C¨®mo dimensionar la pederastia en la Iglesia Cat¨®lica

Tres organizaciones iniciaron el fin de semana pasado distintas campa?as de env¨ªos masivos a esta defensora. Por la v¨ªa de replicar muchas veces las mismas peticiones pretenden la rectificaci¨®n de informaci¨®n, aunque esta presi¨®n lo ¨²nico que consigue es sepultar otros mensajes. Una de esas quejas ha llegado tambi¨¦n por medio de algunos lectores, que cuestionan c¨®mo reflej¨® el peri¨®dico el informe que el Defensor del Pueblo, ?ngel Gabilondo, present¨® en el Congreso. En ¨¦l, estima que el 1,13% de la poblaci¨®n adulta espa?ola ha sufrido abusos en la infancia en ¨¢mbitos religiosos. La noticia se public¨® a finales de octubre, pero los reproches han surgido justo en la semana en la que la Conferencia Episcopal Espa?ola (CEE) viajaba al Vaticano convocada por el Papa.

La demanda principal de estos lectores replica la cr¨ªtica que el presidente de la CEE, Juan Jos¨¦ Omella, hizo a la extrapolaci¨®n que varios medios realizaron sobre el porcentaje expuesto por Gabilondo, a la que tild¨® de ¡°intencionada y err¨®nea¡±. En EL PA?S se public¨® con este titular: La investigaci¨®n del Defensor del Pueblo estima en 440.000 las v¨ªctimas de pederastia en la Iglesia espa?ola.

¡°No hace falta ser un experto en demoscopia y estad¨ªstica para afirmar que tal proyecci¨®n es un desprop¨®sito¡±, repiten varios correos de id¨¦ntico enunciado. ¡°Dejen de publicar la aludida informaci¨®n porque constituye un enga?o¡±. ¡°Esta cantidad se obtiene a partir de un burdo c¨¢lculo matem¨¢tico¡±, afirma en un correo el lector Francisco Vicente Toral. ¡°Aparte de introducir un elemento de poca seriedad al art¨ªculo (no hay experto en estad¨ªstica que lo sostenga), parece m¨¢s propio de la prensa sensacionalista¡±.

Ninguno de los cuatro expertos en encuestas consultados cree que sea un error garrafal hacer una extrapolaci¨®n de un porcentaje. Se hace, por ejemplo, en la Encuesta de Poblaci¨®n Activa del Instituto Nacional de Estad¨ªstica, que cada trimestre cuantifica el n¨²mero de personas con empleo. Lo que ocurre es que sociol¨®gicamente hay tantos matices cuando se habla de v¨ªctimas de abusos a lo largo de seis d¨¦cadas que es complicado dar en el clavo.

¡°Traducir los porcentajes en un n¨²mero absoluto de personas es algo rutinario¡±, afirma Kiko Llaneras, periodista de datos de EL PA?S. ¡°En este caso ser¨ªa algo as¨ª: seg¨²n el estudio del Defensor del Pueblo, alrededor del 1% de encuestados dice haber sufrido abusos en el ¨¢mbito religioso (91 personas de 8.013); y esa proporci¨®n, teniendo en cuenta el censo espa?ol, se traduce en unas 440.000 personas. Si a?adimos un margen de error, podemos decir que entre 350.000 y 530.000 personas afirman haber sufrido abusos sexuales¡±.

En la informaci¨®n, se advert¨ªa al lector de que la cifra proced¨ªa de un c¨¢lculo elaborado por el peri¨®dico y se expon¨ªan los datos usados en esa operaci¨®n. Por ejemplo, que la base eran los 38,9 millones de empadronados en Espa?a en 2022, de entre 18 y 90 a?os (franja de edad que abarca la encuesta). Tambi¨¦n avisaba el texto de que el informe del Defensor no recoge una cifra de los afectados y de que Gabilondo eludi¨® hacer el c¨¢lculo en n¨²meros absolutos en su comparecencia ante la prensa en el Congreso.

