¨²nico show en Europa y quiero aclarar que en el festival nos concedieron tiempo extra, o sea que vamos a tocar dos horas por lo menos, no ser¨¢ eso de llegar y ya nos vamos. Y despu¨¦s me ir¨¦ para Savannah, en Georgia, para la octava temporada que dicen que ser¨¢ la final, no s¨¦, veremos...¡±
Pregunta. El concierto est¨¢ anunciado todav¨ªa dentro del Salswing Tour!, pero sus dos ¨²ltimas grabaciones le asocian con el grupo brasile?o Boca Livre y cantando en portugu¨¦s, lo que convierte sus cl¨¢sicos en algo totalmente diferente.
Respuesta. Esa es la idea. Uno aprende de lo que otro ve en tu obra que t¨² no has visto, eso me interesa mucho. Cuando hice el ¨¢lbum Agua de luna [1987] sobre un cuento corto de Garc¨ªa M¨¢rquez lo que originalmente quer¨ªa hacer era el disco con Gabo. ?l escrib¨ªa canciones, aunque mucha gente no lo sabe, le gustaba escribir hacerlo. Muchos de esos vallenatos que andan por ah¨ª seguro que los escribi¨® ¨¦l, simplemente que no recibi¨® el cr¨¦dito o no lo quiso. Me dijo que no quer¨ªa hacer el disco porque no lo terminar¨ªamos nunca: ¡°T¨² vas a estar viajando y yo viajando y nunca vamos a acabar, estaremos devolvi¨¦ndonos cosas y eso no funciona. Hazlo t¨² solo¡±. Yo no quise hacer una adaptaci¨®n del cuento en una canci¨®n y expliqu¨¦ lo que me provoc¨® la lectura del cuento. Eso le interes¨® mucho a ¨¦l. El escritor escribe, suelta el escrito y cada cual lo ve a su forma. Por eso, nunca quise hacer video de Pedro Navaja, nunca dije si era gordo, flaco, alto, negro, blanco, ... Yo no lo describo, t¨² te lo imaginas en tu mente. Y por eso lo que ha hecho Boca Livre me gusta, hicieron algo desde su ¨®ptica y ese tratamiento me ha enriquecido descubriendo algo que yo ignoraba de mi propio trabajo.
P. ?La versi¨®n brasile?a de Pedro Navaja es un buen ejemplo de la evoluci¨®n imparable de la m¨²sica latina?
R. Siempre ha sido as¨ª, aunque hay gente que se resiste, generaciones pasadas que ven como un atentado que se altere la memoria que tienen de algo que sirvi¨® como banda sonora para alg¨²n momento importante de su vida. Sienten que eso impide la identificaci¨®n emocional, no quieren que nadie lo toque.
P. ?Qu¨¦ le aporta como int¨¦rprete regresar todas las noches a sus cl¨¢sicos ineludibles?
R. La reacci¨®n de la gente. Eso siempre me anima y otra cosa importante: yo siempre cre¨ª en lo que escrib¨ªa. Nadie me lo dio machacado para que me lo comiera. No, eso lo escrib¨ª yo y, en cierta forma, cada vez que me subo al escenario, regreso a los 24 a?os.
P. ?Y c¨®mo fue a los 24 a?os dar con ese tipo de temas que no eran habituales, no ya en la salsa neoyorquina sino en toda la m¨²sica latina?
R. Escrib¨ªa pensando que si esto tiene inter¨¦s para m¨ª, va a tener inter¨¦s para otros. Nunca pens¨¦ que yo estoy ac¨¢ y el p¨²blico all¨¢, yo siempre he sido parte del p¨²blico. Yo tambi¨¦n soy fan de gente, como Bobby Darin o Rafael Ithier del Gran Combo. Quer¨ªa expresar alg¨²n tipo de proposici¨®n que hiciera que la gente que estaba pasando por un problema se sintiera menos sola. De ah¨ª surge Pablo Pueblo que fue mi segunda canci¨®n como escritor.
