El ¡®cazafantasmas¡¯ Paul Rudd, un buen tipo que ha triunfado encarnando a buenos tipos
El int¨¦rprete es uno de los actores m¨¢s queridos por el p¨²blico y prol¨ªficos en el g¨¦nero de la comedia. ¡°Soy experto en personajes de la calle que acaban en situaciones extraordinarias¡±, apunta
Acabada la entrevista, Paul Rudd (Passaic, Nueva Jersey, 54 a?os) pide a su asistente su m¨®vil y muestra al periodista una foto suya besando a su hijo, que aparece rojo por la llorera de felicidad, en la final de la Super Bowl del 2 de febrero de 2020. Rudd creci¨® en Kansas y durante a?os ha sido el fan m¨¢s famoso de su equipo de f¨²tbol americano, los Kansas City Chiefs, una escuadra que estuvo medio siglo sin obtener grandes resultados. ¡°Cuando voy a casa de mis padres y no trabajo, siempre me acerco al estadio con toda mi parafernalia de seguidor¡±, comenta entre risas. ¡°Y por fin, esa temporada llegamos a la final. Durante aquella ¨¦poca de resultados mediocres, mi hijo se desesperaba por los partidos, y yo mismo pensaba en por qu¨¦ le hab¨ªa hecho de mi equipo. Hasta que las cosas cambiaron y al clasificarnos para la Super Bowl, me pidi¨® que fu¨¦ramos. Esa foto es del momento en que sabemos que vamos a ganar a unos segundos del final, y mi chaval estalla¡±, relata. Es la imagen de un padre con su hijo. Es el perfecto retrato de Paul Rudd, estrella de la comedia en EE UU, un tipo sin esc¨¢ndalos a sus espaldas, emparejado con su esposa desde hace tres d¨¦cadas, un actor que ha triunfado a base de encarnar buenas personas y que ahora estrena Cazafantasmas: imperio helado, en la que da vida a un profesor de ciencias de secundaria que acaba persiguiendo ectoplasmas por amor.
La carrera de Paul Rudd transita por los t¨®picos de los actores hormiguitas, los que han ido trabajando sin parar a la chita callando. Tras licenciarse en la Universidad de Kansas, estudi¨® en Nueva York interpretaci¨®n en la American Academy of Dramatic Arts y se gan¨® como pudo la vida, hasta que en 1991 apareci¨® en un anuncio de la Super Nintendo, y empez¨® a aparecer en series de televisi¨®n. Abandon¨® una de ellas, Wild Oats, por trabajar en Clueless (Fuera de onda) en 1995. ¡°Es curioso: estuve a?os haciendo secundarios en filmes de cualquier g¨¦nero, y la gente solo me recuerda en comedias. Todo se debe, y lo digo para bien, a que me cruc¨¦ en el camino de la banda de Judd Apatow¡±, recuerda. Ni siquiera aparecer en Friends como el tercer marido de Phoebe le luci¨® tanto como El reportero: la leyenda de Ron Burgundy, Virgen a los 40 o L¨ªo embarazoso. ¡°Con todo, la que me cambi¨® la vida fue Te quiero, t¨ªo, en 2009, porque ya fui coprotagonista¡±, asegura. ¡°Y ahora parece una carrera en escalada gradual, pero nunca tuve un plan¡±.
El actor defiende que la perspectiva de su curr¨ªculo esconde los riesgos asumidos: ¡°Siempre busqu¨¦ guiones que me hicieran disfrutar, reflejo de lo que hago en la vida con el cine o la m¨²sica [muy musiquero, busca asociar a cada personaje a una canci¨®n o a un tipo de m¨²sica], es decir, historias que salgan un poco de lo normal, que a muchos les sonar¨¢n un poco extra?as o peculiares. Nunca busqu¨¦ taquillazos, y espero seguir as¨ª. Hasta la entrada en el universo Marvel, siempre me he sentido en filmes con esp¨ªritu independiente, en comedias que no quer¨ªan contentar f¨¢cilmente al gran p¨²blico. Rod¨¢ndolas nunca intuimos que fueran a tener ¨¦xito¡±. Lo dice con una sonrisa, aunque subrayando la seriedad de la respuesta. ¡°Ahora sonar¨¢ raro, pero yo busco el lado art¨ªstico de los proyectos, no solo el mero entretenimiento¡±. ?Por eso estudi¨® drama jacobino en Oxford? ¡°Claro, porque cuando empec¨¦ mis ¨ªdolos eran actores teatrales. Y lo siguen siendo. Por eso, cuando se estren¨® Clueless, me mud¨¦ de Los ?ngeles a Nueva York, y a¨²n vivo all¨ª. Porque es la capital del teatro, y yo quiero seguir aprendiendo, interpretando shakespeares, rodeado de int¨¦rpretes que me ense?en cosas nuevas, porque siento que a¨²n estoy en la mitad de mi vida¡±.
