El Ministerio de Defensa expone en sus instalaciones al menos 11 cuadros incautados durante la Guerra Civil
El departamento se basa en un decreto franquista para argumentar que las pinturas, expoliadas durante el conflicto y que hoy decoran el Cuartel General del Ej¨¦rcito en Madrid, han pasado a pertenecer al Estado
En alg¨²n dormitorio. En pasillos. En un comedor y en un despacho privado. Hasta 11 pinturas incautadas durante la Guerra Civil decoran las paredes del Cuartel General del Ej¨¦rcito, en Madrid. A sus due?os se las quitaron de las manos en medio de la contienda y nunca m¨¢s las recuperaron. Dif¨ªcilmente pod¨ªan saber, o imaginar, que su periplo las llevar¨ªa a ser expuestas en un edificio del Gobierno. El mismo Ejecutivo que hoy, por otro lado, promete justicia y reparaci¨®n a las v¨ªctimas del franquismo. El Ministerio de Defensa no ha informado del inventario ni de la ubicaci¨®n de las obras en una declaraci¨®n p¨²blica: fue por una solicitud de EL PA?S a trav¨¦s del portal de Transparencia. La respuesta considera adem¨¢s que se produjo la ¡°usucapi¨®n¡±, t¨¦rmino t¨¦cnico que puede traducirse como la revisi¨®n de la propiedad a favor del Estado, despu¨¦s de a?os de silencio de los due?os originales. Como base legal, Defensa se acoge a un decreto de 1963. Es decir, de la dictadura.
En el inventario no figuran los autores o el valor estimado de los cuadros. Tampoco la procedencia original, lo que ayudar¨ªa una eventual reclamaci¨®n. Solo aparece en cada ficha una foto, junto con el t¨ªtulo (El charco de Zaragoza, Virgen con ni?o, La dolorosa, Pareja de manos en la calle¡), las dimensiones, la localizaci¨®n actual o los materiales empleados. Y la fuente de ingreso: ¡°Junta de Incautaci¨®n Tesoro Art¨ªstico¡±. Hubo miles de piezas secuestradas durante la Guerra Civil, ya fuera por este organismo de la Rep¨²blica, con la intenci¨®n de proteger el patrimonio, o por el bando sublevado. Una vez terminado el conflicto, el franquismo devolvi¨® algunas obras, pero entreg¨® otras muchas a instituciones, universidades, museos o incluso a propietarios privados. De la mayor¨ªa se perdi¨® el rastro, incluidas las 11 pinturas de Defensa. ¡°Hablamos de una cifra extraordinaria. Un movimiento de obras como jam¨¢s se ha producido en Espa?a¡±, se?ala Arturo Colorado Castellary, catedr¨¢tico y principal investigador de este asunto.
¡°Los objetos provenientes de los dep¨®sitos constituidos por incautaciones de la Guerra Civil (1936-39) ingresaron en los museos y organismos oficiales por usucapi¨®n o prescripci¨®n adquisitiva. Una vez agotados todos los plazos de publicidad y exposiciones sin que fueran reclamados por sus propietarios, fueron declarados propiedad del Estado por decreto 1916 de 10 de octubre de 1963 n? 2527/63¡å, argumenta hoy Defensa. Lo que genera una mezcla de indignaci¨®n, asombro, dudas legales y morales en los expertos entrevistados.
Muchas v¨ªctimas debieron exiliarse o sufrieron represalias, de ah¨ª que les resultara complicado, o imposible, conocer el paradero final de sus obras o plantearse pedir su devoluci¨®n. En todo caso, Laura S¨¢nchez Gaona y Encarnaci¨®n Roca, abogadas contratadas por algunos herederos para intentar recuperar sus bienes, consideran que la obtenci¨®n de la propiedad por parte del Estado nunca tiene cabida si el punto de partida es una atribuci¨®n il¨ªcita, como una incautaci¨®n o un expolio. Y Colorado recuerda que ¡°todos estos bienes fueron entregados en calidad de dep¨®sitos ¡ªla documentaci¨®n es muy clara en este sentido¡ª, lo que, en opini¨®n de los juristas, no prescribe¡±.
