La selecci¨®n sub 20 argentina quiere abanderar la renovaci¨®n que persigue la AFA

El 1 de febrero, d¨ªa en el que C¨¦sar Luis Menotti asumir¨¢ oficialmente su nuevo cargo de director de Selecciones Nacionales de la AFA, el combinado argentino de la categor¨ªa sub 20 deber¨ªa estar disputando la segunda fecha de la fase final del Sudamericano que comienza este jueves en Chile. Aunque con los antecedentes m¨¢s recientes en la mano cualquier pron¨®stico suena arriesgado.

Renovaci¨®n es la palabra que gobierna hoy la entidad presidida por Claudio Tapia. Nombrado el lunes pasado, el Flaco llega a la casa que dej¨® en 1982 con la muy dif¨ªcil tarea de volver a darle coherencia, continuidad y sentido com¨²n a un organigrama que salt¨® en mil pedazos tras la partida de Jos¨¦ Pekerman y sus colaboradores en 2007, y nunca m¨¢s logr¨® estabilizarse.

La selecci¨®n mayor y su ausencia de t¨ªtulos desde 1993 es la discutible carta que suele mostrarse como emblema del desbarranco sufrido por el f¨²tbol albiceleste en las ¨²ltimas d¨¦cadas. Sin embargo, es el Sub20 el escaparate que mejor puede mostrar el cat¨¢logo de desprop¨®sitos que los dirigidos por Fernando Bocha Batista intentar¨¢n comenzar a corregir.

Los juveniles mayores fueron el m¨¢ximo orgullo del f¨²tbol argentino, con cinco t¨ªtulos mundiales obtenidos entre 1995 y 2007, y varias camadas de jugadores que fueron el alimento principal para el representativo nacional.

Pero todo acab¨® de manera abrupta en 2007. Desde entonces, y salvo una aislada consagraci¨®n en el Sudamericano de Uruguay en 2015 (seguida de una eliminaci¨®n en primera fase en el Mundial de Nueva Zelanda meses despu¨¦s), la categor¨ªa produjo m¨¢s disgustos que alegr¨ªas. Ausencias en Mundiales (2009 y 2013), ca¨ªdas prematuras y alg¨²n que otro esc¨¢ndalo salpicaron una trayectoria con demasiados baches.

"El objetivo es que el cuerpo t¨¦cnico de la selecci¨®n mayor vuelva a mirar a los juveniles", dice Fernando Batista, que como varios de sus antecesores llegar¨¢ al torneo casi sin tiempo de trabajo previo.

El hermano de Sergio Batista, campe¨®n del mundo en M¨¦xico '86, se hizo cargo del equipo el 12 de diciembre, apenas 39 d¨ªas antes del debut (el domingo 20 ante Paraguay, en Curic¨®), pero tiene fe en la calidad individual de los jugadores elegidos. Varios de ellos est¨¢n consolidados en Primera, y un par tienen presente europeo: Maxi Romero est¨¢ en el PSV holand¨¦s y Facundo Colidio, en el Inter italiano. "El plantel es bueno porque siempre surgen jugadores en la Argentina; falta armar el equipo", subraya el entrenador sin quejarse demasiado.

Y como la renovaci¨®n manda, a Batista no le tembl¨® la mano para remodelar el plantel que en agosto pasado gan¨® el torneo de L'Alcudia (Espa?a) con Lionel Scaloni al frente. De los 22 que integraron aquel equipo solo hay 10 en Chile. Hubiesen sido 11, pero a ¨²ltima hora una tendinitis de rodilla dej¨® afuera a Agust¨ªn Almendra (Juli¨¢n L¨®pez, de Racing, reemplaza al volante de Boca). Con anterioridad, y por el mismo motivo, tambi¨¦n fue desafectado Ezequiel Barco, el pibe surgido de Independiente que juega en el Atlanta United de la MLS norteamericana.

Aun as¨ª, la n¨®mina cuenta con varios nombres prometedores, como Leonardo Balerdi, el defensor que Boca acaba de vender al Borussia Dortmund; Juli¨¢n ?lvarez, delantero de River que particip¨® en la final de la Libertadores; o Thiago Almada y Pedro De la Vega, promesas de fulgurante aparici¨®n en V¨¦lez y Lan¨²s, respectivamente.

El f¨²tbol argentino siempre otorga espacios a la ilusi¨®n. El Sub20 que arranca en Chile y clasifica cuatro equipos para el Mundial de Polonia que se juega en mayo es el inmediato, y quiz¨¢s el ¨²ltimo de una etapa gris oscuro. Despu¨¦s, el Flaco Menotti tomar¨¢ la palabra.