Intentar cambiar tu ciudad como los vecinos de ¡®El 47¡ä
La pel¨ªcula habla sobre la parte de la construcci¨®n de la ciudad que, descuidada por pol¨ªticos, queda en manos de los ciudadanos. ?Tiene peso hoy la iniciativa ciudadana en la construcci¨®n de un barrio?
La pel¨ªcula El 47 es la historia de un barrio, Torre Bar¨®, al norte de Barcelona, y la acci¨®n colectiva que consigui¨®, sucesivamente, la construcci¨®n de chabolas primero, m¨¢s tarde casas, la llegada del agua y la electricidad y, finalmente, la del transporte p¨²blico: el autob¨²s 47 que da nombre al filme.
Todo eso sucedi¨® en poco m¨¢s de tres d¨¦cadas. Lo hizo posible el tes¨®n ¡ªy el hambre¡ª de casi 3.000 inmigrantes que llegaron a Barcelona provenientes de Andaluc¨ªa y Extremadura. La Torre Bar¨® hab¨ªa sido una casa con vistas a la ciudad levantada por la familia Pin¨®s en el siglo XVII y hoy es un mirador, el emblema de ese barrio hecho a s¨ª mismo ¡°el Pedralbes del norte¡±, en palabras del concejal de urbanismo de la ¨¦poca del alcalde Tr¨ªas.
Aunque la pel¨ªcula de Marcel Barrena centra el secuestro del autob¨²s en la decisi¨®n de uno de los vecinos, el conductor Manuel Vital, la acci¨®n colectiva planific¨®, apoy¨® y logr¨® que el 47 llegara a Torre Bar¨® el 7 de mayo de 1978, como anteriores secuestros, apoyados por Comisiones Obreras y el PSUC, fueron la ra¨ªz de las l¨ªneas de autobuses que alcanzaron otros barrios barceloneses como Roquetes o Prosperidad. As¨ª, aunque el secuestro le cost¨® a Vital una estancia en prisi¨®n de medio a?o y un d¨ªa, el mismo 7 de mayo, otro autob¨²s, el n¨²mero 2, fue secuestrado y conducido a Ciudad Meridiana, como cont¨® en este diario Marc Andreu; la acci¨®n fue colectiva.
Con todo, la pel¨ªcula recuerda el origen de muchos crecimientos urbanos. Y as¨ª, enciende una luz para quien haya olvidado o desconozca que en varias ciudades espa?olas todav¨ªa existe chabolismo: los 14 poblados de Madrid capitaneados por la Ca?ada Real, los 2.400 tinerfe?os que duermen en chabolas o las 180 personas desalojadas hace unos d¨ªas del barrio sevillano de El Vacie. Y confiere esperanza al comprobar la esforzada y terca transformaci¨®n de las chabolas en casas y de los poblados chabolistas en barrios.
As¨ª, aunque Torre Bar¨® tenga hoy calles asfaltadas ¡ªmal conservadas¡ª, carece de aceras porque la construcci¨®n y el mantenimiento de un barrio ¡ªde una ciudad y hasta de una casa¡ª es un trabajo vitalicio, lo contrario a la estabilidad. Entonces, ?es necesario ir a la c¨¢rcel para mejorar un barrio? Hoy existen recursos que la mayor¨ªa de los ayuntamientos ponen al servicio del ciudadano. No exentos de la burocracia que caracteriza a nuestra administraci¨®n, los Consejos de Barrio de Barcelona, o la web Tu Ayuntamiento te escucha de Bilbao, buscan atender peticiones razonables y consensuadas de los ciudadanos. Son muchas las mejoras: escaleras, iluminaciones, mejoras en el pavimento, l¨ªneas de autobuses, parques, jardines, plazas p¨²blicas, ¨¢rboles o bancos que los ciudadanos han logrado reuniendo ¡ªen el caso de Barcelona¡ª 15.000 firmas ¡ªsi la petici¨®n afecta a la ciudad¡ª o 9.000, si lo que se solicita es un proceso participativo.
Cualquier ciudadano mayor de edad puede registrar una petici¨®n respaldada por las firmas comprobadas. Para eso, naturalmente, se ha de ser ciudadano. Eso buscaban los primeros habitantes de Torre Bar¨®: tener un domicilio que les permitiera ser personal y administrativamente. Por eso se entiende a las familias que llevan varias generaciones establecidas en ese barrio y cuesta m¨¢s entender a quienes son incapaces de ponerse hoy en la piel de los nuevos inmigrantes: los que hoy tienen menos que lo que ten¨ªan ellos cuando no ten¨ªan nada.
Marcel Barrena explica que entendi¨® la necesidad de contar esta historia cuando se puso en la piel de sus antepasados, que llegaron a L¡¯Hospitalet. Clara Segura, la actriz que interpreta a la Carmen, la monja que se cas¨® con Manuel Vital y ense?¨® a leer a medio Torre Bar¨®, ha contado que, cuando ley¨® el guion, evoc¨® el momento en que su familia lleg¨® a Sant Just Desvern, donde hoy vive. En la pel¨ªcula, el actor que protagoniz¨® la serie Merl¨ª, Carlos Cuevas, interpreta a Pasqual, un joven inquieto que trabaja en el Ayuntamiento y utiliza el 47. Es un homenaje a Pasqual Maragall, que terminar¨ªa siendo alcalde de su ciudad y, durante una semana, durmi¨® en casa de Manuel Vital y Carmen para entender c¨®mo era vivir en Torre Bar¨® y qu¨¦ pod¨ªa hacer para mejorarlo.
Es importante darse cuenta de que las mejoras pueden trabajarse en todos los barrios. Hoy el ¨ªndice de criminalidad de Torre Bar¨® es el mismo que el de Sant Gervasi. Como barcelonesa, recuerdo a una vecina de mi madre, la Se?ora Camps, reuniendo firmas para solicitar la instalaci¨®n de escaleras mec¨¢nicas en el Putxet. Lo consigui¨®. Y las utiliz¨®. Por eso conviene recordar que el trabajo no cesa. Para algunas personas es m¨¢s dif¨ªcil bajar que subir una escalera. Este verano, Barcelona inaugur¨® sus primeras escaleras mec¨¢nicas reversibles en La Gl¨°ria, en el distrito de Gracia.
Babelia
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