¡®Playoffs¡¯, un peinado y un Karembeu

20/04 Lunes

Han comenzado los playoffs de la NBA y toca cambiar de h¨¢bitos ma?aneros. Despu¨¦s de ocho meses en los que me bastaba acompa?ar el desayuno con los res¨²menes de dos-tres minutos de cada partido jugado de madrugada, ahora la cosa se ha puesto seria. Tanto que merece la pena grabarlos durante la noche y ver al menos uno ¨ªntegramente por la ma?ana. Como no s¨¦ el resultado, es como si lo viese en directo, y encima gracias a estos aparatitos tan modernos tipo iplus, me cargo los cuarenta mil tiempos muertos. Benditos chismes estos, que logran que las interminables dos horas y media de un encuentro de NBA pueden quedar reducidas a una horita justa, y los del baloncesto europeo de casi dos a cincuenta minutos. Nos regalan muchas horas de vida al a?o.

Esta madrugada ha debutado Marc Gasol y ha hecho un partido marca de la casa, estando en todo y echando una mano a todos. Dicen que es muy dif¨ªcil ganar un anillo sin una superestrella en el equipo, y este es uno de los aspectos que al parecer penaliza en los pron¨®sticos a los Grizzlies. Viendo el partido de debut, nadie en Memphis parece mejor capacitado para adoptar ese papel que Marc. Confirmado y consensuado que YA es una estrella, ?tendr¨¢ capacidad para alcanzar la categor¨ªa Super? Lo veremos en una semanas.

Superestrella fue en su momento Ronaldinho, del que leo sobre sus ?¨²ltimas? andanzas, ahora en M¨¦xico. Caso curioso este del que fuera mejor jugador mundial en 2005. Estando en la cumbre, con veintisiete, veintiocho a?os, un buen d¨ªa se fue a echar una siesta y ya no volvi¨®. Llegados a un punto donde el dinero, el reconocimiento o los t¨ªtulos, al tenerlos, ya no son suficientes, un deportista necesita alimentar su motivaci¨®n con otros carburantes. Ronaldinho no los encontr¨®, o decidi¨® priorizar ciertas cosas (el pas¨¢rselo bien principalmente) por encima de otras cuestiones. Decisi¨®n personal que siempre es respetable pero que nos priv¨® de golpe y porrazo de un jugador excepcional. Todo lo contrario que gente que desaf¨ªa carnets de identidad como Valentino Rossi, Roger Federer o Pau Gasol, ocupando portadas todav¨ªa y que a sus treinta y bastantes siguen siendo capaces de mantener la ilusi¨®n para seguir batallando. Ya me lo dec¨ªan en mi cole de curas. De todo tiene que haber en la vi?a del Se?or.

21/04 Martes

Noticia bomba. La reina Leticia se ha cambiado el peinado. No, no se ha puesto el pelo afro ni nada radical. Simplemente uno de esos cambios que salvo que seas muy observador (seg¨²n las ¨²ltimas estad¨ªsticas s¨®lo el 19% de los hombres lo son en estos asuntos capilares) piensas al ver la foto, est¨¢ cambiada, pero no sabes exactamente donde est¨¢ el cambio. Un look m¨¢s moderno, opinan los muchos expertos que debaten sobre esta cuesti¨®n tan fundamental. Miro la foto y dejando el tema del pelo aparte, que s¨®lo lo trato cuando intentan tom¨¢rmelo, lo que la reina pide a gritos es un buen cocido madrile?o, fabada asturiana o chulet¨®n vasco. Si la viese mi madre dir¨ªa algo as¨ª como que "la pobre no da ni para un cocido". En fin, cosas de la realeza. Est¨¢ bien esto de que la monarqu¨ªa se modernice. Y si llega a modernizarse tanto que concluye que, en el mundo moderno, lo de que existan reyes y reinas fuera de los cuentos es todo un anacronismo, pues mejor que mejor.