¡°Alucino: ?aplican la usucapi¨®n bas¨¢ndose en la normativa franquista sin menci¨®n alguna a la Ley de Memoria Democr¨¢tica!¡±, se sorprende adem¨¢s el catedr¨¢tico. El rango superior de una ley, como la aprobada en octubre de 2022, respecto a un decreto tambi¨¦n cuestiona la versi¨®n de Defensa. Y ciertamente, m¨¢s all¨¢ del ¨¢mbito jur¨ªdico, su interpretaci¨®n parece ir en direcci¨®n contraria al esp¨ªritu de la Ley de Memoria Democr¨¢tica.
Esta normativa, aprobada por el Gobierno progresista de coalici¨®n entre PSOE y Unidas Podemos, ampliaba en su art¨ªculo 3 la condici¨®n de v¨ªctima a quienes ¡°padecieron la represi¨®n econ¨®mica con incautaciones y p¨¦rdida total o parcial de bienes, multas, inhabilitaci¨®n y extra?amiento¡±. Y en el 31 establec¨ªa ¡°el derecho al resarcimiento de los bienes incautados¡±, adem¨¢s de prometer en el plazo de un a?o ¡ªpara octubre de 2023¡ª una auditor¨ªa de todo lo expoliado.
De momento, tan solo el Ministerio de Cultura ha publicado un inventario, con ocho meses de retraso, donde identifica unas 5.000 piezas con esta procedencia de entre todas las colecciones de los 16 museos estatales que dependen de su departamento. De los dem¨¢s, casi un a?o despu¨¦s de que venciera el plazo impuesto por la ley, nada se sabe. Ni tampoco del desarrollo reglamentario que promet¨ªa la normativa.
En las investigaciones de Colorado, de hecho, el total de piezas incautadas hoy en manos de Defensa asciende a 76 pinturas y 56 muebles y otros bienes. Y la abogada S¨¢nchez Gaona busca tres ¨®leos entregados hace d¨¦cadas al ministerio, que pretenden recuperar los herederos del Marqu¨¦s de Villalonga. Defensa comparti¨® a este diario un segundo listado, con 70 bienes, entre estatuillas, pinturas, abanicos o jarrones, ubicados en el Cuartel General del Mando de Apoyo a la Maniobra (A Coru?a), del que no se aclara que incluya obras incautadas. Y un tercero, con una quincena de piezas depositadas en la antigua Capitan¨ªa General de la 6? Regi¨®n Militar (A Coru?a), procedentes del Servicio de Defensa del Patrimonio Art¨ªstico Nacional (Zona Levante). ¡°En ninguno de los dos documentos hay obras de las entregadas en la posguerra. No dudo de la buena voluntad de Defensa, el ¨²nico ministerio que ha contestado enviando la lista de bienes, pero es evidente que no controlan el tema. Sirven de muy poco estos dos listados¡±, apunta el catedr¨¢tico. Defensa no atendi¨® a la petici¨®n de aclaraciones que le hizo este peri¨®dico.
Respecto al inventario previsto en el art¨ªculo 31 de la ley, la Secretar¨ªa de Estado de Memoria Democr¨¢tica se limit¨® a contestar: ¡°La auditor¨ªa se est¨¢ realizando y a¨²n tardar¨¢, dada la complejidad de bienes incautados y la parcelaci¨®n de archivos. Hasta que no finalice la auditor¨ªa no se puede desarrollar su normativa. Una vez finalizada la auditor¨ªa se har¨¢ p¨²blica¡±, informa Miguel Gonz¨¢lez.
EL PA?S traslad¨® la misma petici¨®n, a trav¨¦s de Transparencia, a todos los ministerios del Gobierno: que informasen si ten¨ªan alguna obra procedente de incautaciones durante la Guerra Civil o la dictadura. La mitad sigue sin haber contestado, incumpliendo el plazo previsto de un mes. Ocho ministerios respondieron que no guardan ninguna. El departamento de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes confirm¨® que tampoco tiene en varios organismos que dependen del mismo, aunque su Subsecretar¨ªa a?adi¨®: ¡°Si bien en el inventario de obras de arte no se dispone de datos relativos a la procedencia de las obras, se est¨¢ trabajando para dar cumplimiento a [¡] la ley de Memoria Democr¨¢tica. Por ello, se ha iniciado una investigaci¨®n para averiguar dicha procedencia y poder confeccionar, en el futuro, un inventario de bienes¡±.
