Los obispos atacan el informe del Defensor sobre pederastia porque ¡°las encuestas no son fiables¡±

EL PA?S puso en marcha en 2018 una investigaci¨®n de la pederastia en la Iglesia espa?ola y tiene una base de datos actualizada con todos los casos conocidos. Si conoce alg¨²n caso que no haya visto la luz, nos puede escribir a: abusos@elpais.es. Si es un caso en Am¨¦rica Latina, la direcci¨®n es: abusosamerica@elpais.es.

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Los obispos espa?oles se niegan a asumir los resultados del informe del Defensor del Pueblo, ?ngel Gabilondo, sobre pederastia en la Iglesia, conocido el pasado 27 de octubre, y que en una encuesta estimaba que un 1,13% de la poblaci¨®n ha sufrido abusos en ¨¢mbito eclesi¨¢stico. Es un porcentaje equivalente a unas 440.000 personas, seg¨²n los c¨¢lculos de EL PA?S y otros medios, una cifra que no est¨¢ en el informe, pues el Defensor prefiri¨® no hacer extrapolaciones. El cardenal Juan Jos¨¦ Omella, presidente de la Conferencia Episcopal (CEE), no solo ha vuelto a acusar a los periodistas de ¡°difamaci¨®n¡± por un dato que considera ¡°exorbitante¡±, sino que ha atacado el propio sondeo: ¡°Expresamos nuestra intensa decepci¨®n por la citada extrapolaci¨®n y por la dudosa fiabilidad de los resultados presentados de dicha encuesta. (...) Hemos revisado la informaci¨®n sobre la referida encuesta que aporta el Defensor del Pueblo en su informe y, francamente, nos resulta imposible confiar en la veracidad y fiabilidad de tales resultados¡±, ha asegurado este lunes en su discurso de apertura de la asamblea plenaria de la instituci¨®n. Durante esta semana, los prelados espa?oles analizar¨¢n el informe de la auditor¨ªa que en 2022 encargaron al bufete Cremades & Calvo-Sotelo y que recibieron este fin de semana tras meses de retraso. La relaci¨®n con el despacho se ha tornado tensa tras la filtraci¨®n de un borrador no autorizado por un miembro de su equipo y tambi¨¦n por el ultim¨¢tum que la CEE le dio a Cremades el mes pasado para que le entregara el informe.

Con estos argumentos contra el informe del Defensor, Omella llam¨® a un cierre de filas y a rechazar la dimensi¨®n del esc¨¢ndalo: ¡°Una vez m¨¢s, reiteramos que nuestra lucha contra toda clase de abusos debe continuar sin cesar. Pero, al mismo tiempo, afirmamos que permanecen intactas nuestra estima y consideraci¨®n hacia los sacerdotes y religiosos de nuestra Iglesia. Los obispos queremos ofrecer nuestro apoyo a todos ellos. Y aprovechamos esta ocasi¨®n para hacer un llamamiento a los fieles cat¨®licos anim¨¢ndolos a que les muestren su aprecio y confianza. Seamos justos y no juzguemos precipitadamente¡±. Antes hab¨ªa pedido perd¨®n a las v¨ªctimas y asegurado que ¡°de ninguna manera¡± los obispos pretenden ¡°buscar excusas o justificaciones para eludir cualquier responsabilidad¡±.

Juan Cuatrecasas, presidente de la Asociaci¨®n Nacional Infancia Robada (ANIR), opina que ¡°poner en duda cifras de una prospecci¨®n parece una actitud que no viene a cuento¡±. Cuatrecasas afirma que su asociaci¨®n no entiende que haya surgido una pol¨¦mica alrededor de los resultados de la encuesta del Defensor, cuando estudios similares en otros pa¨ªses de la Uni¨®n Europea y de otros continentes no hubo ning¨²n esc¨¢ndalo tras publicarse los resultados, similares a los de Espa?a. ¡°Cuando hablamos de un c¨¢lculo desde los a?os 40, de m¨¢s de 440.000 v¨ªctimas, no veo ning¨²n esc¨¢ndalo. Es m¨¢s, hasta cierto punto creemos que se queda corta [esa cifra]¡±, dice. Del mismo modo, el presidente de ANI subraya que en su asociaci¨®n nadie afirma ¡°que todos los cl¨¦rigos y sacerdotes son pederastas ni han encubierto casos de abusos, pero que hay una cifra de ellos que s¨ª lo han sido o hecho es evidente¡±.