Hablando de pelos, al Madrid y al Bar?a les han faltado uno a cada uno para ganar sus partidos ante Efes y Olympiakos respectivamente. Lo del Madrid tiene un pase, pues era el primer match ball de los tres que tiene. Pero lo de los azulgranas es cosa seria. Si con la derrota en el segundo partido de la serie se acercaron al precipicio, caer de nuevo en el tercero les coloca justo al borde, con el v¨¦rtigo que da eso. Ni uno ni otro han jugado bien, pero han llegado vivos al final. El Madrid, gracias a uno de esos momentos en que a Sergio Rodr¨ªguez le entra la inspiraci¨®n y se convierte en un jugador imparable. El Bar?a, encomendado una vez m¨¢s a Navarro, que teniendo en cuenta que los a?os no pasan en balde, no s¨¦ si es una buena noticia. El caso es que el jueves habr¨¢ otra nueva raci¨®n para los dos equipos donde necesitar¨¢n dar un poquito m¨¢s de s¨ª.

Aprovechando los tiempos muertos de los partidos de baloncesto me encuentro con la historia del corredor tunecino que se perdi¨® en una etapa de la Vuelta Ciclista a Castilla y Le¨®n. Y me hace re¨ªr, la verdad, imaginar a este pobre hombre deambulando por las carreteras en busca de un pelot¨®n. Parece m¨¢s una escena de una pel¨ªcula c¨®mica, pero ya se sabe que la realidad supera cualquier tipo de ficci¨®n.

22/04 Mi¨¦rcoles

¡°Ni Illarra, ni Khedira ni Chicharito arrastran de momento la maldici¨®n de los h¨¦roes inesperados de la S¨¦ptima y la Octava. Son secundarios sin grandes expectativas. Pero al Madrid se viene a triunfar en momentos caprichosos¡±. Este es un fragmento del art¨ªculo de Manuel Jabois titulado magn¨ªficamente Hacer un Karembeu, que ha sido publicado horas antes del partido de vuelta entre Real Madrid y Atl¨¦tico de Madrid. Lo escrito por Jabois se ha convertido en premonitorio, tanto que quiz¨¢s Iker Jim¨¦nez le dedique unos minutos en su pr¨®ximo Cuarto Milenio. Porque Chicharito se ha marcado un Karembeu (o un Anelka) y ya forma parte de la memoria madridista. Si el mexicano ha salido por la puerta grande, el Cholo Simeone ha sido el reverso tenebroso de la fuerza. Muchas veces le hemos regalado a sus o¨ªdos merecidos halagos, pero en esta ocasi¨®n tocan palos. Su apuesta fue tan amarrategui, tan poco valiente que termin¨® sufriendo un merecido castigo. En lugar de saltar a la yugular de un equipo disminuido y lleno de dudas, confi¨® m¨¢s en un golpe de fortuna que en un apuesta atrevida, y el f¨²tbol, tan injusto a veces, termin¨® premiando a los que hicieron m¨¢s m¨¦ritos para alcanzar las semifinales. Cartel de lujo, por cierto, para la antesala de la final, con el Bar?a, la Juve, el resucitado Bayern y los blancos. Casi nada.

Con el gol de Chicharito se cerr¨® un d¨ªa donde el concepto estrella ha sido el de amnist¨ªa fiscal. El retorcimiento del lenguaje no tiene l¨ªmites en nuestro panorama pol¨ªtico y si pens¨¢bamos que con el concepto ¡°crecimiento negativo¡± o el vender la subida del IVA como ¡°una redistribuci¨®n de cargas¡± hab¨ªamos tocado techo, est¨¢bamos bien equivocados. Yo estoy con Montoro. Hacer pagar a defraudadores mucho menos que al resto de los mortales que cumplimos con nuestras obligaciones y no penalizar sus olvidos no es una amnist¨ªa, sino una regularizaci¨®n, que viene de regular. Aunque puestos a adjetivar, y m¨¢s que regular, uno apostar¨ªa porque las cosas se han hecho entre mal y muy mal.