Hirahi Afonso: ¡°Los instrumentos peque?os obligan a que tu mente se expanda¡±
El timplista canario presenta el elep¨¦ ¡®Lo Puro¡¯, una colosal fusi¨®n de folclore, jazz y canci¨®n de autor
A Hirahi Afonso (Las Palmas, 27 a?os) le divierten las contradicciones. Es un gigant¨®n de dos metros que apuntaba maneras como baloncestista, pero se ha convertido en un virtuoso del timple, esa min¨²scula guitarrita canaria de cinco cuerdas que apenas alcanza el medio metro de longitud. Y presume de un rar¨ªsimo nombre aborigen canario que solo comparte con otros seis habitantes del planeta, pero los destellos pelirrojos de la barba denotan su mezcla de ancestros.
Esa misma pasi¨®n por las paradojas le ha llevado a titular Lo Puro su segundo elep¨¦, en realidad un colosal crisol de ...
A Hirahi Afonso (Las Palmas, 27 a?os) le divierten las contradicciones. Es un gigant¨®n de dos metros que apuntaba maneras como baloncestista, pero se ha convertido en un virtuoso del timple, esa min¨²scula guitarrita canaria de cinco cuerdas que apenas alcanza el medio metro de longitud. Y presume de un rar¨ªsimo nombre aborigen canario que solo comparte con otros seis habitantes del planeta, pero los destellos pelirrojos de la barba denotan su mezcla de ancestros.
Esa misma pasi¨®n por las paradojas le ha llevado a titular Lo Puro su segundo elep¨¦, en realidad un colosal crisol de folclore, jazz, canci¨®n de autor y geograf¨ªas m¨²ltiples. Le abordamos en los camerinos nada m¨¢s asombrar a 5.000 espectadores en el Womad de Gran Canaria, y muy pocos d¨ªas antes de que este festival, meca de las m¨²sicas del mundo, le anunciara como representante espa?ol en la edici¨®n brit¨¢nica de 2024 del certamen.
Pregunta. ?Qu¨¦ le atrajo de un instrumento tan diminuto y, a priori, limitado?
Respuesta. La dimensi¨®n del reto. Las limitaciones son evidentes, por tesitura y afinaci¨®n, pero los instrumentos peque?os obligan a que tu mente se expanda en todas las direcciones.
P. Perm¨ªtase el proselitismo. ?En qu¨¦ aventaja el timple a instrumentos similares como el charango, el ukelele o el cavaquinho?
R. ?En nada! Solo en la evoluci¨®n que podamos aportar sus int¨¦rpretes. Mi sue?o es que quienes lleguen despu¨¦s se encuentren un timple que atesora una mayor sabidur¨ªa.
P. March¨® a estudiar a la Escola de M¨²sica de Catalunya (Esmuc) antes de alcanzar la mayor¨ªa de edad. ?Se recuerda asustado al emprender aquel viaje?
R. Emocionado. Yo era un ni?o t¨ªmido, ensimismado. Mis mejores amigos siempre fueron mis padres, que son muy j¨®venes: hoy tienen 44 y 47 a?os. A ellos les agradezco que me hicieran fuerte. Era un pibe motivado y con las cosas muy claras. Ahora lo pienso: ¡°??o, mira que fuiste valiente!¡±.
P. ?Pero hab¨ªa volado mucho antes de aquello?
R. ?Si casi no hab¨ªa salido de casa! Acababa de empezar mis colaboraciones con Mestisay, la hist¨®rica banda canaria de folk, y eso me permiti¨® viajar entre islas, pero hasta los 17 no cog¨ª un avi¨®n grande por primera vez. Y fue para que me diera un vuelco la vida.
P. ?C¨®mo de t¨ªmido sigue siendo ahora?
R. Menos, pero reflejo ese car¨¢cter introspectivo en mi m¨²sica. La soledad es muy necesaria para sentirse creativo.
Prefiero discos a ¡®singles¡¯. Tienen un componente amoroso y a?ejo¡±
P. ?Partidario de la pureza?
R. No hay nada puro ya. Podr¨ªamos aspirar a ello hace 2.000 a?os, pero ahora mismo es inevitable nutrirse de cosas. Incluso de las que no te gustar¨ªa nutrirte¡
P. As¨ª que el t¨ªtulo de su disco es un trampantojo.
R. Es un juego, una manera de quedarse con la gente. El propio timple lo hace: naci¨® para tocar folclore, pero ahora hemos pervertido ese origen y puede hacerlo suyo cualquiera.
P. ?Por qu¨¦ delega las letras en Alberto Limi?ana, su bajista?
R. Tengo la suerte de contar con amigos geniales que escriben cosas brillantes y al tiempo ambiguas. Y ello agranda la dimensi¨®n del juego: cuento cosas a trav¨¦s de lo que escribe otro al que le he contado antes lo que pienso yo.
P. ?Qu¨¦ tal se lleva con los algoritmos?
R. Los odio. Me encantar¨ªa ser m¨¢s conocido, pero aborrezco esa idea de que me conviene entrar en playlists para que la gente me escuche. Tengo la sensaci¨®n de que hace 20 a?os las cosas se hac¨ªan de una manera m¨¢s natural. No est¨¢bamos contaminados por ese permanente fingir que eres guay.
Odio los algoritmos. Hace 20 a?os todo era m¨¢s natural¡±
P. ??lbumes o singles?
R. ?Discos, por Dios! Yo escucho elep¨¦s enteros todo el rato. Tienen un componente amoroso y a?ejo, cocinado a fuego lento.
P. ?Conoce a alg¨²n otro Hirahi?
R. A un antiguo guitarrista de punk y a un bombero de Tenerife. ?ramos seis, pero una chica de Fuerteventura a la que le gusta mi m¨²sica acaba de ponerle Hirahi a su hija. Significa ¡°cielo y universo¡±. Y es un nombre unisex.