¡°Jon Rahm est¨¢ decidido a ser el mejor del mundo¡±
El preparador mental del golfista vasco destaca su fortaleza interior y su confianza
Eriz Rahm se pasea por el Open en manga corta. Pese al viento, el hermano mayor de Jon no tiene fr¨ªo. Tampoco la madre de ambos, ?ngela. El padre, Edorta, no ha viajado. ¡°Si juego bien, igual viene el fin de semana¡±, dice Jon Rahm, y en sus palabras y en su modo de hablar se adivina la certeza de que el vasco piensa estar en lo m¨¢s alto. Esa confianza casi arrogante que emana del jugador de Barrika (Bizkaia) se transmite en cada gesto, en cada golpe. Por algo los veteranos le ven y piensan en Seve, en su juego sin reservas, a todo o nada.
Encauzar ese torrente de seguridad en s¨ª mismo es tarea de Joseba del Carmen, vitoriano de 50 a?os, el preparador mental que moldea a Rahm desde hace tres a?os y medio, desde su ¨¦poca en la Universidad de Arizona. Del Carmen, que trabaja tambi¨¦n con el Alav¨¦s y con el Baskonia, utiliza el coaching cu¨¢ntico. ¡°Es una forma de trabajar con las personas sobre la l¨®gica y el autoconocimiento, sobre qu¨¦ emociones viven, qu¨¦ informaci¨®n manejan...¡±. En el caso de Jon Rahm, habla de un sujeto ¨²nico. ¡°Jon lo basa todo en su determinaci¨®n. En su interior y en su confianza. Esa es la base. Llevamos tres a?os trabajando en esto y es un proceso, una evoluci¨®n. No me sorprende escucharle hablar as¨ª. Le he visto crecer. Lo que m¨¢s destaco de ¨¦l es la fortaleza que tiene interiormente, lo claro que ve c¨®mo se siente. Tiene una determinaci¨®n total por ser el mejor del mundo. Es un deseo. Est¨¢ decidido a ello. Quiere ser el n¨²mero uno¡±.
Manejar las emociones es una labor complicada. El exceso de confianza puede ser un arma de doble filo en un deporte en el que la mente es tan vol¨¢til. ¡°Pero eso no es malo¡±, dice Del Carmen. ¡°La cuesti¨®n es c¨®mo manejarlo. Para eso se trabaja en el d¨ªa a d¨ªa. A diferencia del f¨²tbol y del baloncesto, en el golf est¨¢s solo. Compites sin nadie m¨¢s. Y eso aumenta la responsabilidad¡±. La de Rahm se la ha marcado ¨¦l mismo. Ser el mejor.
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