Benzema, el esperado

En la ¨²ltima d¨¦cada el Real Madrid adquiri¨® tan solo tres delanteros centros. El primero fue Javier Saviola, incorporado a coste cero en el verano de 2007; un a?o y medio despu¨¦s, en el mercado invernal de la 08/09, el club desembols¨® 27 millones por Klaas-Jan Huntelaar, y ese mismo verano, con el regreso de Florentino P¨¦rez a la presidencia, se deshizo del holand¨¦s e incorpor¨® por 35 millones al jugador con mayor proyecci¨®n del f¨²tbol franc¨¦s: Karim Benzema. Desde aquel 1 de julio de 2009, dos cesiones ¡ªAdebayor y Chicharito¡ª, tres canteranos ¡ªMorata, Mariano y Borja Mayoral¡ª, la venta del punta titular, Gonzalo Higua¨ªn, en 2013 y un mensaje contundente: Benzema es intocable. Predilecto del presidente pero sospechoso habitual de la masa social, su condici¨®n de protegido se reforz¨® sobremanera con la llegada al banquillo de Zinedine Zidane. Dos a?os y un mes despu¨¦s del ascenso de su compatriota, el delantero de 30 a?os atraviesa su momento m¨¢s convulso en plena crisis de juego, resultados y gol del Madrid. Entre la baraja de posibles soluciones para revertir la situaci¨®n asoma la carta del PSG. Hoy, con el equipo de Emery en el horizonte, Benzema podr¨¢ medir frente a la Real Sociedad (20.45, Movistar Partidazo) la histeria del Bernab¨¦u.

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El Real d¨¦ficit de Cristiano

La eliminatoria de Champions medir¨¢ su estatus y se presume decisiva para determinar su futuro m¨¢s all¨¢ de junio. De momento el club no se pronuncia sobre la planificaci¨®n de la pr¨®xima temporada, pero el puesto de delantero es, diez a?os despu¨¦s, el m¨¢s se?alado en una temporada en la que el Madrid registra 11 goles menos que en la anterior. Cuestionado ayer por este todo o nada de su pupilo, Zidane rest¨® presi¨®n: "Tiene la misma que todos", dijo el t¨¦cnico, que s¨ª le reclam¨® mejores prestaciones. "Todos podemos aportar m¨¢s, Benzema el primero". Sobreprotegido por el entrenador, que le liber¨® de la competencia directa al apostar por la ¨²nica oposici¨®n del joven Mayoral, nunca su versi¨®n fue m¨¢s pobre: solo seis tantos, la mitad que el curso anterior. Goleador irregular, defend¨ªa su alma de diez y su falta de olfato asegurando que era un punta moderno, capaz de anotar, asociarse y elaborar.

El argumento se tambalea: registra su peor producci¨®n y apenas se muestra en la asociaci¨®n, ni siquiera con su mejor aliado, Cristiano Ronaldo. Desde la temporada 2012-2013, Benzema no buscaba a nadie tanto como al portugu¨¦s. Era el jugador al que m¨¢s balones enviaba en liga (96 de media). Este a?o solo ha conectado con ¨¦l en 24 ocasiones y encuentra antes a Marcelo, Kroos, Isco o Carvajal. Sus nuevos socios evidencian un cambio de posici¨®n provocado por la reconversi¨®n de Cristiano como punta. Con CR en el ¨¢rea, Benzema busca aire fuera y cae m¨¢s a las bandas que nunca. All¨ª es donde trata de asociarse con los volantes y laterales y donde no encuentra con la misma frecuencia al portugu¨¦s.

En un lugar u otro, la permanente apat¨ªa que muestra en su juego y sus n¨²meros le han llevado a estar condenado por el p¨²blico. En los ¨²ltimos meses es dif¨ªcil recordar un encuentro sin reprimendas hacia el punta, ni siquiera el d¨ªa de su regreso tras una lesi¨®n muscular hace ya tres semanas.

Dolido por las cr¨ªticas e incapaz de comprender al Bernab¨¦u por mucho que se lo intenten explicar desde el club, a Benzema solo le resta un elemento capaz de abrirle el camino de la redenci¨®n y comprensi¨®n de su hinchada: el PSG.