Un golazo maquilla a Francia
Los galos, con Griezmann y Pogba ya relevados, solo pueden con la digna Rumania gracias a un gran disparo de Payet en los instantes finales del partido

Francia se deprim¨ªa un poco m¨¢s cuando Payet, su mejor jugador inaugural, meti¨® mecha en la zurda e hizo tronar Saint-Denis con un gol de artiller¨ªa pesada. El golazo, casi en el ¨²ltimo parpadeo del partido, maquill¨® a una selecci¨®n anfitriona que dej¨® tantas huellas inquietantes que con un empate en el marcador ante la intr¨¦pida y en¨¦rgica Rumania retir¨® a sus referencias, Griezmann y Pogba. Sin ellos le lleg¨® el ¨¦xito en una jugada espont¨¢nea, s¨ªntoma de lo que fue Francia: un equipo poco coral que se mueve por impulsos, que juega a fogonazos.
El descaro rumano anim¨® de inicio el encuentro. Los inaugurales suelen deparar muchos minutos de combate nulo, partidos de miradas y tanteos. Rumania no cumpli¨® con el papel. Es un equipo de buen forro f¨ªsico y mucho orden, virtudes con las que alivia su falta de talento. Lejos de asumir su debilidad ante el anfitri¨®n, el grupo del general Iordanescu se plant¨® en Saint-Denis con un do pecho. Al primer c¨®rner, Stancu se encontr¨® con la pelota casi en los morros de Lloris, que frustr¨® el remate por instinto. El saque de esquina consecuente lo cabece¨® Andone fuera por dos dedos. Dos jugadas que retrataron a Francia, remendada en la zaga por las bajas de Varane y Mattieu. En Par¨ªs costaba dilucidar qui¨¦n era el equipo local.
Confusa de entrada por el arrebato de Rumania, la selecci¨®n de Deschamps tard¨® en sacudirse el asombro. Es un conjunto sin pausa al que le gusta el v¨¦rtigo para todo. Nadie frena, nadie regula. Est¨¢ en la naturaleza de herc¨²leos jugadores como Pogba, espasm¨®dico en su juego. A Francia le quedaba engancharse a Payet, el mejor de la noche, y durante un rato a Griezmann, m¨¢s espor¨¢dico. Con ellos y el tajo conmovedor de Kante, poco a poco los de casa se asomaron al partido. La tuvo Giroud tras una incursi¨®n de Payet, pero el relevo de Benzema, que nada de nada tiene de Benzema, cabece¨® fuera. A cambio de un delantero pl¨¢stico, vers¨¢til y asociativo, o de una bala como el sevillista Gameiro, Deschamps se ha inclinado por un ariete-p¨¦rtiga, un futbolista de m¨¢rmol de la cabeza a los pies. Su f¨²tbol est¨¢ en el aire, v¨ªa por la que noque¨® a Rumania.
El ¨¦xito le lleg¨® a Francia en una jugada espont¨¢nea, s¨ªntoma de lo que fue: un equipo poco coral
No hubo mejor Francia que la que al principio encontr¨® a Griezmann, la que entendi¨® en algunas fases que le conven¨ªa transitar con el colchonero entre l¨ªneas. Sin el hilo de Griezmann, cada ¡°blue¡± que no fuera Payet met¨ªa una marcha de m¨¢s, como si todo tuviera que ser terminal. As¨ª es Pogba, por el momento m¨¢s efectista que efectivo. Es joven, todo le va deprisa y a¨²n se ha ocupado de cuadrar sus virtudes f¨ªsicas y t¨¦cnicas. T¨¢cticas no tiene por su empe?o en dispersarse, en ser muchos jugadores a la vez. No siempre se lo perdona Deschamps, que con el partido por ganar le retir¨® poco despu¨¦s que a Griezmann, que hac¨ªa minutos que se hab¨ªa extraviado. Los dos jugadores m¨¢s distinguidos quedaron marcados.
Griezmann, en el mejor tramo de Francia, el inicial, hab¨ªa tenido el gol en dos oportunidades. Primero con un cabezazo al poste y m¨¢s tarde con un remate raso que se le escap¨® por un pelo. La jugada se la sirvi¨® Payet, el habilidoso extremo del West Ham. Tambi¨¦n fue ¨¦l quien anud¨® a la defensa rumana para asistir a Pogba, ya en el segundo periodo, que lleg¨® al asalto al ¨¢rea pero su disparo lo despej¨® Tatarusanu, un monaguillo a la hora de imponer lo que deber¨ªan imponer dos metros de talla. En el gol galo, un leve estorbo con el codo de Giroud le dej¨® a la intemperie. Su salida con brazos de mantequilla facilit¨® la piller¨ªa del ariete de Deschamps.
Con el tanto de Francia, todo hac¨ªa presagiar que Rumania se iba a derretir. Nada de nada. Es una selecci¨®n resistente que funciona como un regimiento de mosqueteros. En desventaja mantuvo la fe y fue con lo que tiene, coraje y esp¨ªritu. Y tambi¨¦n algunos chicos interesantes, como Stancu y Stanciu. Al segundo le atropell¨® Evra dentro del ¨¢rea y el primero ejecut¨® con ¨¦xito el penalti. Luego, los rumanos mantuvieron tieso a su hidalgo rival y si no llegaron a m¨¢s es porque les falta cesto. Su delantero titular es Andone, un gladiador de Segunda Divisi¨®n, del C¨®rdoba. Donde no le lleg¨® el coraz¨®n a Rumania a los azules les alcanz¨® con el estacazo de Payet. Un respiro se hizo sentir en toda Francia, en la convulsa Francia de estos d¨ªas. Mientras, a Payet las l¨¢grimas le regaban las mejillas.
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