Casillas, S¨¢nchez y Excalibur
Juanma Iturriaga analiza la actualidad deportiva en una nueva entrega de su diario
6/10. Lunes
Me gustan los lunes. S¨ª, ya s¨¦ que voy en contra del himno de los Boomtown Rats y su I don?t like Mondays y del sentir de much¨ªsimas personas, pero es cierto. Y una de las razones principales es porque los lunes son d¨ªas de reflexi¨®n. Antes lo eran de informaci¨®n, pero la rapidez con la que accedemos a lo que acaba de ocurrir hace que para el lunes ya sabes de memoria lo que ha pasado el domingo, d¨ªa deportivo por excelencia, lo has visto casi todo en la tele o en el ordenador, has le¨ªdo las cr¨®nicas y los comentarios a pie de pista. Llegados a este punto, lo que te pide el cuerpo son an¨¢lisis m¨¢s sosegados, sin la premura que da la inmediatez. Es el momento de escuchar o leer a tus analistas de cabecera, que no todo es discusi¨®n, pol¨¦mica y griter¨ªo en el universo medi¨¢tico deportivo. Cierto que no dura mucho, pues el martes llegan de nuevo partidos y competiciones, pero es de agradecer este oasis que te permite encontrar un hueco para dejar a un lado los qu¨¦s y los c¨®mos y bucear en los porqu¨¦s.
Siendo d¨ªa de reflexi¨®n, era la jornada ideal para que Canal Plus emitiese la entrevista de I?aki Gabilondo a Iker Casillas. La expectaci¨®n era grande, pues desde que empez¨® el affaire, el que menos hab¨ªa hablado del tema era el propio Casillas. Pensar que Iker iba a poner a parir a Mourinho, Florentino P¨¦rez o la afici¨®n era pensar demasiado, y Casillas es lo suficientemente inteligente como para echar mucha le?a a un fuego que todav¨ªa no est¨¢ apagado. Por lo que en la mayor¨ªa de las contestaciones ha habido que hacer un ejercicio de traducci¨®n de palabras, gestos y silencios. Pero bueno, a pesar de no bajar la guardia pr¨¢cticamente en ning¨²n momento, dej¨® alguna afirmaci¨®n que, no por ser supuesta y hasta conocida, ten¨ªa la rotundidad de ser dicha por el propio protagonista. Me parece una buena idea que, aunque sea con demasiado retraso (¨¦l lo justific¨® su silencio por el bien del equipo) su opini¨®n y sentimientos queden expuestos. Otra cosa es su interpretaci¨®n y el grado de verdad que cada uno quiera darle, pues ah¨ª entran a jugar posicionamientos previos. Pero al menos nos cont¨® su versi¨®n de unos hechos en los que por encima de asuntos deportivos, estoy convencido que se le trat¨® de una forma que ni su trayectoria ni su comportamiento merec¨ªan.
Antes de esto, las grandes estrellas del fin de semana, las chicas de baloncesto, se han dado un garbeo por diversos medios de comunicaci¨®n m¨¢s contentas que unas casta?uelas mientras se explican desde diversos ¨¢ngulos las razones de su ¨¦xito, una muesca m¨¢s en nuestro pujante deporte femenino. La ecuaci¨®n ser¨ªa m¨¢s o menos esta. Talento+esp¨ªritu colectivo+ambici¨®n+planificaci¨®n adecuada+paciencia+armon¨ªa entre diferentes generaciones +experiencia de sus jugadoras en otros pa¨ªses: medalla de plata mundial. No deja de ser curioso que un hecho en principio desfavorable para un pa¨ªs como puede ser la fuga de talento, en el caso del deporte suele suponer un salto de calidad. El emigrar, conocer otras formas, estilos y culturas y madurar lejos del confort de tu propio pa¨ªs termina curtiendo y dando un plus de competitividad. Ocurri¨® con el f¨²tbol o el baloncesto masculino, hasta hace no mucho refractario a la emigraci¨®n y ahora ha vuelto a pasar con el baloncesto femenino.
Para terminar el d¨ªa, lanzo un ruego que estoy seguro de que no va a ser escuchado. Por favor, no empecemos. Quedan ?cien d¨ªas!, catorce semanas, m¨¢s de tres meses, y ya estamos dando la tabarra con el Bal¨®n de Oro. Y luego nos quejamos de El Corte Ingles, que pone las luces de Navidad en noviembre.
7/10. Martes
Como el d¨ªa ha venido poco prolijo en asuntos deportivos, me voy a salir del carril y comentar una propuesta de nuestro querido gobierno. Hace 24 a?os comenc¨¦ mi carrera televisiva en Telemadrid. Fueron buenos tiempos, los de una televisi¨®n joven y atrevida, plural y competitiva, refrescante y ambiciosa. No voy a relatar, pues es de sobra sabido, lo que ocurri¨® a partir de la llegada de Esperanza Aguirre al poder auton¨®mico. B¨¢sicamente se pas¨® de ser un servicio p¨²blico a ser una cadena al servicio de un partido, unos pol¨ªticos y sus amigos. El deterioro ha sido monumental y el saqueo de sus arcas lo terminaron pagando unos cientos de trabajadores. Ahora mismo es una cadena residual, sin ning¨²n prestigio ni credibilidad y con una audiencia irrisoria.
