De las pistas a la celda

Marion Jones, 32 a?os, gan¨® cinco medallas, tres de ellas de oro, en las olimpiadas de Sydney hace ocho a?os. Volv¨ªa a demostrar as¨ª que era una de las mejores atletas del mundo. Pero su victoria no fue del todo limpia y su fama cay¨® en picado en octubre, cuando reconoci¨® haber mentido al tribunal y haber consumido sustancias prohibidas entre octubre de 2000 y julio de 2001.

Ayer por la tarde, Jones ingresaba en una c¨¢rcel federal de Texas, la Carswell Federal Medical Center en Fort Worth, donde van muchos reclusos con problemas m¨¦dicos, aunque no todos los internos son enfermos y la portavoz del servicio de prisiones estadounidenses no pudo precisar si Jones hab¨ªa sido enviada all¨ª por razones de salud.

Jones ten¨ªa hasta este martes para presentarse voluntariamente y cumplir dos condenas simult¨¢neas de seis meses por haber usado sustancias prohibidas para mejorar su rendimiento. Despu¨¦s de que el juez fallara en su contra el pasado enero, le quitaron las cinco medallas (las de oro en 100 metros, los 200 metros y los 4x400 metros y los bronces de salto de longitud y los 4x110 metros) que hab¨ªa conseguido gracias al uso de drogas y todos los r¨¦cords que hab¨ªa logrado desde 2000.

Jones hab¨ªa negado hasta ese momento que hubiera usado ning¨²n tipo de sustancias prohibidas. Pero, despu¨¦s de una condena por perjurio, no tuvo m¨¢s remedio que admitir que hab¨ªa tomado esteroides antes de las olimpiadas de Sydney. Por este motivo deber¨¢ cumplir, adem¨¢s, dos a?os de libertad condicional.