P¨¦rez Pont, gestor cultural cesado por Vox: ¡°Los nost¨¢lgicos de la Espa?a en blanco y negro recuperan al comisario pol¨ªtico¡±

La conversi¨®n del Centre del Carme Cultura Contempor¨¤nia (CCCC) de Valencia en un lugar de encuentro, incluso para adolescentes, lo que no es nada frecuente, ha sido el principal logro de Jos¨¦ Luis P¨¦rez Pont (Alicante, 51 a?os) como director art¨ªstico y gerente. De poco le ha servido que la instituci¨®n, dependiente principalmente de la Generalitat, pasara de 72.000 visitantes en 2015, el a?o anterior a acceder al cargo por concurso p¨²blico, a 320.000 en 2022. El nuevo Gobierno del PP y Vox le destituy¨® la pasada semana sin contar con recambio ni proyecto alternativo. La consejer¨ªa de Cultura, en manos de la ultraderecha, esgrimi¨® ¡°irregularidades y mala praxis¡± para rescindir su contrato en vigor hasta 2026. Abogado durante 13 a?os, profesi¨®n que compagin¨® con la cr¨ªtica del arte y el comisariado de exposiciones, responder¨¢ en los tribunales a su despido, mientras le siguen llegando muestras de apoyo del mundo del arte, que califica de ideol¨®gica una decisi¨®n que rompe con el manual de buenas pr¨¢cticas para elegir los cargos de centros culturales y museos.

Pregunta. ?Por qu¨¦ cree que le han destituido?

Respuesta. Creo que mi l¨ªnea de trabajo est¨¢ a a?os luz de los postulados del actual Gobierno. Este es el motivo principal, aunque lo quieran justificar con otros argumentos. Llego por concurso p¨²blico en 2016, planteo un cambio de modelo de gesti¨®n: acabar con las decisiones unipersonales y con la injerencia pol¨ªtica precedente, cuando los pol¨ªticos se atrev¨ªan a marcar programaciones o artistas; generar igualdad de oportunidades, transparencia y democratizaci¨®n con el prop¨®sito de que los centros culturales y museos dejen de ser para una ¨¦lite cultural y social y sean espacios de vida cotidiana, destinados a la ciudadan¨ªa.

P. La Generalitat argumenta su despido con informes sobre mala praxis y recuerdan una sentencia contra el patrimonio.

R. Todas las cuentas est¨¢n auditadas y han sido aprobadas anualmente por unanimidad por las siete instituciones que conforman el Consorci de Museus [los tres Ayuntamientos de las capitales, las tres diputaciones y la Generalitat; El Carme es su buque insignia]. En cuanto a la sentencia por delito leve contra el patrimonio que se sald¨® con una multa de 1.000 euros, fue un proyecto ef¨ªmero [de los creadores PichiAvo, que realizaron una intervenci¨®n art¨ªstica en 2019 en las paredes del claustro renacentistas del Carme] en colaboraci¨®n con el programa de Fallas del Ayuntamiento, aprobado por la comisi¨®n cient¨ªfica y el Consejo General. Esas paredes de cemento se han pintado cientos de veces, hay facturas que lo acreditan. El muro de mamposter¨ªa est¨¢ atr¨¢s, cubierto por 10 cent¨ªmetros de cemento. En fin, hubo toda una campa?a¡­ Pero con posterioridad a los hechos, en 2021, cuando se plantea la pr¨®rroga de mi contrato, todas las instituciones que integran el Consorcio la aprobaron por unanimidad y sin ninguna cr¨ªtica a mi gesti¨®n. Algunas de dichas instituciones estaban gobernadas por el PP, como era el caso del Ayuntamiento de Alicante y la Diputaci¨®n de esa provincia, en ese momento presidida por el se?or [Carlos] Maz¨®n, actual presidente de la Generalitat.

P. El Carme ha programado proyectos para concienciar sobre el cambio clim¨¢tico o la violencia machista, que Vox niega. ?Cree que ha influido en la decisi¨®n?

R. Es evidente que su ideario no coincide con la l¨ªnea de trabajo en el CCCC y el Consorci de Museus. Mi trabajo responde al proyecto que se aprob¨® en 2016 y se renov¨® en 2021 y all¨ª se habla de igualdad de g¨¦nero, emergencia clim¨¢tica, respeto a la diversidad o compromiso con la agenda 2030, entre otras cuestiones. Durante estos a?os ha sido una instituci¨®n conectada con lo que sucede en el mundo. La cultura y los creadores lo manifiestan en sus obras y lo hemos mostrado como parte del acervo cultural de nuestro tiempo.