El Ministerio de Industria y Turismo destac¨®: ¡°En el ¨¢mbito de este departamento y por Resoluci¨®n de la Presidencia de Turespa?a de 30 de mayo del 2023, se han devuelto dos obras de arte a la familia de Ram¨®n de la Sota [due?o de un imperio empresarial y vinculado al nacionalismo vasco] al haberse podido comprobar que las mismas hab¨ªan sido incautadas en 1937¡å. Sin embargo, el despacho Ram¨®n y Cajal reclama a este departamento al menos otros dos cuadros que considera propiedad de los De la Sota y Llano que ha hallado en el parador de Almagro. ¡°Se est¨¢n llevando a cabo los trabajos de investigaci¨®n necesarios para determinar si alguna otra de las obras adscritas a ese organismo aut¨®nomo pudiera provenir de incautaciones¡±, apunta Industria y Turismo en su respuesta.
¡°Para cumplir con el esp¨ªritu de la Ley de Memoria Democr¨¢tica, en vez de quedarse en la pura norma, hay que hacer todo lo posible para facilitar la reparaci¨®n para los herederos o las instituciones a las que se expoliaron los bienes¡±, sostiene S¨¢nchez Gaona. Entre otros, la abogada persigue recuperar los que pertenecieron a Pedro Rico, alcalde republicano de Madrid, y que hoy reclama su familia. El Cabildo de Gran Canarias lleva tiempo impulsando la devoluci¨®n de cinco ¨®leos, expuestos en la Casa de Col¨®n. Otras obras de Rico se hallan en el Prado, el Museo del Romanticismo, el del Traje o los de Bellas Artes de Asturias y Valencia, seg¨²n las investigaciones de S¨¢nchez Gaona. Hasta ahora, sin embargo, ninguna ha sido devuelta.
Preocupados por la inacci¨®n del Gobierno y presionados por su edad avanzada, los herederos del alcalde republicano de Madrid llegaron a enviar una carta al presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez. Quien, por otro lado, estuvo presente en un acto de homenaje a Rico, entre otras v¨ªctimas del franquismo. El pasado 31 de julio, su misiva recibi¨® una respuesta, a la que tuvo acceso EL PA?S. En tres p¨¢rrafos, el director del Gabinete de la Presidencia del Gobierno, ?scar L¨®pez ?gueda, recuerda el contexto y el trabajo realizado hasta ahora por el Ejecutivo. En el cuarto, y ¨²ltimo, afirma: ¡°Conscientes de la importancia que tiene para usted [¡] que se act¨²e con celeridad [¡] me consta que desde el Ministerio de Cultura han emprendido ya las debidas actuaciones, motivo por el que damos traslado de su comunicaci¨®n¡±.
El tiempo corre, y miles de obras siguen lejos de sus casas. ¡°Mientras no den acceso a toda la informaci¨®n es imposible¡±, tercia Colorado. Quiz¨¢s, tras el paso de varias generaciones, muchos nietos no sepan reconocer cuadros de sus abuelos o hayan olvidado incluso que alguna pieza tal vez les pertenezca. Mientras, los soldados del Cuartel General del Ej¨¦rcito en Madrid ven desde hace a?os 11 pinturas incautadas. Algunos incluso cada d¨ªa, antes de acostarse o almorzar. El texto de Defensa reza: ¡°Por lo que se conoce y se tiene constancia, estos bienes est¨¢n destinados a funciones de exorno y decoro para fines de la alta representaci¨®n del Estado en los edificios donde se custodian¡±. A cambio de tan ilustre misi¨®n, ya no embellecen sus hogares originales. Ah¨ª, desde hace d¨¦cadas, solo quedan los huecos.
Babelia
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