Manuel Marlasca, periodista de sucesos: ¡°Todav¨ªa tengo el s¨ªndrome del impostor al escribir literatura¡±

Cada tarde Manuel Marlasca (Madrid, 57 a?os) lleva los sucesos m¨¢s destacados hasta los hogares de miles y miles de personas a trav¨¦s de la secci¨®n Expediente Marlasca, en el programa Tardear, de Telecinco. Su cara se vincula desde hace a?os con el periodismo de los cr¨ªmenes m¨¢s importantes del pa¨ªs. Ha pasado por m¨²ltiples medios de comunicaci¨®n como el Ya, El Sol, Interviu o La Sexta, entre otros. Ahora ha dado el salto a la literatura de ficci¨®n con su primera novela T¨² bailas y yo disparo (Editorial Destino), que acaba de llegar a las librer¨ªas. Reconoce que le ha costado dejar a un lado su labor de reportero, a la que ha dedicado m¨¢s de 35 a?os, para meterse de lleno en la historia de homicidios y corrupci¨®n. Le ha llevado m¨¢s de un a?o y medio escribirlo, tras homenajear al desaparecido Grupo X de Homicidios de Madrid.

Pregunta. ?Por qu¨¦ el salto de la no ficci¨®n a la novela?

Respuesta. Yo, por encima de todo, soy un gran lector. Lector de todo, con un 60% de literatura y un 40% de ensayo. El a?o que menos leo llego a 30 libros y el que m¨¢s a 45, m¨¢s o menos. Siempre ve¨ªa la literatura como esa especie de Moby Dick inalcanzable para m¨ª, porque le tengo mucho respeto a la creaci¨®n literaria y a la ficci¨®n, si es de verdad. Lo cierto es que 2006 ten¨ªa apuntes para lo que alg¨²n d¨ªa pens¨¦ que podr¨ªa ser una novela. Algunos tomados de la realidad, frases que o¨ªa en la Brigada de Polic¨ªa Judicial de Madrid, personajes que ve¨ªa por la calle o en una comisar¨ªa, un esbozo de una trama, cr¨ªmenes que podr¨ªan tener un desarrollo en la ficci¨®n. Ese cuaderno lo rele¨ª en 2019 y empec¨¦ a crear una historia. El impulso y el empe?o de mi agente literaria M¨®nica Carmona fue lo que definitivamente me hizo dar el salto. Le mand¨¦ los 150 primeros folios con la esperanza de que me dijese que era mejor que me dedicara al true crime y, sin embargo, le parecieron estupendos y me anim¨® a seguir.

P. ?Se siente c¨®modo en la literatura?

R. Todav¨ªa no. Todav¨ªa tengo un poco el s¨ªndrome del impostor al escribir literatura. Me provoca tanto respeto la literatura que siento que me he colado en un mundo que no es el m¨ªo. Creo que hacer ficci¨®n es algo muy, muy complicado, dif¨ªcil, muy serio. He tenido que enterrar al periodista que hay en m¨ª y que no apareciera por ninguna parte. La tentaci¨®n cuando uno lleva escritos seis libros de no ficci¨®n y guiones de radio se tiende a escribir como un periodista, pero la literatura no tiene nada que ver. En la literatura tienes que echar al periodista porque es un trabajo de orfebrer¨ªa pura.

P. ?Por qu¨¦ acude a un grupo de Homicidios, como el X de Madrid, ya desaparecido?

R. Yo quer¨ªa centrar la acci¨®n en la Brigada de Polic¨ªa Judicial de Madrid, pues es el sitio en el que yo m¨¢s he disfrutado trabajando. Creo que es una brigada ¨²nica en Espa?a, creo que lo que ha pasado por ah¨ª y lo que sigue pasando no lo tiene otra brigada y en un grupo de Homicidios. Si dec¨ªa el V o el VI, alguien se podr¨ªa ver aludido porque todav¨ªa existen. Recuper¨¦, resucit¨¦ el grupo X porque tambi¨¦n era una forma de homenaje en aquella ¨¦poca en la que hab¨ªa 100 cr¨ªmenes en un solo a?o.

P. ?Qu¨¦ es lo que m¨¢s le ha costado al escribir el libro?

R. Darle personalidad y rasgos propios a cada uno de los personajes, hacerlos que se distingan del resto. Ten¨ªa que darles personalidad con una palabra o con la forma de vestir o de moverse. Eso y apartar al periodista que lleva conviviendo conmigo 36 a?os. Decirle que te tengo que encerrar en este cuarto oscuro, porque aqu¨ª tiene que aparecer otro Manu Marlasca que es el que crea ficci¨®n.