P. ?La segunda? ?Dio en plena diana!
R. Porque es honesta. No estaba pensando en ser popular, por eso no ten¨ªa escrib¨ªa sobre el amor que era lo que llevaba a las grandes estrellas a serlo. En realidad describ¨ªa gente y el p¨²blico se identificaba. Y nunca con una intenci¨®n comercial. Para m¨ª resulta incomprensible como yo termin¨¦ siendo una figura p¨²blica, cantante, actor y envuelto en pol¨ªtica, cuando toda mi vida hasta los veinte y pico de a?os mi deseo era pasar desapercibido, poder entrar a un lugar sin que nadie se diera cuenta. .
P. Su entrada fue un ¨¦xito inmediato y cambi¨® muchos de los planteamientos de la salsa.
R. Sucedi¨® porque yo ten¨ªa la raz¨®n, lo que no pens¨¦ es que llegara a tanta gente. Era un sentimiento que iba mucho m¨¢s all¨¢ de la pol¨ªtica. Ten¨ªa mucho cuidado en no convertirme en un escritor panfletario, ideol¨®gico. Siembra le lleg¨® al tipo de izquierda igual que al de derecha, a la se?ora, a la vieja, al viejo, al joven, a la joven, al trabajador, al patr¨®n ... porque hablaba de cosas que todos conoc¨ªan. ¡°La vida te da sorpresas¡±, todo el mundo se identifica con eso. ¡°Se ve la cara pero nunca el coraz¨®n¡±, cierto. De pronto la gente empez¨® a ponerle m¨¢s atenci¨®n a la letra que a los pies. Eso fue lo que pas¨®, b¨¢sicamente, pero lo que no esper¨¢bamos fue la gran explosi¨®n. Cuando Willie [Col¨®n] y yo lo hicimos, eso fue como los Beatles y a nosotros nos sorprend¨ªa.
P. ?Cree que ha quedado esa marca en la m¨²sica Latina? Porque ahora cosas como el reguet¨®n parecen ir en otra direcci¨®n.
R. Es complejo definirlo, pero en este momento con canciones como las que hace Ren¨¦ [P¨¦rez, alias Residente] el reguet¨®n tiene otra dimensi¨®n, ya no es esa misoginia, de ataque, de burla a las personas por su condici¨®n sexual. Se ha ido corrigiendo. Toda la m¨²sica evoluciona. Ahora mismo hay grupos de salsa en muchos pa¨ªses que hacen cosas que ignoramos.
P. ?Podemos seguir hablando de salsa o ya es un t¨¦rmino hist¨®rico?
R. Yo lo seguir¨ªa utilizando aunque nunca me gust¨® porque es muy fr¨ªvolo. Muy de baile: ?dame salsa! En el contexto actual me parece m¨¢s acertado hablar de m¨²sica urbana.
P. ?Concluy¨® ya las memorias que estaba escribiendo?
R. Saldr¨¢n en 2024. Lo que estoy tratando es ser lo m¨¢s honesto posible y aclarar ciertas cosas. Por ejemplo, por qu¨¦ me fui de Panam¨¢ en 1964, por qu¨¦ cambi¨¦ de abogado a m¨²sico, qu¨¦ fue lo que pas¨® con mi separaci¨®n de Willie Col¨®n,... Si no aclaras esto queda la narrativa de otro que no estuvo all¨ª y no sabe lo que pas¨®.
