Lorenzo y el reto de empezar de cero

Despu¨¦s de caerse en Argentina, Jorge Lorenzo lo tuvo claro. Ten¨ªa que evitar la Q1 como paso previo a la Q2, la sesi¨®n de clasificaci¨®n a la que pasan directamente los diez pilotos m¨¢s r¨¢pidos en los libres del fin de semana. Aquel domingo, en Termas, sal¨ªa el 16?. Hizo una buena salida, escal¨® alguna posici¨®n, salv¨® la primera frenada. Pero, al intentar seguir avanzando, por el interior de la segunda curva, su rueda delantera se encontr¨® con la trasera de Iannone. No complet¨® ni una vuelta. ¡°Tengo que salir de aqu¨ª atr¨¢s¡±, repet¨ªa ante los suyos. No est¨¢ acostumbrado a empezar la carrera entre tanto barullo. No le gusta, tampoco. Y en cinco grandes premios disputados le ha pasado ya en tres ocasiones que ha salido m¨¢s all¨¢ de la d¨¦cima posici¨®n: form¨® el 12? en Qatar, y el 16? en Argentina y en Francia. Est¨¢ pagando la novatada.

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Tras el podio logrado en Jerez, el piloto de Ducati busca su primera victoria, pero se enfrenta al reto de empezar de cero cada viernes, en cada circuito. Porque no tiene todav¨ªa una base, una moto con la que se sienta c¨®modo y empezar a trabajar en mejorar los tiempos ¨Cen Termas, por ejemplo, andaba todav¨ªa cambiando su posici¨®n encima de la moto¨C. Adem¨¢s, no tiene referencias de la Desmosedici, ni datos v¨¢lidos de c¨®mo se comportaba su moto un a?o antes en el circuito en cuesti¨®n. Cada viernes es un desaf¨ªo. Y acertar en la puesta a punto de ese primer d¨ªa puede acabar marcando todo el fin de semana.

Son algunas de las razones por las que en el primer d¨ªa en el circuito de Mugello su compa?ero de equipo, Andrea Dovizioso, fue el segundo piloto m¨¢s r¨¢pido (a solo 29 mil¨¦simas de Crutchlow) y ¨¦l fue el d¨¦cimo, eso s¨ª a poco menos de cuatro d¨¦cimas. De hecho, fue mejor su crono y su clasificaci¨®n en el primer libre que en el segundo. ¡°Al intentar mejorar la puesta a punto, hemos equivocado el camino. Hay muchos pilotos de Ducati delante en este circuito. Tenemos mucha potencia y en frenada y entrada a curva somos competitivos; la moto es muy estable y est¨¢ para ganar¡±, conced¨ªa. ?l todav¨ªa no lo est¨¢. Aunque eso podr¨ªa cambiar si mejora este s¨¢bado.

Mugello es un circuito en el que cuenta cinco victorias y tres segundos desde el 2009. La confianza que le da el circuito es alta, como ocurr¨ªa con Jerez, donde dio la sorpresa y firm¨® una carrera excepcional. All¨ª, como en Mugello (donde adem¨¢s Ducati realiz¨® un test privado), los puntos d¨¦biles de la Desmosedici pasan algo m¨¢s desapercibidos: hay pocas curvas lentas y la recta, de m¨¢s de un kil¨®metro, no es un problema: ¡°Como la ¨²ltima curva es bastante r¨¢pida, no tenemos muchos problemas en la salida, la moto apenas se levanta. S¨ª que hay que ir con cuidado con la primera frenada, en esa primera curva debes ser muy preciso en la l¨ªnea que haces con la moto¡±, explicaba Dovizioso.

Nadie ha dudado nunca de la potencia de la moto fabricada de Borgo Panigale (Ducati copaba este viernes las cinco primeras posiciones de la tabla de velocidades puntas), pero uno de los grandes problemas de esta temporada ha sido la aceleraci¨®n. ¡°Ha habido un cambio de reglamento que nos ha penalizado. Es evidente¡±, asume Gigi Dall¡¯Igna, ingeniero jefe de la casa italiana en referencia a la prohibici¨®n de las alas. Sin ap¨¦ndices, Ducati arranc¨® el curso con problemas con el tren delantero. Y para compensar esa falta de buenas sensaciones todav¨ªa se perdi¨® m¨¢s: ¡°Sin alas hemos tenido que buscar un balance de pesos distintos y otra puesta a punto, por eso hemos perdido en aceleraci¨®n¡±, concede el italiano. Pero pistas como la de Mugello minimizan los da?os.

Eso s¨ª, all¨ª donde Lorenzo ara?aba las d¨¦cimas, en las curvas r¨¢pidas, ya no le ser¨¢ tan f¨¢cil ahora ganar carreras. Esta moto tiene un problema cr¨®nico: le cuesta girar. Lejos de obsesionarse con ello, el mallorqu¨ªn empieza a tirar de freno trasero para mejorar a la entrada de las curvas ya que no puede aprovechar el paso. El inconveniente: tiene que pensar encima de la moto para ser r¨¢pido. Y siempre le gust¨® dejarse llevar por su instinto.