??igo Dom¨ªnguez, uno de los dos periodistas de EL PA?S que firmaban la informaci¨®n, defiende que se hiciera una extrapolaci¨®n para dimensionar el drama. ¡°Los medios se pasan el d¨ªa traduciendo en cifras las encuestas para hacerlas comprensibles¡±, recuerda. ¡°Si un sondeo dice que al 20% de los espa?oles les gusta el color verde, eso son aproximadamente nueve millones de personas. Nadie lo discutir¨ªa. Aqu¨ª el problema es el asunto que se trata¡±.

El reportero explica que Gabilondo no quiso hacer extrapolaciones, porque ¡°es el n¨²cleo del problema, lo que la Iglesia m¨¢s teme y lo que iba a discutir: de cu¨¢nta gente estamos hablando¡±. Pero recuerda que en el informe el defensor justificaba as¨ª la idoneidad de hacer una encuesta: ¡°Cuantificar la dimensi¨®n del problema es siempre una necesidad si se quiere conocer la relevancia y alcance de un fen¨®meno que es social y no solo individual¡±. Y a?ad¨ªa el informe: ¡°La necesidad de disponer de datos cuantitativos deriva adem¨¢s de que con frecuencia se ha negado, desde ciertos actores (en general sin aportar datos), que los abusos en el seno de la Iglesia cat¨®lica representen un problema muy extendido¡±.

¡°Cualquiera entiende que medir con exactitud un fen¨®meno de victimizaci¨®n es complicado, con encuestas y con cualquier instrumento¡±, a?ade Llaneras. ¡°Pero estas dificultades multiplican el valor del trabajo de los compa?eros del peri¨®dico que han investigado los abusos y aportaron una evidencia que es la principal prueba de la magnitud del fen¨®meno¡±.

Un equipo de EL PA?S ha investigado desde octubre de 2018 m¨¢s de 500 casos de abusos, tras recabar el testimonio de centenares de v¨ªctimas, que han sido recogidos en cuatro informes entregados peri¨®dicamente a la CEE, al Defensor del Pueblo y al Vaticano entre 2021 y 2023. Adem¨¢s, abri¨® una base de datos que se actualiza con cada caso que sale a la luz.

¡°Hay un gran peso de casos en los que no hemos podido ir m¨¢s all¨¢ del testimonio de la v¨ªctima y comprobaciones muy b¨¢sicas, como que coincidan las fechas o exista el lugar¡±, afirma Julio N¨²?ez, uno de los autores de la investigaci¨®n. A veces porque el afectado no quiere continuar o porque la Di¨®cesis donde se produjeron los hechos no responde a la petici¨®n de informaci¨®n. Por eso, el peri¨®dico hizo una recopilaci¨®n y se la entreg¨® al Papa. La raz¨®n es que el pont¨ªfice orden¨® en 2009 a la jerarqu¨ªa eclesi¨¢stica que debe abrir un proceso de indagaci¨®n de todas las denuncias de las que tengan conocimiento. Autom¨¢ticamente, la Iglesia abri¨® una investigaci¨®n de esos casos.

El periodismo que ejerce EL PA?S consiste en aportar todos los elementos que ayuden a ponderar los hechos. En este caso, las explicaciones y el lenguaje utilizado ¨Del verbo principal del titular era estimar¨D son una prueba de la transparencia ante los lectores y demuestran que no hab¨ªa una intenci¨®n de manipular la informaci¨®n o de difamar al conjunto de la Iglesia. Fue un ejercicio period¨ªstico de contextualizaci¨®n en un drama en el que cobra relevancia cuantificar el n¨²mero de afectados de la pederastia en la Iglesia ¨Dya que esta instituci¨®n no lo hace¨D ante quienes sistem¨¢ticamente niegan su existencia o los minimizan. La estimaci¨®n realizada era una de las muchas f¨®rmulas posibles de dimensionar el problema de la pederastia.

Para contactar con la defensora puede escribir un correo electr¨®nico a defensora@elpais.es o enviar por WhatsApp un audio de hasta un minuto de duraci¨®n al n¨²mero +34 649 362 138 (este tel¨¦fono no atiende llamadas).