El Bar?a saca bola con Arturo Vidal

La irrupci¨®n de Riqui Puig, el imberbe medio de 18 a?os que puso patas arriba a todo el Milan en el ¨²ltimo amistoso de pretemporada, ha desatado en parte de la afici¨®n del Barcelona la corriente cruyffista y su propuesta de f¨²tbol de posesi¨®n y posici¨®n. Pocos gestionan tan bien el espacio y el tiempo como el liviano jugador, que pide alguna oportunidad con el primer equipo como en su d¨ªa la tuvieron Pedro o Busquets. Depender¨¢ de Ernesto Valverde, que fue uno de sus valedores para que se quedara en el club cuando desde la direcci¨®n deportiva le dijeron que le faltaban muchas lentejas para llegar a la ¨¦lite. Ocurre, sin embargo, que al Bar?a ya no lo dirige Xavi desde el tapete ni lo agita Iniesta, los guardianes de un estilo que se ha erosionado con el paso del tiempo. As¨ª, tanto el t¨¦cnico como el ¨¢rea deportiva azulgrana entienden que no solo con el pase se gana, sino que hay que equilibrar al equipo tambi¨¦n con m¨²sculo. Y ahora, con la llegada de Arturo Vidal, el Bar?a saca bola y, de paso, recupera la mayor de las ambiciones.

Vidal es un jugador de ida y vuelta, con llegada y remate, entregado a la causa colectiva. ¡°Me voy a dejar la vida ac¨¢¡±, repiti¨® las dos primeras veces que agarr¨® el micro en su presentaci¨®n en sociedad como azulgrana, se?a de identidad que le ha acompa?ado desde bien chico porque por algo le llamaban Cometierra. Ahora, sin cambiar de registro durante su exitosa carrera tanto en la Juve como en el Bayern, ya es el Rey Arturo. ¡°He escuchado lo del ADN, pero yo creo que tengo la misma mentalidad que todos los que est¨¢n ac¨¢. Lo m¨¢s importante es ganar y levantar copas al final del curso¡±, expuso, acorde a su ambici¨®n. Sorprendi¨® m¨¢s, sin embargo, la respuesta del secretario t¨¦cnico ?ric Abidal cuando le cuestionaron si este Bar?a ya no pod¨ªa jugar como su equipo, entonces gobernado por Guardiola. ¡°Se habla de un modelo y en aquella ¨¦poca hab¨ªa otros jugadores. Ahora, tenemos a otros y debemos adaptarnos¡±, resolvi¨®. Aunque por ese equipo pasaron jugadores como Keita, Tour¨¦ y Mascherano ¡ªde un corte similar a Vidal¡ª y la propuesta no se resinti¨® ni un ¨¢pice.

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Tanto le da a Vidal, que es de ideas fijas: ¡°Yo vine para ayudar y para ganar t¨ªtulos¡±. Entre ellos, la Champions, tal y como explic¨® cuando le cuestionaron si era antimadridista y ten¨ªa una cuenta pendiente con el equipo blanco. ¡°No lo soy, pero desde ahora soy rival de todos los equipos que se enfrenten al Barcelona¡±, se arranc¨®. ¡°Y mi ¨²nica cuenta pendiente es la Champions, que nunca la gan¨¦. Ojal¨¢ sean tres Champions en tres a?os¡±, a?adi¨®, en referencia al contrato que ha firmado como azulgrana de tres temporadas.

Listo para jugar

Operado hace cuatro meses de la rodilla derecha y el menisco, Vidal ha quemado las etapas de recuperaci¨®n porque hace ya casi un mes que corretea. ¡°F¨ªsicamente estoy muy bien, perfecto y en forma¡±, se?al¨® el centrocampista; ¡°as¨ª que espero entrar lo antes posible en el equipo¡±. Tanto es as¨ª, que pidi¨® turno para disputar el pr¨®ximo domingo la Supercopa de Espa?a ante el Sevilla en T¨¢nger (Marruecos). ¡°Es el entrenador quien decide, pero yo me siento al cien por cien en lo f¨ªsico¡±. Su gazuza, en cualquier caso, no se qued¨® ah¨ª: ¡°Vengo a ganarme un puesto de titular entre los mejores y salir todos los partidos a la cancha¡±.

Queda por ver c¨®mo encaja en el equipo ¡ªRakitic y Arthur son sus m¨¢s duros competidores, adem¨¢s de Denis Su¨¢rez, Rafinha, Ale?¨¢, Andr¨¦ Gomes si no se traspasa y puede que Riqui Puig¡ª y en el ansiado estilo azulgrana. ¡°Arturo tiene car¨¢cter, da equilibrio en el medio del campo en defensa y en ataque porque tiene gol y llegada. Lo necesitamos¡±, resolvi¨® Abidal. ¡°Creo que puedo dar mucho porque vengo con ganas y hambre¡±, se sum¨® Vidal, que, sin embargo, descart¨® tener por la mano el juego de medios y de pase tras militar en el Bayern de Guardiola. ¡°Es otro entrenador, otros compa?eros y otra forma de jugar... Lo que espero es adaptarme r¨¢pido y hacer m¨¢s fuertes a los compa?eros¡±, zanj¨®. Y, claro, a ganar laureles.