Esa pasi¨®n interpretativa, ?quiere decir que no tiene l¨ªneas rojas, l¨ªmites en lo que har¨ªa o lo que no? ¡°Estoy seguro de que habr¨¢ cosas que no har¨¦, y hay probablemente gente que reh¨²ya porque intuya que no tendr¨¦ qu¨ªmica con ellos. Sin embargo, no se me ocurren temas espec¨ªficos que rechace, y muchos filmes en los que he actuado habr¨¢n provocado urticaria en otras personas¡±.
Su fichaje por Marvel para encarnar a Ant-Man en cinco filmes, tres como protagonista, alter¨® algunos planes. ¡°Me hizo, por ejemplo, pasar m¨¢s tiempo fuera de casa, y eso duele. Me report¨® m¨¢s fama, pero no agobiante. Me dejaron acercar ese papel a mi rol habitual, el de un tipo de la calle que acaba en una situaci¨®n extraordinaria. Soy experto en esos personajes, que se ven empujados a dar lo mejor de s¨ª, dentro de sus propias limitaciones, y que lo hacen con un sentido de humor y de inseguridad muy de la calle. Tambi¨¦n es como yo veo la vida¡±. Puede que peor le fuera cuando en 2021 People le nombr¨® el hombre vivo m¨¢s sexy del mundo: ¡°Cierto, me provoc¨® un alud de mensajes de mis amigos con todo tipo de bromas¡±.
En Marvel, Paul Rudd vivi¨® otra cara de la industria que le prepar¨® para Cazafantasmas: ¡°Sientes la presi¨®n de formar parte de una franquicia, una saga que significa mucho para mucha gente. Y a la vez tienes que regatear esa sensaci¨®n, porque te debilitar¨ªa en tu aproximaci¨®n al personaje. Me enfoco en trabajar lo mejor posible. El guion de Cazafantasmas: m¨¢s all¨¢ [2021] era extraordinario por c¨®mo imbricaba a los protagonistas originales con la nueva generaci¨®n. Y cuando se estren¨® fue un alivio y una alegr¨ªa. Ahora incluso nos trasladamos al cuartel de bomberos original, y de manera org¨¢nica Jason Reitman ha pasado el testigo de su padre [Ivan, director de la original] y de Harold Ramis [actor y coguionista de la primera], ambos fallecidos, a su amigo, el realizador Gil Kenan... Ha sido fluido, natural y en colaboraci¨®n¡±.
En la respuesta sobre aprender de los m¨¢s grandes, Rudd ya ha dado una pista sobre el ¨²ltimo gran nombre que se ha cruzado en su camino, y es el de Meryl Streep, porque el actor apareci¨® en la tercera temporada de Solo asesinatos en el edificio. ¡°Yo fich¨¦ por la emoci¨®n de trabajar con Steve Martin y Martin Short, pero lo de Meryl Streep... Es otro nivel. Ya en las videollamadas de preproducci¨®n me asombr¨®. Cuando en la pantalla hab¨ªa otros 30 rostros y de repente ella hablaba, el resto se quedaba en silencio: siempre aportaba cosas fascinantes al guion. A¨²n quedaba lo mejor: el rodaje. Nunca sab¨ªas en qu¨¦ momento arrancaba el personaje, porque parec¨ªa que no estaba haciendo nada. Que solo estaba ah¨ª. Y de repente me daba cuenta de que ya hab¨ªa entrado en el personaje, que dec¨ªa sus di¨¢logos... Es un misterio c¨®mo logra fluir as¨ª, y por eso es tan buena¡±, cuenta con cara de aut¨¦ntico asombro.
El d¨ªa anterior a la entrevista ¡ªque se desarroll¨® en un hotel madrile?o el pasado lunes¨D Rudd acudi¨® al estadio Metropolitano a ver el Atl¨¦tico de Madrid-F. C. Barcelona, que acab¨® con debacle para el equipo local. Por eso la charla acaba con sus pasiones deportivas y el legado emocional que pasa de padres a hijos. ?vido seguidor de los Chiefs, desde que la cantante Taylor Swift y el jugador Travis Kelce iniciaron una relaci¨®n sentimental, Rudd ya solo es el segundo fan m¨¢s famoso de ese equipo. ¡°?Y a mucha distancia de la primera!¡±, estalla en carcajadas. ¡°Kelce es un gran jugador, desde luego... Hay una cosa muy rara en ser aficionado de un equipo que durante d¨¦cadas no ganaba nada, y que encajaba muy bien con mi naturaleza de... subestimado, con aire de desvalido. Y en un momento, tu equipo se convierte en el m¨¢s famoso del mundo, gracias a que tiene el mejor quarterback del mundo, que por cierto Griezman es muy fan de Patrick Mahones, y le apoya la artista m¨¢s famosa del mundo. A cambio hoy hay gente que nos odia sin raz¨®n aparente, y otros equipos nos quieren ganar a toda costa. Es un sentimiento raro que choca con lo que hemos sido siempre¡±.
Babelia
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