Espa?a inicia la 'era S¨¢ez' con un empate frente a Hungr¨ªa
Ra¨²l y Valer¨®n, l¨ªderes de un equipo plagado de caras nuevas, no han jugado juntos en el homenaje a Puskas
La era de I?aki S¨¢ez al frente de la selecci¨®n espa?ola comenz¨® en Budapest con numerosas pruebas y un discreto empate ante Hungr¨ªa (1-1), con alguna luz y muchos defectos, en un encuentro organizado para que ambos equipos preparasen su inminente participaci¨®n en la fase previa de la Eurocopa y para homenajear a Ferenc Puskas.
La era de I?aki S¨¢ez al frente de la selecci¨®n espa?ola comenz¨® en Budapest con numerosas pruebas y un discreto empate ante Hungr¨ªa (1-1), con alguna luz y muchos defectos, en un encuentro organizado para que ambos equipos preparasen su inminente participaci¨®n en la fase previa de la Eurocopa y para homenajear a Ferenc Puskas.
S¨¢ez ya hab¨ªa avisado de que lo que le interesaba era ver c¨®mo se comportaba el grupo y c¨®mo lo hac¨ªan algunos hombres a los que quer¨ªa probar en determinadas situaciones y posiciones. Adem¨¢s, como es l¨®gico en este mes, hab¨ªa advertido de que lo normal es que no se jugase muy bien teniendo en cuenta las alturas de la pretemporada en la que se encuentran los futbolistas.
Tal y como hab¨ªa anunciado en la v¨ªspera, el seleccionador espa?ol hizo debutar a todos los nuevos, si bien Garc¨ªa Calvo, Marchena, Ra¨²l Bravo y Orb¨¢iz tuvieron el honor de ostentar una titularidad que seg¨²n el t¨¦cnico vasco no significaba nada. Luego lo hizo el central b¨¦tico Juanito.
Precisamente esta posici¨®n es la que ha sufrido una mayor revoluci¨®n por las retiradas de Fernando Hierro y Miguel Angel Nadal, quienes siguieron el partido desde sus casas con cierta 'morri?a' tras mucho tiempo en las lides internacionales de la selecci¨®n.
Garc¨ªa Calvo, que por fin ha encontrado el fruto del trabajo de mucho tiempo, y Marchena, un habitual de S¨¢ez en los equipos 'sub', fueron los encargados de situarse en esa zona, y aunque cumplieron en su labor la actuaci¨®n conjunta del equipo a la hora de atacar fue p¨¦sima en el primer tiempo y aceptable a r¨¢fagas en el segundo.
Los 45 minutos iniciales afortunadamente tan solo duraron quince segundos m¨¢s. Fue un suplicio de partido. Lo mejor fue la actuaci¨®n de Ra¨²l Bravo por la banda izquierda, por donde Vicente, que volv¨ªa a la selecci¨®n, estuvo muy gris y tan solo hizo una jugada de m¨¦rito.
Gellei ha decidido para reconstruir al ahora modesto equipo de Hungr¨ªa empezar por los cimientos, por la defensa. Y con eso le bast¨® para anular a un conjunto espa?ol que lleg¨® con algo claridad en cuatro ocasiones, pero ning¨²n bal¨®n fue entre los tres palos.
El descanso fue aprovechado por Gellei y S¨¢ez para comenzar el festival de cambios. El t¨¦cnico espa?ol no junt¨® a Ra¨²l y Valer¨®n. Dio entrada al canario, retir¨® al madrile?o y tambi¨¦n entr¨® Tamudo por Morientes, as¨ª como Joaqu¨ªn por Mendieta.
El estreno como artillero internacional de Tamudo fue un claro ejemplo de que cuando uno es superior si las cosas se hacen f¨¢ciles y a un ritmo m¨¢s o menos vivo el resultado y el espect¨¢culo lo notan de manera palpable.
Hungr¨ªa, que acus¨® el golpe del gol, no quiso bajar los brazos. No lo hubiera permitido nunca Puskas, y as¨ª tuvo una ocasi¨®n clamorosa para empatar con un disparo lejano de Low ante la salida desesperada de Ricardo que incre¨ªblemente no acab¨® en gol, sino en el poste ante el clamor de la sufrida hinchada local.
El t¨¦cnico espa?ol tendr¨¢ ahora un par de semanas antes de que el equipo viaje a Atenas para iniciar la fase europea. All¨ª, la actuaci¨®n de sus jugadores tendr¨¢ que ser bastante mejor. No obstante, para el momento de la verdad estar¨¢n algo m¨¢s rodados y en forma.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.