Aplauso infinito para Iniesta
Las aficiones del Sporting de Portugal y Juventus han regalado en esta temporada una sentida ovaci¨®n al centrocampista azulgrana al ser sustituido
Fue en el minuto 116 de la final del Mundial de 2010. Fue tras un pase de Cesc F¨¤bregas. Y fue el momento de explosi¨®n que cualquier aficionado de la selecci¨®n espa?ola habr¨ªa deseado vivir al menos una vez en su vida. Gracias a Andr¨¦s Iniesta se palp¨®, disfrut¨® y goz¨® durante esa noche y todas las siguientes que se quieran porque quedar¨¢ grabado en la memoria y en los libros. Pero para Iniesta no fue solo su momento, sino que fue la ocasi¨®n perfecta para recordar a Dani Jarque, a su querido amigo y central del Espanyol ¨Cclub vecino y rival-, que hab¨ªa fallecido en el verano anterior porque su coraz¨®n dijo basta. El gesto de generosidad le vali¨® el afecto de toda la grada blanquiazul. Pero tambi¨¦n el del planeta bal¨®n porque evidenci¨® ser capaz de anteponer las personas a la fama o al ¨¦xito individual. Aprecio, adem¨¢s, que no le falt¨® a Iniesta en toda su carrera porque le rebosa el f¨²tbol de las botas. Y as¨ª se est¨¢ viendo en esta Champions League como hace tiempo que se observa en todos los estadios de Espa?a a excepci¨®n de San Mam¨¦s, aunque m¨¢s por tintes pol¨ªticos e ideol¨®gicos que por otro motivo.
La primera muestra de cari?o se la dio el estadio Jos¨¦ Alvalade, casa del Sporting de Portugal. En ese encuentro la afici¨®n bram¨®, apret¨® y achuch¨® cuanto pudo, pero a falta de 10 minutos Valverde decidi¨® poner a Paulinho para ganar f¨ªsico a cambio de talento. De repente, la pita se torn¨® en una ovaci¨®n cerrada como reconocimiento a la carrera de un jugador que nunca vio una cartulina roja, que entendi¨® el deporte como lo que es y que desprende los valores que cualquier suegra querr¨ªa para su yerno. Algo similar ocurri¨® anoche en el Juventus Stadium, donde la afici¨®n hizo retumbar los cimientos del estadio con sus c¨¢nticos y gritos, con su aliento y sus protestas. Y, de nuevo, de repente, la gente torn¨® el bullicio en aplausos porque Iniesta dejaba el campo a falta de 10 minutos para la conclusi¨®n del duelo para ser relevado por Jordi Alba. ¡°Es muy bonito que te muestren este cari?o tanto en casa como fuera. Pienso que la gente muestra lo que uno despierta en ellos. La verdad es que es un orgullo y me hace muy feliz como futbolista y como persona¡±, acert¨® a decir Iniesta un tanto abrumado tras el encuentro y ante las c¨¢maras de beIN Sports.
No fue ni de lejos el mejor partido de Iniesta, perdido entre el poco juego de medios que practic¨® el Barcelona, m¨¢s pendiente en restar l¨ªneas de pase que en originarlas en casa del rival. Aunque s¨ª que fue el ¨²nico medio que trat¨® de amansar el cuero, de darle sentido al ataque, de poner la pausa y tratar de mezclar como los c¨¢nones azulgrana mandan desde que Cruyff llegara en su d¨ªa. Dio 61 pases buenos ¨Cpocos cuando no hace tanto daba m¨¢s de 80 de media¡- y cinco malos, adem¨¢s de lograr siete recuperaciones y sufrir 11 p¨¦rdidas. Remates, ninguno; incidencia, poca. Pero el afecto del planeta f¨²tbol, todo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.