Una virguer¨ªa de Jonathas estimula al Elche

Lo celebr¨® m¨¢s el asistente que el finalizador. Bien merec¨ªa una larga sonrisa semejante maniobra, tanto por lo bonito como por lo efectivo. Jonathas escondi¨® el bal¨®n con una el¨¢stica, cambiando bruscamente la ubicaci¨®n de la pelota con un movimiento violento de tobillo ante Ximo Navarro, roto, y su centro con la pierna izquierda lleg¨® hasta V¨ªctor Rodr¨ªguez, que de cabeza super¨® al meta Jul¨ªan, del Almer¨ªa. As¨ª, con una escena que se produjo en el minuto seis del partido, tan resultona como definitiva, super¨® el Elche al conjunto andaluz, en un encuentro en el que se desarrollaron muchos partidos en su interior, con momentos en los que tan cerca estuvo el segundo de los locales como el empate del cuadro de Juan Ignacio Mart¨ªnez.

Algo mejor plantado en el campo, el Elche salt¨® con la intenci¨®n de dominar el partido y lo hizo durante la primera media hora. Pasado ese tiempo, y ya con el gol de V¨ªctor en el marcador, el Almer¨ªa tuvo un arrebato de pasi¨®n, y comenz¨® a acercarse con peligro al ¨¢rea de Tyton. Sin embargo, el ritmo volvi¨® a cambiar y en un saque de esquina, Enzo Roco envi¨® el bal¨®n al fondo de la red tras un mal despeje del portero Juli¨¢n, que el ¨¢rbitro anul¨®, sin que aparentemente, instintivamente, y legalmente, mediara raz¨®n alguna. En el siguiente comp¨¢s, al otro lado del campo, Dubarbier, que junto a su compa?ero en el otro flanco de la defensa se las vio y dese¨® con V¨ªctor y con Aaron respectivamente, envi¨® el bal¨®n al poste en un lanzamiento de falta.

Un p¨¦ndulo imaginario volv¨ªa a ser el eje del partido, sin due?o reconocido, con intercambio de golpes, con entretenimiento en todo momento. Pero, el que gana siempre se divierte un poco m¨¢s, por eso al Almer¨ªa empez¨® a acabarsele la paciencia, y eso a veces descuida los pies al intentar tapar la cara. Volvi¨® a ser V¨ªctor el que pudo sentenciar el encuentro, pero cuando lo menos complicado parec¨ªa introducir el bal¨®n en la porter¨ªa, su remate, blando, sali¨® fuera sin que hubiera un opositor enfrente.Lo m¨¢s parecido que vivi¨® el Almer¨ªa, pero con cierto toque descafeinado, fue un cabezazo de Hemed, menos liberado que su rival en la anterior jugada, y que no consigui¨® imprimir la fuerza suficiente a un cabezazo que lleg¨® sin demasiada malicia a las manos de Tyton.

Los ¨²ltimos minutos del partido mostraban que el destino final se ve¨ªa algo borroso, pudiendo alumbrar en distintas direcciones si se daba la circunstancia. Finalmente