Los posibles sucesores de Ancelotti en el Real Madrid
Ben¨ªtez, Klopp, Emery, Zidane, M¨ªchel... Florentino anunciar¨¢ el pr¨®ximo entrenador la semana que viene
?Qui¨¦n ser¨¢ el d¨¦cimo entrenador de Florentino P¨¦rez? Tras el despido oficial de Carlo Ancelotti, varios son los nombres que se barajan como sustitutos del italiano. El presidente del Real Madrid ya anunci¨® el lunes que el pr¨®ximo t¨¦cnico se anunciar¨¢ la semana que viene y, salvo sorpresa may¨²scula, el pr¨®ximo due?o del banquillo madridista saldr¨¢ de este quinteto:
Rafa Ben¨ªtez
El madrile?o es el actual entrenador del N¨¢poles, conjunto en el que lleva dos a?os. Su nombre est¨¢ en boca de todos como posible sustituto de Ancelotti. El pr¨®ximo fin de semana se juega la clasificaci¨®n de su equipo en la pr¨®xima Champions, necesita ganar al Lazio para auparse a la tercera plaza de la liga italiana.
Ben¨ªtez es un hombre de la casa. Exjugador de la cantera, destac¨® como t¨¦cnico en las categor¨ªas inferiores hasta hacerse con el puesto en el Real Madrid B. Tras dirigir equipos modestos con desigual suerte, en 2001 lleg¨® a Valencia y eso cambi¨® su carrera. A pesar de los dif¨ªciles comienzos en el equipo che -estuvo a punto de ser cesado en Navidades-, el conjunto remont¨® en la segunda vuelta y gan¨® la Liga de manera sorprendente. Repetir¨ªa ¨¦xito en 2004, adem¨¢s de conquistar la Copa de la UEFA. Su salida del Valencia no fue la id¨®nea y abandon¨® el club tras afirmar sentirse "ninguneado".
Los t¨ªtulos en Espa?a le valieron para desembarcar en Liverpool, donde en su primer a?o alz¨® la Champions. Fueron los a?os de mayor ¨¦xito en su carrera. Ben¨ªtez se granje¨® un aura de entrenador ganador que ha ido perdiendo con el paso de los a?os. Su paso por el Inter de Mil¨¢n fue infructuoso y no dej¨® un grato recuerdo en el Chelsea a pesar de ganar una Liga Europa.
El t¨¦cnico madrile?o tiene fama de entrenador exigente y meticuloso, de no dejar demasiada libertad al jugador sobre el terreno de juego. "Ben¨ªtez me dirig¨ªa como un joystick", declar¨® en 2010 ?lvaro Arbeloa, su pupilo en el Liverpool. Su f¨²tbol tambi¨¦n levanta algunas suspicacias en el madridismo, ya que sus equipos siempre son ordenados pero poco dados a la alegr¨ªa ofensiva. Otro punto en contra puede ser que en varias ocasiones ha tenido problemas con los jugadores debido a su m¨¦todo de trabajo, estricto y distante con sus subordinados. A favor tiene la experiencia, el conocimiento del club y el aval de haber ganado t¨ªtulos en tres pa¨ªses distintos.
J¨¹rgen Klopp
El todav¨ªa entrenador del Borussia Dortmund anunci¨® en abril que no continuar¨¢ en el club donde trabaj¨® las ¨²ltimas siete temporadas. Cuando lleg¨®, el conjunto del Ruhr no viv¨ªa sus mejores momentos, pero con ¨¦l al frente fue creciendo hasta hacerse con dos Bundesligas consecutivas, todo un ¨¦xito en un campeonato donde suele reinar el Bayern de M¨²nich. La final de Champions de 2013 fue el c¨¦nit de su ¨¦xito y a partir de ah¨ª el equipo fue perdiendo peso en la liga germana, especialmente porque cada a?o perd¨ªa jugadores de gran peso.
Su Borussia campe¨®n en 2011 y 2012 era un equipo que destacaba por la intensidad que desplegaba en el campo, tanto en ataque como en defensa. Presi¨®n asfixiante si no se tiene el bal¨®n y tratarlo bien cuando se recupera. No era extra?o ver al equipo amarillo alternar el f¨²tbol de toque con un juego m¨¢s directo. Jugadores como Sahin, Gundogan o Goetze daban la pausa y la templanza cuando se necesitaba; B?aszczykowski, Reus o Kagawa proporcionaban el v¨¦rtigo.
