Osvaldo Ardiles: ¡°Hay que creer. La confianza lo es absolutamente todo¡±
La leyenda argentina del Tottenham mantiene que la fe de Pochettino ha sido decisiva para disparar la evoluci¨®n del equipo y de todo el club
Idolatrado en White Hart Lane, el estadio del Tottenham que lo acogi¨® en 1978 como uno de los pioneros extranjeros en la liga inglesa, Osvaldo Ardiles (C¨®rdoba, Argentina; 1952) ejerce hoy como embajador del club. La diminuta figura del argentino escond¨ªa un centrocampista sublime que iluminaba el juego en cualquier lugar del campo con una t¨¦cnica creativa y maravillosa que sorprendi¨® a toda Inglaterra. Tanto que alguien dijo de ¨¦l que en lugar de un n¨²mero en la camiseta deber¨ªa haber llevado un signo de interrogaci¨®n. Muy cercano al t¨¦cnico Mauricio Pochettino, Ardiles exalta en di¨¢logo telef¨®nico con EL PA?S la enorme transformaci¨®n que han experimentado los Spurs de la mano de su compatriota.
Pregunta. El Tottenham parece estar dando un descomunal salto estructural y deportivo cuyo punto ¨¢lgido es disputar una final de la Champions. ?Qu¨¦ ha ocurrido ah¨ª dentro?
Respuesta. Un logro important¨ªsimo. Desde hace varios a?os el Tottenham empez¨® a transformarse. Construy¨® una ciudad deportiva a la altura de las de los mejores clubes y un estadio absolutamente excepcional, el m¨¢s lindo del mundo. Y adem¨¢s tom¨® la inmensa decisi¨®n de contratar a Mauricio Pochettino para darle casi las riendas del club. Es un proyecto ambicioso y ahora en muchos sentidos somos el club del futuro. Hay que valorar que el equipo no pudo reforzarse en las dos ¨²ltimas ventanas de transferencias, as¨ª que llegar a esta final es algo extraordinario. Y no es un hecho l¨ªrico. El club ha hecho una inversi¨®n muy grande y creci¨® mucho a todos los niveles.
P. Parece que Pochettino lidera y gestiona todo desde la emoci¨®n. Su antiguo compa?ero Ricardo Villa dice que ha humanizado un f¨²tbol ultraprofesionalizado y con grandes intereses comerciales alrededor.
R. Es un compendio de todo. Llegas a un entrenamiento y te das cuenta de que la atm¨®sfera es muy buena. Desde Mauricio a los jugadores, pasando por el cuerpo t¨¦cnico, los utileros, el personal de limpieza, los empleados del club. Se ha generado un ambiente especial, casi familiar. Y Mauricio predica con el ejemplo, siempre pendiente de que las relaciones fluyan y todo mejore. Eso se traslada a la plantilla. ?l no usa el l¨¢tigo. Hay mucho respeto. Esta semana nos visit¨® Kempes para hacer un reportaje televisivo. Tiene 64 a?os y el pelo corto, casi nadie le reconoc¨ªa por los pasillos. Le present¨¦ a Pochettino, ya que no se conoc¨ªan en persona, y se fundieron en un abrazo enorme. No s¨¦ cu¨¢l de los dos estaba m¨¢s sorprendido y emocionado. Mauricio no olvida sus ra¨ªces. Y tambi¨¦n por eso se respeta tanto su figura en el vestuario.
P. ?Cu¨¢l es el motor an¨ªmico del Tottenham? ?Quiz¨¢s una alta dosis de pasi¨®n?
R. Mauricio utiliza mucho el t¨¦rmino ingl¨¦s ¡°Believe¡±. Creer. Los logros del equipo tratan fundamentalmente de seguir creyendo en s¨ª mismo incluso cuando las cosas van mal. Creer hasta el ¨²ltimo aliento, como en la fase de grupos, o en las eliminatorias ante el Manchester City y el Ajax. El entrenador, con su capacidad de persuasi¨®n, les meti¨® en la cabeza a los futbolistas que todo era posible.
P. Liverpool y Tottenham se conocen hasta demasiado. ?Qu¨¦ final espera entre dos equipos con tanto exceso de informaci¨®n sobre su rival?
R. Se puede hablar todo el d¨ªa de t¨¢ctica y de jugadores, pero creo que va a ocurrir lo mismo que en las dos semifinales. Al final se decidieron casi por una cuesti¨®n emocional. ?C¨®mo si no explicar que el Bar?a, con Messi y tres goles de ventaja y siendo un equipo ¡°recontraexperimentado¡± haya capitulado de la forma en la que lo hizo en Anfield? Lo nuestro quiz¨¢s se explique algo mejor porque el Ajax es un equipo muy joven e inexperto. Pero pienso que Tottenham y Liverpool van a estar muy cerca. Hay gente que da favorito a los de Klopp y eso me encanta, porque no lo comparto de ninguna manera. Hemos jugado hace dos meses en su campo. En la segunda parte fuimos claramente superiores. Perdimos dos a uno en el ¨²ltimo minuto con un gol que si hubiera existido el VAR habr¨ªa sido anulado. Y adem¨¢s el s¨¢bado vuelve Harry Kane, de titular o quiz¨¢s como elemento de impacto en la segunda parte. No espero m¨¢s de un gol de diferencia, pero estoy seguro de que ser¨¢n decisivas las emociones y el coraz¨®n.
P. La pujanza de la Premier contin¨²a creciendo. Otros dos equipos ingleses han disputado la final de la Europa League y un campe¨®n de liga extraordinario como el Manchester City no ha alcanzado las instancias finales de la Champions.
R. En primer lugar quiero decir que es una verg¨¹enza que la UEFA se lleve una final a Azerbayan, juegue quien juegue. Un aut¨¦ntico desprop¨®sito. El poder¨ªo de la Premier reside en su fortaleza econ¨®mica, derivada de un reparto bastante equitativo del dinero por los derechos de televisi¨®n, a diferencia de Espa?a. Eso fomenta una liga extremadamente competitiva. Adem¨¢s, los equipos m¨¢s potentes tienen t¨¦cnicos extranjeros que han aportado mucho. