El Valencia da 38 pases para marcar el tercer gol al Granada

Tan c¨®modo se encontr¨® el Valencia en el nuevo Los C¨¢rmenes, con tan poca oposici¨®n, que para marcar su tercer gol, el que ven¨ªa a poner el broche a un partido que siempre tuvo dominado, emple¨®?38 pases (43 acciones en total). M¨¢s de una cuarentena de intercambios de bal¨®n en un minuto y 45 segundos para trasladarlo desde su campo hasta el fondo de la porter¨ªa de Ochoa. Una suerte de combinaciones que inici¨® Mangala y en la que se vieron implicados todos los jugadores, hasta que Santi Mina le puso el broche del gol.

Liberado de tensi¨®n, el Valencia es otro. Compite y se maneja con gusto, el que dota Parejo, en¨¦rgico con el despliegue de Carlos Soler, punzante con Cancelo percutiendo por la banda derecha, recuperado en el ¨¢nimo el portugu¨¦s, con Zaza de finalizador, autor de dos goles el italiano en apenas dos minutos que hundieron al Granada, un grupo de jugadores extra?os de discutible nivel, sin concierto alguno, alejado de lo que se supone es un equipo que no ha sabido encajar Lucas Alc¨¢raz. Poca cosa fue el cuadro andaluz para el Valencia que ha conseguido tres victorias en una semana. El Granada tiene un pie en el abismo.

El conjunto nazar¨ª es un enjambre de jugadores sin apenas lazos idiom¨¢ticos y culturales, una torre de Babel sin ensamblar. Ante el Valencia formaron de inicio 11 futbolistas de diez nacionalidades distintas, con dos franceses en la alineaci¨®n, que comienza con el mexicano Ochoa en la porter¨ªa, situ¨¢ndose en punta Kravets, un Ucraniano. En la alineaci¨®n titular solo un espa?ol, H¨¦ctor, jugador cedido por la Real Sociedad. Y en el palco, un chino, Jian Lizhang, el propietario del club nazar¨ª. Ah¨ª, tal vez, se explica su desgracia.

En dos minutos, del 18 al 20, Zaza ejecut¨® al Granada con dos goles de nueve puro. En el primero anot¨® de cabeza con potencia, picando el esf¨¦rico un preciso centro de Montoya, tras realizar el italiano un perfecto movimiento de desmarque que despist¨® a Ingason. No celebr¨® Zaza su gol sintiendo en su interior que necesita ofrecer m¨¢s rendimiento. Dos minutos despu¨¦s, el internacional azurro s¨ª esboz¨® una sonrisa al empujar de nuevo a la red de Ochoa un centro desde el extremo izquierdo de Santi Mina. Anotaba su cuarto tanto de valencianista Zaza cuyo compromiso y esfuerzo resulta contagioso para sus compa?eros.

El doble golpe hizo mella en el Granada y en su afici¨®n que ya no cree en su equipo. Y tuvo seguidamente Zaza el tercer gol en sus botas, tras un contragolpe perfectamente lanzado por Cancelo asistiendo al ex de la Juventus que se top¨® con Ochoa. Bien organizado en defensa, el Valencia superaba de principio a fin al Granada dominando todas las facetas del juego. La intensidad y presi¨®n del Granada apenas inquietaba al Valencia que se relam¨ªa con la posibilidad de alcanzar contras letales. El conjunto de Lucas Alc¨¢raz tan solo encontr¨® antes del descanso una ocasi¨®n para meterse en el partido.

Al inicio de la segunda mitad, pudo oscurecerse el panorama m¨¢s si cabe para el Granada con el que tuvo compasi¨®n el ¨¢rbitro, no expulsando a Uche Agbo que cort¨® en falta la entrada de Cancelo hacia el ¨¢rea de Ochoa siendo el ¨²ltimo defensor nazar¨ª, contando ya el nigeriano con una cartulina amarilla. La mirada de pena del Uche Agbo hacia el colegiado hizo que este se apiadara y no se?alara la falta que obligaba a la expulsi¨®n.

El Valencia segu¨ªa superando al Granada, a la carrera y en est¨¢tico, con un control absoluto del juego ejemplificado en una acci¨®n eterna del conjunto de Voro, de atr¨¢s a adelante, de izquierda a derecha, una jugada con casi dos minutos de posesi¨®n y 38 toques interviniendo todos sus jugadores y que concluy¨® con un gol de Santi Mina asistido por Carlos Soler. Una joya del nuevo Valencia de Voro. Un error de Alves propici¨® el gol de Ponce, que incomprensiblemente mando callar a la afici¨®n nazar¨ª. No le dio para m¨¢s al Granada con un pie en el abismo.