La nueva ley del cine ampl¨ªa sus ayudas a las series de televisi¨®n y protege la Filmoteca Espa?ola y sus archivos

Habr¨¢ ayudas a la producci¨®n de series; la Filmoteca Espa?ola recibe la protecci¨®n de BIC (Bien de Inter¨¦s Cultural), lo que asegura el cuidado del patrimonio audiovisual que se conserva en sus distintos almacenes y centros de restauraci¨®n; y se mantiene la definici¨®n de productor independiente, uno de los campos de batalla de los ¨²ltimos a?os del sector. El anteproyecto de la Ley del Cine que est¨¢ previsto que salga este martes del Consejo de Ministros, y al que ha tenido acceso EL PA?S, supone un cambio de paradigma. Es cierto que ser¨¢ la orden que desarrolle el reglamento del marco legislativo la que concrete las medidas ahora apuntadas, pero la norma jur¨ªdica contiene suficientes mandatos novedosos como para entender la trascendencia de algunos de sus t¨ªtulos. El anteproyecto ha tardado mucho tiempo en cuajar: a finales de febrero parec¨ªa inminente su paso por el Consejo de Ministros, un tr¨¢nsito que finalmente se dar¨¢ 10 meses despu¨¦s. Ha sufrido algunas, peque?as, variaciones en las negociaciones con diferentes sectores de la industria audiovisual y viene a sustituir a la actual ley, que cumple justo ahora 15 a?os: naci¨® un 28 de diciembre de 2007.

La ley calmar¨¢ a los productores independientes, que han estado subrayando durante meses la contradicci¨®n de disfrutar de un 2022 de incre¨ªble calidad f¨ªlmica, en la que incluso una pel¨ªcula espa?ola gan¨® en la Berlinale ¡ªAlcarr¨¤s, de Carla Sim¨®n¡ª, con la aprobaci¨®n de la Ley de Comunicaci¨®n Audiovisual, que al final de la primavera abri¨® la mano al considerar productor independiente a un productor de un gran conglomerado audiovisual privado si prepara un proyecto para otro conglomerado. En esta Ley del Cine, la definici¨®n del productor independiente se mantiene como en la norma que viene a suplir, no se toca. Tambi¨¦n se definen qu¨¦ son distribuidores, agentes de ventas internacionales y exhibidores independientes, conceptos que marcar¨¢n el posterior reparto de ayudas.

En este articulado, plantea que ¡°el ICAA [Instituto de la Cinematograf¨ªa y de las Artes Audiovisuales] podr¨¢ conceder ayudas a distribuidoras independientes para la distribuci¨®n de obras audiovisuales a trav¨¦s de servicios de comunicaci¨®n audiovisual, principalmente a los de acceso condicional¡±. Es decir, no solo a las pel¨ªculas que vayan a salas comerciales. Por cierto, no podr¨¢n recibir ayudas ¡°las pel¨ªculas cinematogr¨¢ficas producidas directamente por prestadoras de servicios de comunicaci¨®n audiovisual¡±, es decir, producidas por plataformas... siempre que, y ah¨ª est¨¢ el posible regate legal, las produzcan ellas. En numerosas ocasiones, las plataformas califican de originales a filmes comprados.

Aprobaci¨®n antes de que acabe la legislatura

Su paso hoy por el Consejo de Ministros permite que pueda aprobarse antes de que se termine la presente legislatura. Seg¨²n el pre¨¢mbulo del nuevo texto, un anteproyecto que ahora se bautiza como Ley del Cine y de la Cultura Audiovisual para remarcar el cambio de paradigma, se busca ¡°el fortalecimiento y apoyo de toda la cadena de valor del tejido creativo e industrial que opera en el ¨¢mbito de la cinematograf¨ªa y del audiovisual, con especial atenci¨®n a los sectores independientes [...]; el respaldo a los autores y autoras y al pleno ejercicio de los derechos de propiedad intelectual [...]; la adaptaci¨®n a las nuevas tecnolog¨ªas, formatos y h¨¢bitos de consumo, en paralelo al devenir de los procesos de digitalizaci¨®n y de desarrollo sostenible; la defensa de la competencia y los equilibrios en el mercado audiovisual [...]; y la puesta en valor del patrimonio audiovisual, a trav¨¦s de su reivindicaci¨®n, del desarrollo de audiencias y de programas educativos¡±.

