Janka ahonda la herida austriaca

Es hincha del Manchester United y le gusta el f¨²tbol, pero siendo suizo ten¨ªa que ser esquiador. Carlo Janka, a los 23 a?os, confirm¨® con su triunfo en el gigante alpino las credenciales que ya le acreditaban como campe¨®n mundial y con puestos punteros en la temporada de Copa del Mundo. Era la ¨²ltima oportunidad de la gran revelaci¨®n de los ¨²ltimos a?os, un esquiador polivalente y al que se ve¨ªa como el posible sucesor del legendario Pirmin Zurbriggen. Ayer, super¨® su bronce de Calgary 88, donde Pirmin tambi¨¦n gan¨® el oro en descenso. Janka ya ha puesto su primera gran piedra ol¨ªmpica, aunque le falte a¨²n mucho para sumar como ¨¦l cuatro t¨ªtulos mundiales y otras tantas Copas del Mundo.

Iba en los Juegos camino de la decepci¨®n, tras no brillar en las dos pruebas de velocidad, descenso (11?) y supergigante (7?) y, adem¨¢s, s¨®lo rozar el podio en la supercombinada (4?). Pero estuvo imperial en una pista con nieve abrasiva, suelta, t¨ªpica del clima h¨²medo que azota continuamente las monta?as de Whistler. Ya fue el mejor tiempo en la primera manga, como en Val d'Isere cuando gan¨® el Mundial en 2009, y mantuvo margen suficiente en la segunda sobre los inevitables noruegos, el inesperado Kjetil Jansrud y el siempre esperado todoterreno Aksel Lund Svindal, que sum¨® as¨ª otra medalla. La tercera, una de cada metal, tras el oro en el supergigante y la plata en el descenso.

Svindal igual¨® as¨ª con los mismos tres podios a Bode Miller, que ayer lo ten¨ªa muy dif¨ªcil y no termin¨®. Sali¨® en el puesto 31?, el primero despu¨¦s de los mejores del ranking, al no haber puntuado en la prueba apenas esta temporada, y no pudo con las malas condiciones de la pista. Estropeada despu¨¦s de tantas trazadas, se fue. Al estilo de Janka, pero en su caso no como debut, sino como despedida, ya est¨¢ sobradamente contento con su oro en la supercombinada, sobre todo, m¨¢s la plata en el supergigante y el bronce en el descenso.

La herida en la "armada" austriaca, gran dominadora en los ¨²ltimos a?os, se abri¨® a¨²n m¨¢s. A falta del eslalon, donde ya ser¨ªa un fracaso total que se le escapara a alguno de sus esquiadores, s¨®lo han ganado medallas dos mujeres: Andrea Fischbacher, oro en el supergigante y Elizabeth Goergl, bronce en el descenso. Bien poco para su potencial. Ayer, en el colmo de la mala suerte, tres austriacos ocuparon los primeros puestos fuera del podio

Janka, curiosamente, empez¨® a despuntar en la cumbre en 2008 cuando hizo el mejor tiempo en la segunda manga del gigante de la Copa del Mundo disputado en la misma pista Dave Murray de ayer, en Whistler. "Es necesario arriesgarse para ganar y adem¨¢s, no comet¨ª errores. Eran las claves", dijo un exultante ganador de potente f¨ªsico, 1,85 metros y 90 kilos, pero con una fluidez al esquiar impresionante.

El espa?ol Paul de la Cuesta fue 32? en su debut, aunque con la pista como estaba tuvo su m¨¦rito. Incluso mucho en los c¨¢lculos de participaci¨®n. Dej¨® tras ¨¦l a otrros 49 participantes clasificados, m¨¢s los 16 que no terminaron, nueve en la primera manga como el otro espa?ol, Ferran Terra, y tres descalificados.

Revancha n¨®rdica

Austria, hundida en el esqu¨ª alpino, volvi¨® a subir a lo m¨¢s alto del podio en la combinada n¨®rdica por equipos (saltos y fondo), como en Tur¨ªn 2006. Su buena escuela de saltos, aunque esta vez s¨®lo fueron cuartos, la completaron sus cuatro componentes, entre ellos el m¨¢s laureado Felix Gottwald, con un magn¨ªfico esqu¨ª. Eso les permiti¨® superar a Estados Unidos, la gran revelaci¨®n empujada por John Spillane, tambi¨¦n plata individual, y que iba segunda tras los saltos. Alemania, bronce, sum¨® as¨ª otra medalla en el codo con codo que ya mantiene con los estadounidenses en la cabeza del medallero. Finlandia, otra damnificada del esqu¨ª de fondo por el dopaje, fue la mejor en los saltos, pero sus esquiadores ya no tienen la "gasolina EPO" de anta?o y se perdieron en el s¨¦ptimo puesto.