P. Alguno de los personajes tiene vinculaci¨®n con polic¨ªas reales.

R. S¨ª, s¨ª. Yo he robado el alma y algunas cosas m¨¢s para los personajes. Hasta con los nombres he jugado con ellos. Hay un Paco Mangas reci¨¦n jubilado que existe y que tiene los mismos c¨®digos de vestimenta que el de la novela. Todos son de ficci¨®n, pero hay apuntes de realidad.

P. ?Le ha costado mucho documentarse?

R. [Sonr¨ªe] No, la documentaci¨®n la tra¨ªa de serie. S¨ª que hay un par de episodios que s¨ª he necesitado pasar muchas horas con polic¨ªas y forense para tratar el cap¨ªtulo dedicado a una autopsia que he tenido que recordar y refrescar. Ahora ya no se hacen fotos sino que se graban. Y luego con las nuevas tecnolog¨ªas y las plataformas encriptadas que utilizan modernamente los delincuentes para comunicarse.

P. Dice que ha dejado a un lado al periodista, pero sus descripciones son muy minuciosas.

R. Tendr¨¢n algo de la cr¨®nica period¨ªstica. Siempre me han dicho que el lector tiene que ver, o¨ªr y oler por ti. T¨² eres los ojos, el o¨ªdo y el olfato del lector y obviamente esa parte se escapa y de ah¨ª salen esas descripciones.

P. El libro tiene una trama muy compleja.

R. Es una trama complicada, pero a m¨ª me interesaban los claroscuros, las zonas de sombra que tiene todo el mundo. No creo en los superh¨¦roes totalmente buenos o que los malvados sean malos del todo. Creo que todos tienen debilidades y que hasta la peor persona tiene una debilidad. Luego me interesaba mucho los l¨ªmites y c¨®mo la gente se los salta para llenarse los bolsillos, lo que es repugnante, o por un bien superior.

P. ?Se ha inspirado en alg¨²n hecho real o es una mezcla de varios?

R. Hay una parte de la novela que est¨¢ basada en un hecho real, el asesinato del doctor de la cl¨ªnica Ruber, el ur¨®logo Eugenio Rivero, que asesinaron en la calle de Juan Bravo, en Madrid.El resto es pura ficci¨®n, salvo alg¨²n apunte tomado de un juez de instrucci¨®n real, que en el libro se llama P¨¦rez de Dios. Echaba a los polic¨ªas por entrar de uniforme a su despacho.

P. ?Qu¨¦ crimen ha marcado su carrera period¨ªstica?

R. Probablemente, el de Anabel Segura. Yo era muy joven y estaba empezando. En ese momento estaba en El Mundo. Di mucha informaci¨®n y ten¨ªa ya muy buenas fuentes. Pero sobre todo, porque recib¨ª una lecci¨®n del padre de Anabel Segura. Publiqu¨¦ en Navidad una informaci¨®n veraz y buena de que la polic¨ªa trabajaba con la seguridad de que Anabel hab¨ªa sido asesinada y no secuestrada. Y eso hizo mucho da?o a la familia porque cay¨® en manos de la hermana de Anabel. Aquello me marc¨® mucho. El padre me envi¨® una felicitaci¨®n de Navidad en la que me cont¨® toda la historia. Aprend¨ª que se puede hacer mucho da?o cuando se trata un material tan sensible.

P. ?Habr¨¢ continuaci¨®n a esta novela?

R. Lo que quieran los lectores. Yo tengo emborronado ya varios cuadernos para la siguiente historia.

P. ?Por qu¨¦ se ha decantado por la Polic¨ªa Nacional y no la Guardia Civil?

R. Porque conozco mucho mejor la Polic¨ªa, aunque tambi¨¦n conozco la Guardia Civil. Adem¨¢s, ya est¨¢ Lorenzo Silva [r¨ªe], que es inmejorable ya con Bevilacqua y Chamorro. Eso s¨ª, a la editorial le pareci¨® muy interesante que los protagonistas fueran un grupo de investigaci¨®n, que no hubiera un personaje o dos como tales. Era un trabajo en equipo, grupal y con diferentes experiencias y formaciones.

P. Prensa escrita, radio, televisi¨®n, libros de no ficci¨®n y ahora novela. ?D¨®nde se encuentra mejor?

R. M¨¢s c¨®modo me siento donde estoy. Creo que la de ahora es la etapa m¨¢s feliz de mi vida, la que me est¨¢ dando la productora de Ana Rosa Quintana. A?oro los peri¨®dicos porque yo me hice periodista para escribir en un peri¨®dico. A?oro las rotativas, la tinta, las redacciones llenas de papeles y sumarios.