Conmebol no sanciona a River y confirma la final de la Libertadores contra Boca

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Acom¨®dense en los sillones, desaj¨²stense las corbatas y preparen los pochoclos: el supercl¨¢sico argentino m¨¢s hiperb¨®lico de todos los tiempos, el Boca-River que definir¨¢ la Copa Libertadores 2018, ya es oficial. La confirmaci¨®n definitiva lleg¨® este s¨¢bado por la noche, cuando la Conmebol desestim¨® el pedido de Gremio de Brasil para que se le diera por ganada su serie ante River porque el t¨¦cnico del equipo argentino, Marcelo Gallardo, que hab¨ªa sido suspendido en la semifinal de ida, incumpli¨® el reglamento e ingres¨® en el vestuario en el descanso de la revancha.

Gallardo qued¨® inhabilitado para sentarse en el banco de suplentes durante los pr¨®ximos cuatro partidos, y en el primero ni siquiera podr¨¢ ingresar al estadio, pero River fue ratificado como finalista. Los partidos se jugar¨¢n los s¨¢bados 10 y 24 de este mes, la ida en la Bombonera y la revancha en el Monumental, a las 16 de Argentina (19 GMT).

Se esperaba que el fallo de la Conmebol, con sede en Asunci¨®n de Paraguay, saliera entre el viernes por la noche y el s¨¢bado al mediod¨ªa, por lo que el paso de las horas sin novedades aument¨® la incertidumbre de un final¨ªsima que atraviesa la sociedad, la pol¨ªtica y hasta la religi¨®n de los argentinos.

La televisi¨®n muestra a parejas que postergaron su luna de miel para estar presentes en el estadio, en Twitter se cuentan casos de novios que tienen programada su boda para uno de los d¨ªas del partido y dudan de postergarlo "porque es m¨¢s probable que me vuelva a casar que una final River-Boca por Libertadores", a una periodista le baj¨® la presi¨®n mientras le hac¨ªa una pregunta al t¨¦cnico de River en rueda de prensa y el presidente de la Fundaci¨®n Cardiol¨®gica Argentina inform¨® que las finales triplica el riesgo de infarto.

La fuerza del River-Boca m¨¢s esperado de los 373 partidos que disputaron en 110 a?os de historia tambi¨¦n se ha convertido en una cuesti¨®n de Estado en Argentina. Tanto que dej¨® mal parado al presidente Mauricio Macri, quien este viernes intent¨® por sorpresa que las hinchadas visitantes acudieran a la Bombonera y el Monumental. Desde 2013, cuando un hincha de Lan¨²s muri¨® antes de un partido contra Estudiantes en La Plata, en uno de los tantos incidentes mortales que lacera al f¨²tbol argentino, los partidos de primera divisi¨®n se juegan s¨®lo con p¨²blico local.

La pol¨ªtica le agreg¨® m¨¢s tensi¨®n a un escenario ya agitado. Macri le pidi¨® a la ministra de seguridad, Patricia Bullrich, que trabajara en conjunto con las autoridades de la ciudad de Buenos Aires para que asistiera el p¨²blico visitante. Macri, expresidente de Boca entre 1995 y 2007, escribi¨® en Twitter sobre "una oportunidad de demostrar madurez y que se puede jugar en paz", pero adem¨¢s justific¨® su decisi¨®n en el recuerdo que ten¨ªa de un triunfo de su equipo ante River por la Copa Libertadores de 2004, tambi¨¦n jugado en el Monumental ¨²nicamente con p¨²blico local: "Acord¨¢ndome de esa semifinal con River que ganamos (en 2004) y se escuchaba el silencio... eso no es f¨²tbol. Hay que gritar el gol", dijo Macri.

Pero el gobierno de la ciudad y los dirigentes de los clubes se enteraron del impulso presidencial en el momento del anuncio y lo que sigui¨® fue un enredo. El ministro de seguridad porte?o, Mart¨ªn Ocampo, dijo que no era "factible" un River-Boca con dos hinchadas, pero cuatro horas m¨¢s tarde, despu¨¦s de que Macri volviera a confirmar que estaban dadas las garant¨ªas de seguridad, debi¨® desdecirse y anunci¨® que permitir¨ªan 4.000 visitantes en cada partido.

Macri, en una decisi¨®n unipersonal, apostaba a una puesta en escena. En medio de su a?o m¨¢s dif¨ªcil de gesti¨®n, con una inflaci¨®n anual que se estima en el 50%, la ca¨ªda del poder adquisitivo de los salarios y un creciente descontento social, el presidente concluy¨® que mostrar ante el mundo un una final so?ada y con dos hinchadas implicar¨ªa una imagen de normalidad. Las finales se jugar¨¢n pocos d¨ªas antes de que en Buenos Aires se realice la cumbre del G20, con la presencia de las m¨¢ximas autoridades pol¨ªticas del mundo. Seg¨²n adelantaron fuentes de River, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, presenciar¨ªa la revancha en el Monumental.

Las barras bravas del f¨²tbol argentino, no s¨®lo las de River y Boca, son los due?os de las tribunas, pero adem¨¢s la violencia en los estadios y alrededores excede a los integrantes de las hinchadas. ?C¨®mo har¨ªa la polic¨ªa para garantizar el traslado de 4.000 visitantes a lo largo de la ciudad? ?C¨®mo se despejar¨ªa el Monumental si Boca llegara a consagrarse campe¨®n en la cancha de su hist¨®rico rival?

Finalmente, Macri tuvo que retroceder sobre sus pasos antes de que terminara el viernes. "Le hemos ofrecido (a Boca y a River) las condiciones para que jueguen con p¨²blico visitante. A partir de ah¨ª, es decisi¨®n de los clubes, que son los que organizan el espect¨¢culo", se repleg¨® el presidente. Los clubes se reunir¨¢n este lunes para ponerle punto final al tema pero ya dejaron trascender que mantendr¨¢n el escenario habitual, de s¨®lo hinchas locales. "Es muy probable que decidamos jugar sin p¨²blico visitante", anticip¨® el presidente de Boca, Daniel Angelici.

A la intromisi¨®n pol¨ªtica, el propio Angelici ya le hab¨ªa agregado el cap¨ªtulo religioso cuando manifest¨® su rechazo a la decisi¨®n de la Conmebol de jugar los s¨¢bados. "Somos muy respetuosos de la colectividad jud¨ªa, que tiene muchos hinchas, y Boca no quiere jugar los s¨¢bados por respeto a la cantidad de socios que no podr¨¢n estar presente", hab¨ªa dicho el presidente de Boca. "Hay de todo. La gente de la colectividad jud¨ªa me ha escrito desesperada para que no sea un s¨¢bado", agreg¨® el titular de River, Rodolfo D'Onofrio.

Parad¨®jicamente, Boca y River jugaron este s¨¢bado sus partidos por la Superliga. River visti¨® a Estudiantes en la cancha de Quilmes y su p¨²blico fue autorizado de manera excepcional. La experiencia de permitir a los visitantes termin¨® en un desastre: la polic¨ªa reprimi¨® con balas de goma a los hinchas, se detectaron entradas falsificadas y hubo 50 detenidos.