P. La oferta del centro es muy dispar, incluso acogi¨® tambi¨¦n a un cantante de OT.

R. Si, Alfred vino a cantar una canci¨®n dedicada a las Fallas. El CCCC no es un museo, es un centro de cultura contempor¨¢nea donde conviven las artes visuales, cine, m¨²sica (desde sinf¨®nica a electr¨®nica), danza, mediaci¨®n, conferencias¡­ Un espacio interdisciplinar convertido en espejo del mundo. Por eso creo que la gente se sent¨ªa reflejada y se gener¨® una vinculaci¨®n emocional, como se vio con todas las personas que vinieron a la despedida [varios centenares de personas se concentraron en protesta por su cese el 21 de noviembre]. Pero el criterio era la calidad. Apostamos por grandes nombres como Martin Parr o Jaime Hay¨®n, que no hab¨ªan expuesto nunca en Valencia, y tambi¨¦n por artistas j¨®venes y por la creaci¨®n aut¨®ctona.

P. ?Le ha pasado factura su protagonismo cr¨ªtico contra la pol¨ªtica cultural del PP entre 1995 y 2015?

R. Todo parece indicar que esto es un ajuste pol¨ªtico, a pesar de que soy una persona independiente, no estoy afiliado a ning¨²n partido y he llegado al cargo por un concurso. Lo cierto es que, junto a buena parte del sector valenciano y espa?ol, pusimos de manifiesto la mala gesti¨®n cultural de los museos valencianos en esos a?os. Como presidente de la asociaci¨®n de cr¨ªticos de arte puse voz a la opini¨®n de los profesionales. La decisi¨®n de mi destituci¨®n estaba tomada por encima de cualquier cosa. Hay una entrevista al se?or Maz¨®n en el peri¨®dico Abc del 8 de julio, tras ganar las elecciones, en la que ya lo dice.

P. El consejero de Cultura, Vicente Barrera, de Vox, ha declarado que quiere imponer una ¡°cultura blanca, sin ideolog¨ªas¡±, tras abrir una nueva l¨ªnea presupuestaria para organizar novilladas de toros. ?A qu¨¦ cree que se refiere?

R. Lo de cultura blanca podr¨ªa sonar a postulado racista, quiz¨¢s propio de la ideolog¨ªa que representa. Los nost¨¢lgicos de la Espa?a en blanco y negro est¨¢n recuperando la figura de los comisarios pol¨ªticos en las instituciones culturales. Desde mi punto de vista la cultura solo es posible si se dan las condiciones para la libertad y la diversidad, sin tutelas ni filtros de censura previa. La secretaria auton¨®mica de Cultura [Paula A?¨®] nos pidi¨® a los directores de instituciones y entidades culturales la programaci¨®n de 2024 porque quer¨ªa revisar los contenidos. Entiendo que era un ejercicio de censura previa. Algo que en los siete a?os anteriores nunca me hab¨ªa solicitado el Gobierno precedente. Le expliqu¨¦ que la programaci¨®n anual era la aprobada previamente por el Consorcio a trav¨¦s de sus ¨®rganos estatutarios.

P. Barrera reitera que tiene legitimidad para nombrar a otros gestores para cambiar de pol¨ªtica tras ganar las elecciones.

R. En 2007 se aprob¨® en Espa?a el Manual de Buenas Pr¨¢cticas con el consenso un¨¢nime de todo el sector de las artes visuales y el ministerio de cultura. Se puso en marcha una nueva forma de operar para desligar el partidismo pol¨ªtico de la gesti¨®n profesional de las instituciones culturales. Ha estado funcionando bien estos a?os, dando buenos resultados. Ahora se est¨¢ produciendo un retroceso en cuestiones en las que se hab¨ªa avanzado, de respeto a los profesionales del sector del arte y la cultura, que no solo afecta a la direcci¨®n de los museos, tambi¨¦n a la remuneraci¨®n y reconocimiento profesional de los artistas. Nos hemos esforzado mucho para dedicar recursos a los estadios previos a la exhibici¨®n.

P. ?Conoce el proyecto alternativo de Vox para El Carme y el Consorci? ?Le consta que su puesto ha sido ofrecido a varios profesionales?

R. Desconozco su proyecto cultural. Solo tuvimos una reuni¨®n con el consejero de cultura el 1 de agosto, al poco de llegar. De mi cese me enter¨¦ por un correo electr¨®nico que me convocaba a una reuni¨®n del Consorci con mi cese como orden del d¨ªa. Lo razonable es que si un responsable pol¨ªtico tiene dudas acerca de la gesti¨®n, me hubiera llamado antes para pedirme explicaciones, ?no? En la reuni¨®n telem¨¢tica en la que se me cesa no se me permiti¨® ni el derecho a defenderme ni de aclarar ninguna de sus acusaciones. Y s¨ª, me consta que han llamado a personas y han rechazado el cargo.