?Hola, everyone!

No habl¨® el alcalde, Alberto Ruiz-Gallard¨®n, ni el resto de la delegaci¨®n de la candidatura. El que habl¨® ayer fue el pueblo de Madrid. Los habitantes de la capital levantaron las manos al cielo oscuro de Cibeles y saludaron al mundo. "?Hola, everyone! [Hola a todo el mundo]", fue su grito. ?Queremos los Juegos Ol¨ªmpicos!, fue su mensaje.

Cibeles fue ayer m¨¢s que nunca el coraz¨®n de la ciudad. Lati¨®, a pesar de la lluvia, dividida en cuatro zonas de colores: el azul, frente al escenario, miraba a la Puerta de Alcal¨¢; el verde se extend¨ªa hacia Atocha; el amarillo avanzaba hac¨ªa Gran V¨ªa, llegando casi al edificio Metr¨®poli, y el rojo a la plaza de Col¨®n, que ya se ti?¨® de ese color durante la pasada Eurocopa. Todo repleto de gente, 100.000 personas, seg¨²n los c¨¢lculos de este peri¨®dico.

Un goteo incesante de madrile?os con una corazonada fue llenando la plaza desde primera hora de la tarde. Cualquier excusa es buena en Madrid para hacerse con la calle, libre de coches por un d¨ªa. Por ella pasearon, a partir de las seis, zancudos, malabaristas y grupos de percusi¨®n. Era el inicio de la gran fiesta de la corazonada. Una celebraci¨®n marcada por la m¨²sica: desde Paquito el chocolatero a Oliver y Benji, del La, la, la de Massiel a Alaska.

Con la gorra de la candidatura en la cabeza, una masa blanca botaba en Cibeles y las calles adyacentes al ritmo que le marcaba desde el escenario El Pulpo, locutor de Cadena 100. Era una marea animosa, optimista, convencida de las posibilidades de la candidatura. Hubo tiempo para las bromas y los t¨ªpicos c¨¢nticos de "?camarero, camarero!", que ya han hecho famosos los espa?oles campeones europeos de f¨²tbol y baloncesto en esa misma plaza. "?Camarero, queremos los Juegos!", fue la novedad m¨¢s celebrada de la tarde. Todo sin olvidar los ensayos para el momento m¨¢s importante. Hab¨ªa que entrenar los brazos de los madrile?os, que algunos igual tienen hoy con agujetas. "Arriba los azules, arriba los rojos...", as¨ª una y otra vez. "Est¨¢is participando en un momento hist¨®rico de los Juegos de 2016", animaba El Pulpo al p¨²blico, "que se celebrar¨¢n en Madrid". La locura.

Incluso la lluvia hizo acto de presencia. Tambi¨¦n tendr¨¢ una corazonada, pensaron los asistentes. Nadie par¨® de cantar, de bailar y de levantar su cartulina al cielo. Fueron un buen paraguas en alg¨²n momento. Hasta el momento.

La hora marcada, las 19.30 del 27 de septiembre de 2009. Cinco d¨ªas antes de que los miembros del COI elijan en Copenhague la sede para los Juegos Ol¨ªmpicos de 2016, los madrile?os demostraron al mundo que tienen una corazonada. Que quieren los Juegos para su ciudad. "Esta vez nos toca", quer¨ªan afirmar con rotundidad los ciudadanos.

Entre la masa, con sus cartulinas azules, la delegaci¨®n de la candidatura, con el alcalde Alberto Ruiz-Gallard¨®n a la cabeza. Sonriente, con una camisa blanca con el logo de la candidatura en el pecho, el alcalde tambi¨¦n bail¨® mientras saludaba y se fotografiaba con todo el que se lo pidiera. Era la estrella, la cabeza visible de un proyecto que ayer un¨ªa a toda la ciudad. Todo eran gritos de ¨¢nimo y de j¨²bilo hacia el regidor, uno de los m¨¢s optimistas dentro de la candidatura ol¨ªmpica para la elecci¨®n del viernes. Hasta que, durante unos instantes se hizo el silencio. De fondo, comenz¨® a sonar la m¨²sica de la pel¨ªcula Carros de fuego. Hab¨ªa llegado la hora, y decenas de miles de personas levantaron a la vez su cartulina. La plaza de Cibeles se convirti¨® por unos minutos en una gran mancha de color.

"Es el momento de demostrar al planeta que Madrid est¨¢ preparada para los Juegos de 2016", se?al¨® solemne el Pulpo. "Llevamos muchos a?os prepar¨¢ndonos, la ciudad se ha modernizado. Las instalaciones ya est¨¢n hechas", grit¨®, relatando las bondades de la candidatura. Nadie bajaba su cartulina, nadie hablaba. "El madrile?o y el espa?ol quieren que los Juegos sean en Madrid". Desde el cielo, un helic¨®ptero captaba el inmenso mosaico formado con los colores de Madrid 2016. "Que todo el planeta sea testigo de que lo queremos. Que lo merecemos". La foto para la historia estaba hecha. La fiesta de la corazonada hab¨ªa conseguido formar el enorme mosaico. La apuesta de toda una ciudad, ansiosa por recibir Juegos Ol¨ªmpicos, demostrada a todo el mundo.

"?Hola Madrid!", grit¨® el Pulpo. "?Hola everyone!" contest¨® Madrid al un¨ªsono.

La ilusi¨®n ol¨ªmpica desborda Cibeles