Los errores de Dios
La capacidad que tiene el f¨²tbol de servir como met¨¢fora del azar de la vida, explica en buena parte el ¨¦xito arrollador del deporte como fen¨®meno global de masas
¡°Su nombre es Juan Mata/Lleva un sombrero m¨¢gico¡±, es la traducci¨®n de uno de los c¨¢nticos con los que los aficionados del Chelsea celebran a su jugador favorito. El que dirigen los del Arsenal al suyo, Santi Cazorla, es incluso peor: ¡°Vino de M¨¢laga a jugar con Arteta: ?Cazorla! ?Cazorla!¡±.
"No podr¨ªa vivir sin el champ¨¢n. En la victoria, me lo merezco. En la derrota, lo necesito". Winston Churchill
No hemos podido establecer qu¨¦ es lo que se han inventado los fans del Swansea para alabar la nueva estrella de su equipo, Michu, pero seguramente tampoco tendr¨ªa posibilidades de ganar un premio de poes¨ªa o de entrar en el Top Ten musical del mes. Lo que importa, sin embargo, es el sentimiento; lo que importa es que estos tres jugadores espa?oles (sin olvidar a Arteta del Arsenal y a Silva del Manchester City) han conquistado los corazones de sus clubes brit¨¢nicos y se han ganado la admiraci¨®n de todos los neutrales.
Una vez m¨¢s el f¨²tbol ofrece a los espa?oles un cierto motivo de orgullo; incluso ¡ªpara los optimistas, los locos, o los que no se enteran¡ª una peque?a compensaci¨®n por las penas que vive el pa¨ªs. Aunque se podr¨ªa agregar, sin la intenci¨®n de cuestionar la calidad del producto deportivo ib¨¦rico, que el rendimiento de los fichajes espa?oles ofrece un alarmante reflejo de las penas que vive el f¨²tbol ingl¨¦s. Mata y Cazorla, que no son titulares indiscutibles en la selecci¨®n espa?ola, son los cracks de dos de los equipos m¨¢s potentes de la Premier. Es casi imposible imaginar que un jugador de la selecci¨®n B inglesa triunfe en la Primera Divisi¨®n espa?ola. De la selecci¨®n A quiz¨¢ tres o cuatro lograr¨ªan conseguir la titularidad en el Valencia, el Atl¨¦tico o el M¨¢laga, pero dif¨ªcilmente se convertir¨ªan de la noche a la ma?ana, como Cazorla en el Arsenal, en las figuras de sus equipos.
Mata y Cazorla, que no son titulares indiscutibles con Espa?a, son los ¡®cracks¡¯ de dos de los equipos m¨¢s potentes de la ¡®Premier¡¯
No solo es un problema de jugadores ingleses. La Premier, donde dos tercios de los jugadores son de fuera de las islas, da la impresi¨®n de estar en decadencia. No en t¨¦rminos econ¨®micos sino en cuanto a calidad. Es verdad que el Chelsea gan¨® la Copa de Europa la temporada pasada. Fue uno de esos misterios que arroja a veces el f¨²tbol, quiz¨¢ atribuible a lo que Garc¨ªa M¨¢rquez llama ¡°los errores de Dios¡±. La capacidad que tiene el f¨²tbol de generar sorpresas y grandes injusticias, de servir como met¨¢fora del azar de la vida, explica en buena parte el ¨¦xito arrollador del deporte como fen¨®meno global de masas.
Pero no puede ser cosa del azar que el Chelsea, que va como una locomotora en la Premier, y el Manchester City, invicto en Inglaterra en lo que va de temporada, est¨¦n siendo humillados en Europa. La prensa inglesa se deshace en elogios al ¡°f¨²tbol champ¨¢n¡± del Chelsea cuando se mide a rivales de la Premier pero guarda relativo silencio sobre el repaso que le dio el Atl¨¦tico en la Supercopa europea (4-1, cuando un resultado m¨¢s justo hubiera sido 6-0) o su mediocre actuaci¨®n en la presente liguilla de la Champions. Llevan cuatro puntos tras tres partidos en un grupo flojo y esta semana perdieron contra un Shakhtar muy superior. En cuanto al City, actual campe¨®n ingl¨¦s, la contundente derrota ante el Ajax del mi¨¦rcoles les deja casi sin posibilidades de pasar a la siguiente ronda de la gran competici¨®n europea.
Mientras el Chelsea y el City tropiezan, el M¨¢laga, sin Cazorla, lleva tres victorias en tres partidos en un grupo nada f¨¢cil. Tanto los dos equipos m¨¢s ricos de la Premier como el Manchester United, el Arsenal y el Liverpool se habr¨¢n fijado en Isco, la nueva estrella del M¨¢laga, como pr¨®ximo objeto de deseo. En Isco y en qui¨¦n sabe cuantos jugadores espa?oles m¨¢s. Sin hablar de Falcao, claro, al que muchos en Inglaterra ya colocan en el Chelsea.
Un jugador que brilla en Espa?a, aunque sea (como en el caso de Michu) en un equipo modesto como el Rayo, es pr¨¢cticamente una garant¨ªa de ¨¦xito en la liga inglesa. Hablando de met¨¢foras, aqu¨ª el f¨²tbol nos ofrece otra. El destino de Espa?a va rumbo a ser, como ya lo es en algunos pa¨ªses africanos y latinoamericanos, el de un gran pa¨ªs exportador de futbolistas. Pero el de un pa¨ªs peque?o en casi todo lo dem¨¢s.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.