Pero el discurso de Omella ha ido m¨¢s all¨¢ al poner en duda, en general, la credibilidad de cualquier estudio demosc¨®pico y la ciencia sociol¨®gica: ¡°Las encuestas no son fiables porque no hay forma de confirmar la veracidad de la respuesta¡±. Consultado al respecto por este diario el Centro Superior de Investigaciones Cient¨ªficas (CSIC), primera instituci¨®n p¨²blica de investigaci¨®n de Espa?a, no ha querido hacer ninguna valoraci¨®n. Ha indicado que lo m¨¢s adecuado era trasladar la consulta al Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE), que tampoco ha querido hacer comentarios.

El sondeo, basado en m¨¢s de 8.000 entrevistas, una muestra considerada totalmente s¨®lida por todos los expertos, para la CEE no es fiable, ¡°porque una encuesta expresa opiniones, pero no determina hechos objetivos externos a ella¡±. El discurso del presidente de los obispos, entregado a la prensa, es muy severo con el trabajo de GAD3, la empresa que realiz¨® el sondeo. Critica ¡°la elevada diferencia¡± entre las llamadas telef¨®nicas realizadas, 113.126, con ¡°los que se prestaron a contestar el cuestionario y las entrevistas telef¨®nicas finalmente realizadas, 4.802¡å. ¡°La desproporci¨®n es descomunal y demuestra que una parte desconocida de los que se avinieron a ser entrevistados ten¨ªan inter¨¦s en ello¡±, concluye Omella. ¡°Lamentable, GAD 3 no introdujo preguntas de control de sesgo ideol¨®gico. Otras preguntas de control necesarias eran el recuerdo e intenci¨®n de voto y su comparaci¨®n con el total, y los medios de comunicaci¨®n mediante los que accede a la informaci¨®n. Al faltar estos elementos, no existe ninguna garant¨ªa sobre la representatividad de la muestra y carece de significaci¨®n valorable¡±. Este diario ha pedido a Narc¨ªs Michavila, presidente de GAD3, una valoraci¨®n de la cr¨ªtica de la CEE, pero no ha obtenido respuesta. El cardenal ha exigido ¡°una revisi¨®n exhaustiva e imparcial de los datos, para corregir cualquier sesgo que pueda haber sido extrapolado de manera maliciosa¡±.

La CEE ha publicado en la ma?ana de este lunes un tuit en el que afirma que el pasado 28 de octubre solicit¨® al portal de Transparencia de la Administraci¨®n del Estado el estudio completo de GAD3 para el Defensor. ¡°Queremos saber la ficha t¨¦cnica, el cuestionario y todos los datos que aporta el informe. Es p¨²blico, del p¨²blico y pagado con dinero p¨²blico¡­ pero no se conoce¡±. Lo cierto es que los detalles t¨¦cnicos s¨ª est¨¢n incluidos en el informe del Defensor del Pueblo, que dedica 28 p¨¢ginas (de las 779 del total) al estudio demosc¨®pico y su metodolog¨ªa. El Defensor no ha querido hacer declaraciones sobre las palabras de Omella, pero ha avanzado que sus trabajos a¨²n no ha finalizado, ya que tiene que comparecer en el Congreso para exponer detalladamente su informe y debatir con los grupos parlamentarios sobre sus propuestas. ¡°En todo caso, hemos de centrarnos en las v¨ªctimas y en darles una respuesta y una reparaci¨®n adecuada, y en que se adopten las medidas sugeridas y recomendadas al respecto¡±, dice un portavoz.

