El dulce estreno en el podio

Garbi?e Muguruza, esa chica que no es supersticiosa ni mira los n¨²meros, pero que mantiene las liturgias si la cosa funciona y de vez en cuando mira de refil¨®n los n¨²meros ¡ªde refil¨®n, porque a ella no le importan, dice, claro¡ª, lo admit¨ªa entre balbuceos. ¡°Garbi?e, al despertarte hoy, ?has mirado el r¨¢nking? ?Sabes que ya eres la n¨²mero tres del mundo?¡±, le preguntaron los periodistas espa?oles desplazados hasta Singapur, ya en petit comit¨¦, despu¨¦s de que la hispano-venezolana batiera a la checa Lucie Safarova (6-3 y 7-6) en su puesta de largo en la Copa de Maestras.

¡°Lo he pensado, pero¡­ ?Bueno, s¨ª, lo he hecho...! Lo he mirado en la aplicaci¨®n de la WTA, pero nada, un momento, vaya...; lo he mirado y he dicho: vale, es cierto; pero bueno, siguiente. S¨ª, lo he comprobado, porque en realidad pensaba que era la semana pasada¡­¡±, trataba de disimular, entre risas, la nueva integrante del podio femenino. Porque ayer, por mucho que tratase de mantener la compostura y el discuro maduro, Garbi?e cumpli¨® un sue?o de adolescencia.

Todav¨ªa no ha dado caza a su gran referencia, su icono, Serena Williams, pero a los 22 a?os, solo tres despu¨¦s de acceder al profesionalismo, ya ha rebasado en la lista mundial a la gran Maria Sharapova, el espejo en el que se miraba cuando era una amateur por sus par¨¢metros similares de juego, por la garra, la fiereza y la mollera dura con la que compite la rusa Masha.

Garbi?e es muy joven, una fant¨¢stica jugadora. Tiene un gran potencial" Lucie Safarova

¡°Garbi?e, ?y si alcanzases el n¨²mero uno o el dos, ser¨ªa diferente?¡±, le hab¨ªan inquirido antes, en la atenci¨®n completa a los medios, en una sala que conforme escala posiciones y adquiere cuota de pantalla gana cada vez m¨¢s adeptos. ¡°Pues no lo s¨¦, no tengo ni idea porque nunca lo he sido, pero pienso que, si soy la n¨²mero tres, es por una raz¨®n: porque me lo he ganado¡±, respondi¨® ella, ansiosa desde hace d¨ªas por su estreno individual en la pista del Singapore Indoor Stadium, de una superficie enga?osa que ralentiza la pelota m¨¢s de la cuenta. ¡°S¨ª, es rarita¡±, constat¨® Garbi?e; ¡°es una pista que favorece a la que tiene fuerza, porque es muy lenta. La que m¨¢s fuerza tenga es la que m¨¢s da?o puede hacer aqu¨ª¡±, matiz¨® la caraque?a, quien firm¨® un debut de lo m¨¢s convincente en las WTA Finals, con un triunfo consistente frente a un hueso duro de roer como lo es la acad¨¦mica Safarova, tambi¨¦n novel en el torneo, pero seis a?os mayor que ella.

¡°La verdad es que estaba terriblemente nerviosa. Buf, Safarova, ya perd¨ª contra ella este a?o en Par¨ªs¡­ Aquella derrota en Roland Garros me doli¨® bastante, as¨ª que verdaderamente quer¨ªa ganarle¡­ Quer¨ªa ganarle y meterme m¨¢s en el torneo¡±, expuso despu¨¦s de ofrecer una hoja de servicios muy meritoria, con 10 aces, 26 winners y una fiabilidad creciente en los intercambios. ¡°?D¨®nde ha estado la diferencia? En la confianza. Ella tuvo m¨¢s confianza en s¨ª misma en los momentos clave. Me presion¨® mucho en los segundos servicios¡±, precis¨® la de Brno, rendida tambi¨¦n al fen¨®meno Muguruza que agita actualmente el tenis femenino; ¡°Garbi?e es muy joven, una fant¨¢stica jugadora. Tiene un potencial grand¨ªsimo y si sigue as¨ª puede progresar m¨¢s, no hay duda¡±.

Creo que ahora elijo mejor. Espero a la bola perfecta para atacar" Garbi?e Muguruza

El de ayer no fue un d¨ªa m¨¢s en la oficina para la hispano-venezolana, que poco a poco va adquiriendo un estatus privilegiado en el circuito. Un cambio que se palpa en los peque?os detalles y en la atenci¨®n medi¨¢tica que concentra. ¡°No es solo una cara bonita¡±, advierte el diario local The Straits Times, a trav¨¦s de una portada que destaca en el tabl¨®n de anuncios de la sala de prensa del recinto de Singapur, donde Garbi?e aspira a hacer historia. ¡°Creo que ahora elijo mejor. Espero a la bola perfecta para atacar, porque puedes ser muy agresiva, pero enviar la bola tres metros fuera. Sencillamente, creo que ahora escojo la mejor opci¨®n¡±, zanj¨® la protagonista, que desde ayer mira por el retrovisor a Sharapova.