Hay bastantes novedades: aparece el Consejo Estatal de la Cinematograf¨ªa y la Cultura Audiovisual ¡°para favorecer una mayor colaboraci¨®n p¨²blico-privada; para evaluar las pol¨ªticas p¨²blicas; para desarrollar un Plan de Fomento de la Alfabetizaci¨®n en Cultura Cinematogr¨¢fica y Audiovisual y de Creaci¨®n de Audiencias; e impulsar mecanismos de conciliaci¨®n, mediaci¨®n y arbitraje para la propuesta de acuerdos y soluci¨®n de controversias¡±. Ahora bien, sobre su composici¨®n no se va m¨¢s all¨¢ de que ¡°estar¨¢n representadas las Comunidades Aut¨®nomas y ciudades con Estatuto de Autonom¨ªa, as¨ª como los sectores de la cinematograf¨ªa y la cultura audiovisual¡±.

Fuentes del ministerio aseguran que las nuevas l¨ªneas de producci¨®n de las series no saldr¨¢n del actual Fondo de Garant¨ªa, que con la aprobaci¨®n de la ley se denominar¨¢ Fondo de Protecci¨®n a la Cinematograf¨ªa y al Audiovisual. ¡°Las ayudas al cine se mantienen, no menguan al entrar las series¡±, insisten. Con todo, la ley habla constantemente de ¡°productos audiovisuales¡±.

Y por ello, entra a definir qu¨¦ es una pel¨ªcula para televisi¨®n, un piloto, una temporada y, por supuesto, una serie: ¡°Obra audiovisual formada por un conjunto de episodios con o sin t¨ªtulo gen¨¦rico com¨²n, destinada a su comunicaci¨®n p¨²blica por prestadoras de servicios de comunicaci¨®n audiovisual de forma sucesiva y continuada, pudiendo cada episodio corresponder a una unidad narrativa o tener continuaci¨®n en el episodio siguiente¡±.

Tambi¨¦n cambia la cuota de pantalla, en el art¨ªculo 15, que tienen que cumplir los exhibidores. ¡°Se efect¨²a una regulaci¨®n m¨¢s flexible de la cuota de pantalla, que permite su cumplimiento con la programaci¨®n de cine iberoamericano adem¨¢s de cine europeo, que otorga valor doble para el cumplimiento de la cuota a las pel¨ªculas europeas o iberoamericanas dirigidas exclusivamente por mujeres, y que reduce tambi¨¦n el porcentaje de obras de este tipo que deben programarse sobre el total de las exhibidas para cumplir con la obligaci¨®n¡±, que se queda en un 20% (en l¨ªneas generales, ya que est¨¢ sujeta a numerosas excepciones). Por primera vez se tiene en cuenta al cine iberoamericano en lo que, el ministerio subraya, es una apuesta por la protecci¨®n del idioma. En la ley se apunta en este sentido: ¡°El cine iberoamericano es referente natural de nuestra cinematograf¨ªa e industria audiovisual¡±.

Otra medida anunciada en el anteproyecto de febrero y que ahora se confirma en el articulado es que no solo las salas est¨¢n obligadas a ofrecer datos de asistencia, sino que ahora tambi¨¦n deber¨¢n hacerlo ¡°las prestadoras del servicio de comunicaci¨®n audiovisual televisivo a petici¨®n de ¨¢mbito estatal¡±. Eso s¨ª, se remite a un ¡°mecanismo que se determine reglamentariamente¡±. Las plataformas deber¨¢n hacer p¨²blicos sus datos para que, entre otros objetivos, los autores puedan conocer el resultado de sus obras y reclamar los derechos de propiedad intelectual, que es otro de los mensajes m¨¢s repetidos en este anteproyecto de la nueva Ley del Cine. Otro de los mensajes clave: la norma espera fomentar la igualdad, la sostenibilidad y la facilidad de acceso para las personas con discapacidad. Son en algunas ocasiones criterios relevantes, y en algunos casos, imprescindibles para elegir los proyectos que puedan recibir ayudas p¨²blicas. El texto incide en incorporar un ¡°lenguaje no sexista e inclusivo¡±.

La ¨²ltima prioridad, la de la conservaci¨®n del patrimonio, llegar¨¢ con la calificaci¨®n de la Filmoteca Espa?ola de Bien de Inter¨¦s Cultural (BIC), intenci¨®n ya anunciada en febrero, con lo que obtiene especial protecci¨®n tanto su continente como su contenido. Para ello, hay un apartado en este anteproyecto que dispone de la modificaci¨®n de la Ley de Patrimonio Hist¨®rico Espa?ol con la creaci¨®n de un nuevo t¨ªtulo VII bis. As¨ª, ¡°se otorga al patrimonio cinematogr¨¢fico y audiovisual una identidad propia, teniendo en cuenta que las obras cinematogr¨¢ficas y audiovisuales, adem¨¢s de su intr¨ªnseco valor cultural, son una fuente de informaci¨®n hist¨®rica y un testigo fundamental para la historia de la riqueza de las diferentes identidades culturales de Espa?a y de Europa y de la diversidad de sus gentes¡±.