El ca?¨®n de Correa da la victoria al Atl¨¦tico ante el Valencia
Un espectacular zapatazo del argentino desde fuera del ¨¢rea consolida al equipo de Simeone en la segunda plaza, a nueve puntos del Bar?a
Con 1,74m de altura y su aparente endeblez f¨ªsica, a Angelito Correa no parece caberle en su repertorio el golpe violento del bal¨®n. Lo suyo es m¨¢s la gambeta, el arte del enga?o y el ratoneo. Pero el chico es impredecible y gan¨® el partido con un zapatazo imponente a la hora de juego. Un derechazo recto, tenso y potente que revent¨® la escuadra de Neto. Correa representa el ejemplo de otra metamorfosis, otro sufrido cambio de molde operado por Simeone sobre uno de sus futbolistas. Sin sitio para jugar como segundo delantero, su entrenador le sit¨²a como falso extremo derecho. Partiendo desde ese costado, trata de aproximar su habilidad al ¨¢rea por dentro o por fuera. Lo mismo se ceba en el uno contra uno o contra los que haga falta, que se gira para recibir y pisar ¨¢rea que se descuelga con un disparo tremendo. Nunca est¨¢ de m¨¢s Correa, m¨¢s all¨¢ de sus claroscuros. De ser capaz de lo mejor o de lo peor. Su gol consolida al Atl¨¦tico en la segunda plaza, se sit¨²a a nueve puntos del Bar?a y distancia al Valencia en esa misma cifra.
La puesta en escena de Simeone fue atractiva. Koke y Sa¨²l en el eje del centro del campo, Carraco y Correa, orillados y Griezmann y Diego Costa como cabezas de ¨¢rea. Un equipo para tocar y volar por los costados al que acompa?¨® una presi¨®n ambiciosa en el arranque. Incluso arriesgada, con Koke y Sa¨²l apostados en muchas ocasiones cerca de la medialuna del ¨¢rea de Neto. Se quiso abrir Simeone para contrarrestar el orden cartesiano de Marcelino.
God¨ªn pierde tres dientes y Griezmann se encara con la grada
Al poco de comenzar la segunda parte, ninguno de los dos centrales por los que apost¨® de inicio Simeone (Savic y God¨ªn) permanec¨ªa sobre el c¨¦sped. El primero cay¨® en el minuto 28 v¨ªctima de una lesi¨®n muscular. Lo del uruguayo fue mucho m¨¢s aparatoso. El portero del Valencia, Neto, sali¨® con los pu?os para rechazar un bal¨®n a¨¦reo, pero no impact¨® con el cuero y s¨ª con la cara de God¨ªn. El central perdi¨® tres dientes. Fue atendido en una cl¨ªnica en la que se descart¨® una fractura en la mand¨ªbula.
Pese al parte m¨¦dico y el fr¨ªo, el ambiente en el Wanda era festivo. El Atl¨¦tico se queda a nueve puntos del Bar?a y abre brecha con Valencia y Madrid. La pol¨¦mica la protagoniz¨® Griezmann, que en los minutos finales mand¨® callar al p¨²blico cuando le recrimin¨® que frenase un contraataque.Para Simeone, el franc¨¦s hizo lo correcto. ¡°No atac¨® innecesariamente cuando no hab¨ªa ataque. No le defiendo, digo que hizo lo que ten¨ªa que hacer¡±, sostuvo Simeone. Sobre Correa, el t¨¦cnico dijo: ¡°Intent¨® siempre renovarse, con ¨¦l tenemos verticalidad, profundidad, gol... El trabajo suyo est¨¢ pagando la idea que tuve de ponerle en la banda. Estamos viendo una de sus mejores versiones.
La pelota fue para el Atl¨¦tico y los espacios para el Valencia de durante gran parte del encuentro. Esa confrontaci¨®n de propuestas deriv¨® en un partido muy pizarrero, una constante en los enfrentamientos entre ambos t¨¦cnicos. Se impuso la intensidad a las buenas intenciones. El intento por gobernar el juego de los rojiblancos se transform¨® en un vaiv¨¦n de pelotas de costado a costado casi siempre finiquitado con insulsos centros al ¨¢rea. Sorprendi¨® que con ese dise?o de equipo Griezmann y Correa entrara tan poco en juego en los primeros 45 minutos. El Atl¨¦tico era las aventuras sin repercusi¨®n de Carrasco y los centros sin destino de Vrsaljko y Lucas. Tampoco hubo mucho de Diego Costa. La cara del Valencia era Kondogbia por la l¨®gica del planteamiento de su entrenador. Destructivo el franc¨¦s, con una potencia de caballo para llenar el campo de recuperaciones, el partido estuvo m¨¢s para ¨¦l que para Parejo. Apenas se ara?aron los dos equipos en ese ¨¢spero primer acto. Preponder¨® m¨¢s el respeto que se ten¨ªan que su condici¨®n de segundo y tercero de la Liga.
Sa¨²l fue quien quit¨® la escarcha de los guantes de Neto pasado el cuarto de hora. Lo hizo con un zurdazo desde fuera del ¨¢rea que exigi¨® al meta brasile?o a volar al palo. De alguna manera, quiz¨¢ descubri¨® donde estaba la soluci¨®n del partido que luego encontrar¨ªa Correa con su formidable zapatazo. Neto tambi¨¦n evit¨® el gol. Esta vez en un saque de esquina, otra v¨ªa muy caracter¨ªstica de este tipo de duelos. No se entiende como era Gay¨¢ el encargado de marcar a Diego Costa. Koke lo vio desde el c¨®rner y le puso la pelota para que se elevara sobre las tres cabezas que le saca al lateral valencianista. A su contundente testarazo respondi¨® Neto con un vuelo y una mano plagados de reflejos y elasticidad. Para entonces ya estaba en el campo Gim¨¦nez, sustituto de Savic, que se fue cerca de la primera media hora de juego por un pinchazo.
La ocasi¨®n de Costa desperez¨® al Valencia, que trat¨® de asumir galones en el juego. Siempre con Kondogbia como actor principal, pero sin apenas intervenci¨®n de Parejo y de sus atacantes, Santi Mina y Zaza. Una combinaci¨®n entre ambos, interrumpida por Oblak, al borde del descanso fue la ¨²nica muesca que dejaron.
El inicio del segundo acto estuvo marcado por la lesi¨®n de God¨ªn, que perdi¨® tres dientes por un golpe del portero Neto. Un contratiempo que oblig¨® a Simeone a tomar la decisi¨®n que menos descompusiera la naturalidad. Para compensar la falta de los dos centrales titulares meti¨® a Juanfran de lateral derecho, reubic¨® a Lucas de central junto a Gim¨¦nez y mand¨® a Vrsaljko al lateral izquierdo. La pareja que formaron el uruguayo y el franc¨¦s respondi¨® bien. Le dieron la raz¨®n a su t¨¦cnico cuando asegura que cuenta con el mejor cuarteto de centrales del mundo. Contuvieron a Zaza y Mina y luego a Rodrigo cuando tuvieron que defender el ca?onazo de Correa.
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