Florentino P¨¦rez adelant¨® el lunes que prefiere un entrenador que hable castellano. Este puede ser un h¨¢ndicap para su contrataci¨®n. Tampoco conoce la Liga espa?ola y siempre ha trabajado en entornos muy protectores y pacientes, la prueba es que esta temporada finaliz¨® la primera vuelta en descenso y su cabeza no corri¨® peligro en ning¨²n momento. Su car¨¢cter, en ocasiones histri¨®nico, quiz¨¢ podr¨ªa desentonar en un club donde se mira con lupa cada detalle, aunque los tres a?os de Mourinho han curado de espanto al madridismo en ese aspecto. A su favor est¨¢ que siempre ha mantenido buenas relaciones con los jugadores, que se sepa. Tiende a ser uno de ellos a la hora de entrenar o festejar. Otro factor positivo para ¨¦l es que su f¨²tbol aparentemente encaja en lo que gusta en el Bernab¨¦u: ataque y derroche de actitud.
Unai Emery
Sus ¨¦xitos con el Sevilla le han puesto en el escaparate. Si este mi¨¦rcoles conquista otra Europa League, su nombre va a sonar cada vez con m¨¢s fuerza. Emery se hizo un nombre en el f¨²tbol de ¨¦lite como entrenador del Valencia, donde estuvo cuatro temporadas y clasific¨® al equipo tres veces para la Champions a pesar de ir perdiendo a jugadores como Villa, Mata o Silva. En su ¨²ltima temporada hubo cierta tensi¨®n en Mestalla por el juego del equipo y abandon¨® el club en junio. Tras un breve paso en el Spartak de Mosc¨², aterriz¨® en su actual equipo, donde el a?o pasado gan¨® la Liga Europa y est¨¢ en disposici¨®n de repetir.
A Emery casi siempre le han acompa?ado los resultados, pero en ocasiones se ha discutido el juego desplegado por sus equipos. Al vasco le gusta armar conjuntos fuertes f¨ªsicamente en defensa y mediocampo. En ataque y banda prefiere los jugadores veloces que encaran con facilidad pero a los que exige esfuerzo defensivo.
A su favor est¨¢ que es un gran conocedor del campeonato espa?ol. Sevilla y Valencia est¨¢n un pelda?o por debajo del Real Madrid, pero all¨ª la exigencia tambi¨¦n es grande y ha demostrado saber lidiar con ella. Sobre ¨¦l pesa tambi¨¦n la sombra de que no casa con los jugadores de pie fino y sin condiciones para la brega. En su momento no dio opci¨®n a Isco en el Valencia y no se ha entendido con Deulofeu.
Zinedine Zidane
Hace meses el nombre del exjugador franc¨¦s sonaba como un recambio natural de Ancelotti, pero el mal tramo final del Castilla, al que entrena desde el verano pasado, pesa demasiado como para tenerlo en cuenta como un posible candidato. Adem¨¢s de la del filial, su ¨²nica experiencia como t¨¦cnico es el a?o que pas¨® como segundo de Carletto en el Madrid. Su condici¨®n de mito del madridismo podr¨ªa facilitarle la llegada al banquillo del Bernab¨¦u en un futuro, pero para este a?o su elecci¨®n se antoja prematura.
La decisi¨®n de colocar a Zidane como entrenador del Castilla se consider¨® como un rodaje para que ganase experiencia y diese el salto en un momento dado, al modo que hizo el Bar?a con Guardiola. Pero la falta de resultados entrenando en 2? B y el momento convulso que vive el club no parecen las condiciones m¨¢s id¨®neas para dar la alternativa a un t¨¦cnico casi novato.
M¨ªchel
M¨ªchel siempre suena. Despedido del Olympiacos hace apenas unos meses tras ganar dos ligas griegas, el exjugador madridista aparece en algunas quinielas. El madrile?o combina ciertos ¨¦xitos en el f¨²tbol espa?ol, como en el Getafe, con otras experiencias menos satisfactorias, como la del Sevilla. Su paso por el f¨²tbol griego ayud¨® a espantar su aura de entrenador de equipos que juegan bien pero que nunca ganan.
Est¨¢ claro que M¨ªchel conoce la casa como nadie, y el respeto del Bernab¨¦u lo tiene ganado de antemano. Sus equipos siempre han mostrado gusto por el juegol combinativo y de toque, pero quiz¨¢ le falte alg¨²n resultado tangible en el f¨²tbol de alto nivel. Su anterior paso en la casa blanca como entrenador del filial y responsable de la cantera no sali¨® bien y se march¨® dando un portazo al entonces presidente, Ram¨®n Calder¨®n.
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