P. ?Qui¨¦n saldr¨¢ peor parado: alg¨²n patr¨®n de la salsa o algunos pol¨ªticos paname?os?
R. Cuando hablo de pol¨ªtica nunca pongo un nombre propio porque la culpa, en una forma u otra, la tenemos todos. Se ha de responsabilizar no solamente a pol¨ªticos, sino a los pueblos que permiten, a trav¨¦s del clientelismo pol¨ªtico, que estos corruptos, lleguen al poder. A estos tipos no los puso en el poder un marciano, no. En Panam¨¢ ahora mismo el que est¨¢ el n¨²mero uno en las encuestas para ser presidente en 2024 acaba de ser denunciado como corrupto por sus hijos que est¨¢n presos en Estados Unidos. Fue beneficiario de los sobornos de Odebrecht. ?C¨®mo es posible que se est¨¦ postulando como n¨²mero uno? ?De qui¨¦n es la responsabilidad? Nuestra.
P. ?Va a participar en las elecciones presidenciales de 2024 en Panam¨¢?
R. No puedo hablar definitivamente y, por lo general, no respondo a esta pregunta, porque no le quiero dar el gusto a mi enemigo pol¨ªtico de saber si voy a ir o no pero, para ser honesto, no lo estoy considerando. No veo las condiciones para que una persona como yo encuentre un respaldo al punto de poder cambiar la realidad de un pa¨ªs que necesita un cambio. Se necesitar¨ªa la participaci¨®n masiva del pueblo y, ahora mismo, el pueblo pone de primero a un corrupto...
P. ?Por qu¨¦?
R. Creo que es una falta de confianza en la capacidad de alterar un destino. Mi libro comienza con una sentencia: los destinos se hacen, brother. La gente se acostumbra al dedismo pol¨ªtico: t¨² votas por m¨ª y yo te doy esta migaja, este trabajito que no sirve para nada, pero c¨®gelo, aunque no est¨¦s capacitado para hacerlo. Con el tiempo se pierde la autoestima, la voluntad de hacer, consideras que eres como una especie de clown de una realidad que en tu opini¨®n no puedes cambiar. Y te acostumbras. Eso de que vale m¨¢s malo conocido que malo por conocer es un absurdo.
P. ?Qu¨¦ le qued¨® de su periodo de cinco a?os como ministro?
R. La certeza de que puedes cambiar las cosas favorablemente desde el Gobierno si hay voluntad de hacerlo. Yo no sal¨ª decepcionado, sal¨ª convencido de ello, lo que se necesita es m¨¢s gente que participe. Me dec¨ªan: ¡°La pol¨ªtica es una mierda¡±. Es una mierda porque dejamos que la mierda la controle, vamos a sustituirlos. Ha de entrar m¨¢s gente, pero nadie quiere sacrificarse. Yo dej¨¦ de cantar y hacer cine por cinco a?os, pero me hizo mejor persona, mejor paname?o, mejor todo; sin embargo, mucha gente no quiere salir de su comodidad para irse a arreglar algo que vive criticando. En Panam¨¢ no hay ning¨²n partido pol¨ªtico, con la excepci¨®n de los partidos en formaci¨®n que todav¨ªa no han tenido oportunidad de gobernar, que merezca nuestra confianza. Yo dije: en mi ministerio no va a haber corrupci¨®n y, en efecto, no la hubo.
P. Es una opini¨®n muy extendida que en casi todos los pa¨ªses, que el nivel de los pol¨ªticos est¨¢ bajando cr¨ªticamente.
R. Es por la impunidad. En mi tiempo, si hac¨ªas una cagada en el barrio, nadie te ayudaba. Los pol¨ªticos, en cambio, se sienten impunes e inmunes. Por suerte no todo es igual: Mujica en Uruguay fue presidente y no rob¨®. Hizo su trabajo y despu¨¦s se fue para su casa. ?El poder corrompe? No, el poder desenmascara, ?por favor! Por eso Mujica no se corrompi¨®. Ahora, lo que yo s¨ª estoy haciendo es d¨¢ndoles mi opini¨®n y mis argumentos a los independientes, qu¨¦ necesitan para enfrentarse al cinismo, la apat¨ªa, la indiferencia y entusiasmar a la gente para que reaccionemos y podamos recobrar al pa¨ªs de la corrupci¨®n.
Babelia
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