F¨²tbol desatado entre Betis y Celta

Se recordar¨¢ el segundo tiempo que jugaron el Betis y el Celta. Ganaban los andaluces 2-0 gracias a dos acciones de sus canteranos Loren y Junior. En el Benito Villamar¨ªn se mascaba el triunfo b¨¦tico despu¨¦s de tres derrotas seguidas y, entonces, apareci¨® un valiente Celta. Impulsado por los cambios de Maxi y Hjulsager, introducidos por Mohamed, que fue expulsado, y por el incombustible Aspas, el conjunto gallego le hizo tres goles como tres soles a un Betis que se derrumb¨® como un castillo de naipes cuando m¨¢s f¨¢cil lo ten¨ªa. Con el 2-3 en el marcador, Canales se invent¨® un fabuloso disparo de falta a la escuadra que salv¨® un punto para los locales.

El Betis, horrible en defensa, todav¨ªa respir¨® cuando un lanzamiento de falta de Aspas fue al larguero en el minuto 89. En el rechace, nadie sabe a¨²n por qu¨¦ no marc¨® Junc¨¤. El punto realmente, no puede saber bien a ninguno de los dos. El Betis hizo un aceptable primer tiempo y marc¨® un golazo para irse al descanso con ventaja. Pero ya Pau lo hab¨ªa salvado en varias ocasiones. Luego, hizo el segundo tanto despu¨¦s de una virguer¨ªa de Loren desde el centro del campo que estuvo a punto de entrar en la meta de Sergio. Entonces apareci¨® la enorme figura de Maxi G¨®mez con sus goles. A medida que el uruguayo marcaba se empeque?ec¨ªa la figura de un Betis err¨¢tico en defensa y sin capacidad para tener el bal¨®n, su presunta especialidad. En una tempestad de golazos, ocasiones y juego de ¨¢rea a ¨¢rea, se acab¨® por establecer un empate que prolonga la mala racha del Betis, pues son ya cuatro los partidos en los que no conoce la victoria, con tres derrotas incluidas. Sorprendi¨® su falta de madurez para manejar un resultado de 2-0 ante un Celta demasiado estirado. A los gallegos les queda el consuelo de su enorme reacci¨®n. Los dos pudieron perder y ganar en un duelo espectacular. Una gozada para el espectador neutral. Quiz¨¢s una pesadilla para el b¨¦tico.

Hubo tantos partidos en el c¨¦sped verdiblanco que todos tienen raz¨®n para quejarse y valorar a su antojo el punto logrado. El choque fue un continuo tiroteo, una mezcla de estilos y una sucesi¨®n de golazos por parte de los dos equipos. El primero y el tercero del Betis fueron tremendos, como el segundo del Celta. Los de Seti¨¦n controlaron m¨¢s o menos bien la primera mitad, pero fueron superados en la segunda por un buen Celta. El t¨¦cnico del Betis no supo frenar la oleada gallega, conducida por dos grandes delanteros y un extremo, Hjulsager, a gran nivel.

El Betis tuvo la virtud de golpear en un momento decisivo en el primer acto. Okay hab¨ªa marcado y el gol fue bien anulado por fuera de juego. En un minuto de f¨²tbol pueden pasar muchas cosas. Pau sac¨® la falta como si fuera Carde?osa y el bal¨®n le lleg¨® a Francis. Con un control orientado, el lateral se plant¨® al borde del ¨¢rea del Celta, donde Lo Celso asisti¨® de tac¨®n a Loren, que marc¨® de un golpeo sutil. Un gol espectacular en cuatro toques. En una jugada de v¨¦rtigo, el Betis se adelant¨® en el marcador, y de paso, espant¨® algunos de los fantasmas que le atenazaban. El m¨¢s importante, su ausencia de gol. Un preludio de todo lo que lleg¨® en la segunda mitad. Marc¨® Junior y la alegr¨ªa b¨¦tica dur¨® muy poco. Por el buen hacer del Celta y porque Carvalho y Guardado no pod¨ªan m¨¢s, con toda su defensa superada por los delanteros rivales. Resulta que el Betis no marcaba y defend¨ªa bien. Tambi¨¦n que al Celta le costaba llegar a la puerta contraria. Todo se lo llev¨® por delante un vendaval de f¨²tbol, sin ataduras, con algunas obras de arte de por medio como la falta de Canales, que encontr¨® por fin el premio del gol despu¨¦s de fallar dos ocasiones muy claras. Por sobrar, solo sobr¨® la parsimonia de los recogepelotas del campo b¨¦tico, que tardaron m¨¢s de la cuenta en devolver el bal¨®n cuando el Betis ganaba. As¨ª, al menos, lo denunci¨® Mohamed.