En 2004 y tal como hab¨ªa anunciado en la campa?a electoral, Zapatero sac¨® a RTVE del sectarismo pol¨ªtico de los Urdaci y compa?¨ªa y durante ocho a?os disfrutamos de una de las mejores ¨¦pocas de nuestra radio televisi¨®n p¨²blica. Hace dos a?os y a los pocos meses de llegar al poder, el gobierno deshizo el camino y se volvi¨® a hacer due?o y se?or de un servicio que por definici¨®n deber¨ªa ser de todos y para todos. Siendo infinitamente censurable esta marcha atr¨¢s, esta vuelta a la unilateralidad, el asunto se agrava cuando observamos que con sus elecciones demuestran que el modelo a seguir como ejemplo de una buena gesti¨®n es el de Telemadrid, y, de ah¨ª que sea Jos¨¦ Antonio S¨¢nchez el propuesto para ser director de RTVE o que Julio Somoano dirija los informativos. Dos antiguos dirigentes que participaron activamente del desastre de la televisi¨®n publica madrile?a.
Lo de Jos¨¦ Antonio S¨¢nchez es m¨¢s sangrante, pues como muy bien cuenta Mariola Cubells en el Huffington Post en su curr¨ªculo entran, entre otras haza?as, ejecutar el ERE de Telemadrid, ser imputado por cinco delitos y ser director general de TVE cuando lo del Prestige, las manifestaciones de No a la guerra, el atentado del 11 de Marzo o la huelga general, aut¨¦nticos hitos de manipulaci¨®n informativa, algunos de ellos condenados por instancias europeos. Bien, pues ante la dimisi¨®n de Gonz¨¢lez Echenique, este es el hombre elegido. Para que luego nos hablen de regeneraci¨®n democr¨¢tica.
8/10. Mi¨¦rcoles
Hoy ha perdido Nadal frente a Feliciano y sobre su futuro sobrevuela una operaci¨®n, la Espa?a futbol¨ªstica est¨¢ en Eslovenia intentando recomponerse y volver a ilusionar, nuestros chicos de la NBA juegan sus primeros partidos de pretemporada, las lesiones del piloto franc¨¦s de F1 Bianchi tienen muy mala pinta y en Bolivia Butrague?o y compa?¨ªa jugaron un partidito con el presidente Evo Morales. Quiz¨¢s en otro momento, estas historias tendr¨ªan su hueco, pero ?alguien les habr¨¢ dedicado unos minutos en un d¨ªa como hoy? Sospecho que no.
Y es que el asunto de la infecci¨®n de una enfermera de ?bola se ha convertido en una bola de nieve informativa que crece sin parar. Desde que se hizo oficial la noticia, el impacto, reacciones y constante aparici¨®n de nuevos datos ocupa casi totalmente el espacio medi¨¢tico y las conversaciones privadas. Seg¨²n vamos conociendo m¨¢s sobre lo ocurrido, crece la sensaci¨®n que demasiadas cosas no se hicieron como deber¨ªan haberse hecho. Desde la repatriaci¨®n de los dos enfermos cuando no exist¨ªan los medios y protocolos suficientes para realizarlos con el m¨¢ximo de seguridad, hasta el tratamiento a la contagiada cuando comenz¨® a tener s¨ªntomas, pasando por la pol¨ªtica de ?informaci¨®n? del ministerio de Sanidad dirigido por la incombustible Ana Mato. Todo junto hace que el olor a chapuza vaya ganando espacio con el paso de las horas.
La historia resulta muy significativa del mundo en qu¨¦ vivimos, donde los problemas, enfermedades, guerras, dictaduras o atrocidades solo nos preocupan cuando nos afectan directamente. Podemos hacerles la ola a pa¨ªses que suspenden con un cero la asignatura de derechos humanos, o asistir sin hacer mucho por remediarlo a la observaci¨®n del desangramiento africano, pero basta un caso que nos ata?e para pasar de la indiferencia a la preocupaci¨®n nacional, en algunos casos rozando la histeria. No solo eso, sino que si en su momento se neg¨® la asistencia a la Hermana Paciencia, ayudante del padre Miguel Pajares, una vez superada la enfermedad, se le trajo a Espa?a para utilizar su sangre como posible cura.
Por no hablar del tema de Excalibur, el perro de la enfermera, aut¨¦ntica estrella del d¨ªa. He tenido perros desde hace muchos a?os y conozco perfectamente el v¨ªnculo emocional que creamos con ellos, por lo que llego a entender el llamamiento del marido para evitar su sacrificio. Me cuesta m¨¢s racionalizar el circo montado a su alrededor y me cuestiono si esas protestas no deber¨ªan haberse enfocado hacia otro sitio y en otro lugar. Ante un problema de esta envergadura, que est¨¢ causando miles de muertos en ?frica y que en su llegada a Espa?a ha puesto de manifiesto muchos defectos y los estragos que est¨¢ haciendo en nuestra Sanidad tanto recorte y privatizaci¨®n, que el primer y ¨²nico acto de rebeld¨ªa haya sido para salvar a un perro da que pensar.
Posdata. Acabo de escuchar al consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid. Resulta dif¨ªcil caer tan bajo en el ejercicio de a m¨ª no me mir¨¦is que lo nosotros lo hemos hecho perfecto. Nauseabundo en fondo y forma, coronado con ese chulesco y ofensivo yo tengo la vida resuelta. Algo hemos debido hacer muy mal en nuestras anteriores vidas para merecer este castigo.
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