Omella considera que una encuesta solo expresa opiniones y no determina hechos objetivos porque cae en varios errores. ¡°Por error de muestreo: la calidad de la proyecci¨®n depende de la representatividad de la muestra. Si la muestra no es representativa, los resultados pueden no reflejar con precisi¨®n la realidad de la poblaci¨®n general. Por sesgos en la muestra: si los hay en la recopilaci¨®n de datos, los resultados pueden no reflejar con precisi¨®n la realidad. Por desconfianza e imprecisi¨®n de los resultados: proyectar cifras exactas de la poblaci¨®n en general a partir de una muestra puede generar imprecisiones significativas¡±. Tambi¨¦n ha aludido a la ¡°complejidad de los factores involucrados¡±, por lo que en su opini¨®n ¡°proyectar una tasa de delincuencia basada en un porcentaje de una muestra espec¨ªfica sin considerar estos factores puede dar lugar a conclusiones incorrectas y estigmatizantes¡±.

En todo caso, pese a estas objeciones, en el discurso de Omella, de 33 p¨¢ginas y que aborda otros temas de actualidad, hay numerosas referencias a otros estudios estad¨ªsticos basados en encuestas sobre la situaci¨®n laboral en Espa?a, la pobreza, la inmigraci¨®n, los ¨ªndices de suicidio entre j¨®venes o el consumo de pornograf¨ªa por menores de edad.

El presidente de los obispos realiz¨® esta enmienda a la totalidad de la encuesta tras atacar una vez m¨¢s a la prensa, a la que ya ha acusado de mentir: ¡°Nos sentimos obligados a manifestar el dolor y el malestar que hemos sufrido ante la difamaci¨®n p¨²blica causada por una intencionada y err¨®nea extrapolaci¨®n¡±. Omella afirm¨® que es ¡°una extrapolaci¨®n que el Defensor del Pueblo en reiteradas ocasiones afirm¨® que no se pod¨ªa hacer¡±, cuando en realidad el propio Gabilondo invit¨® a los periodistas a hacerlo en la rueda de prensa. Tambi¨¦n afirm¨® que ¡°muchos t¨¦cnicos¡± han confirmado que no se deben extrapolar los datos de las encuestas. ¡°No se puede extrapolar una cifra del 0,6% cuando el margen de error de la encuesta es del 1,1%¡±, se?ala. ¡°?Qu¨¦ finalidad hay detr¨¢s de este disparate? Es especialmente preocupante para nosotros que esto haya generado una imagen perjudicial de nuestra misi¨®n en general. Es injusto que se les atribuya el mal causado por una minor¨ªa¡±.

Profesionales del sector demosc¨®pico consultados por este diario admiten que los estudios raramente traducen sus porcentajes en n¨²meros absolutos, pero que est¨¢ asumido que es pr¨¢ctica habitual en los medios y si se est¨¢ cuestionando en este caso es porque se trata de un asunto controvertido. Subrayan que, m¨¢s all¨¢ de una cifra concreta, est¨¢ claro que la encuesta del Defensor est¨¢ revelando ¡°cientos de miles de casos¡±.

El nuncio apost¨®lico, el cardenal Bernardito Auza, tambi¨¦n ha hecho alusi¨®n al esc¨¢ndalo de la pederastia: ¡°No podemos y no tenemos jam¨¢s que bajar la guardia en la lucha contra el enorme mal que suponen los abusos sexuales¡±. Del mismo modo ha agradecido al Defensor del Pueblo y a su equipo de expertos por su trabajo y ha expresado el compromiso de la Iglesia para examinar con m¨¢s profundidad sus recomendaciones. En cualquier caso, no ha criticado los resultados de la encuesta ni el papel de la prensa. El lunes pr¨®ximo, de hecho, todos los obispos espa?oles deber¨¢n presentarse en el Roma, ante una ins¨®lita llamada del papa Francisco. El motivo oficial es para para analizar la inspecci¨®n, tambi¨¦n excepcional, que ha hecho el Vaticano de los seminarios espa?oles. No obstante, la convocatoria se anunci¨® dos d¨ªas despu¨¦s de que Omella hiciera su primera valoraci¨®n del informe del Defensor, acusando a los periodistas de mentir sobre las cifras ¡°con la intenci¨®n de enga?ar¡±.