Orellana rescata a un Celta descafeinado frente al Ajax

El Celta se descafein¨® en la alineaci¨®n, rebajado por la decisi¨®n de Berizzo de guardar a bastantes de sus mejores futbolistas. El domingo llega el Deportivo a Bala¨ªdos, algo m¨¢s que un partido, y por ahora la prioridad del t¨¦cnico argentino no solo es garantizar un tr¨¢nsito sin sobresaltos por la competici¨®n dom¨¦stica sino tambi¨¦n reactivarse con la vitamina an¨ªmica que supone derrotar al eterno rival. Con esa perspectiva, con Iago Aspas, Cabral, Bongonda y Hugo Mallo en la grada, con el meta Sergio ?lvarez, Wass u Orellana de inicio en el banquillo, el Celta apenas tuvo argumentos para imponerse al Ajax, se pase¨® por el alambre de la derrota y rescat¨® un punto muy al final mientras desde Lieja llegaban noticias de un empate entre Standard y Panathinaikos que favorece los intereses del equipo vigu¨¦s: todos los equipos del grupo han sumado esta jornada y queda una menos para el final. Con tres partidos por jugar, el Celta sigue a dos puntos del Ajax, pero tres sobre los belgas y cuatro por encima de los griegos

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Resta la duda sobre las decisiones del entrenador porque hay momentos en una temporada en los que el b¨¢lsamo de la victoria prevalece sobre terapias contra el cansancio. Enfrente, el Ajax no sucumbi¨® a la tentaci¨®n de dosificar esfuerzos por m¨¢s que el domingo tambi¨¦n le espere un cl¨¢sico ante el Feyenoord que adem¨¢s puede marcar un punto de inflexi¨®n en el campeonato porque en juego est¨¢ la opci¨®n de reducir la desventaja con el l¨ªder a dos puntos o ampliarla a ocho. Suele ocurrir con equipos en buena racha, y el Ajax atraviesa una de ellas, que duele tocar alguna pieza. As¨ª, apenas falt¨® el lesionado mediocentro Sch?ne en el once tipo que se march¨® de Vigo tras mantener el invicto en sus diez ¨²ltimos partidos. Sch?ne, que ya pasa de los treinta, es el contrapunto en un equipo p¨¢rvulo. El central Viergever tiene 27 a?os, Gudelj y Veltman est¨¢n en los 24 y el resto de futbolistas que comenzaron el partido en Bala¨ªdos no llegan a esa edad. Un portero y un central de 20, un delantero de 19. Ese es el Ajax, frescura, talento y un estilo irrenunciable. Tambi¨¦n un punto de candidez que le hizo penar en las acciones a bal¨®n parado, mal defendidas ante un rival como el Celta que tampoco suele destacar en esa faceta. As¨ª logr¨® Font¨¤s enjugar la primera ventaja holandesa.

Porque el Ajax empez¨® con buen tono, pero no lo mantuvo, lo recobr¨® y lo perdi¨®. Fluctu¨® en su rendimiento y dej¨® estela de una inmadurez que le quita, pero tambi¨¦n le da. El desparpajo lo mostr¨® para adelantarse en el marcador tras una gran acci¨®n de Dolberg, un ani?ado delantero que recuper¨® la pelota en la frontal de su propia ¨¢rea tras una falta lateral en contra, dej¨® atr¨¢s varios rivales a base de fortaleza y habilit¨® a Ziyech, el mediocentro, para que batiese a Rub¨¦n Blanco tras descolgarse en labores de finalizador. El Celta hizo entonces lo recomendable: empatar de inmediato. Fue una acci¨®n tan epis¨®dica como el tanto que hab¨ªa encajado siete minutos antes, fulgor en medio de la planicie porque Font¨¤s resolvi¨® con la espuela y firm¨® un gol bell¨ªsimo en su ejecuci¨®n.

El partido se igual¨® y eso era lo m¨¢s justo porque matices al margen, m¨¢s all¨¢ de las buenas intenciones, de detalles individuales y actitudes colectivas encomiables, nadie merec¨ªa la ventaja. As¨ª lo pareci¨® hasta que con media hora por jugar entr¨® Orellana, estableci¨® un par de conexiones y se hizo la luz. Se ilumin¨® el Celta m¨¢s barroco, el que se gusta, pero el Ajax apag¨® la bombilla en otra contra ante la que volvi¨® a faltar prestancia y contundencia. Marc¨® Younes y de nuevo se evidenciaron dos factores: en primer lugar el de la debilidad zaguera del Ajax para defender el bal¨®n parado que pudo costarle un gol a remate de Roncaglia tras un saque de esquina; y en segunda instancia, que hay futbolistas que marcan diferencias incluso en situaciones l¨ªmite. Orellana es uno de ellos. Cuando todo se le complicaba a su equipo y el reloj se desbocaba hacia el final exhibi¨® su zurda para volver a empatar el partido con una obra de arte.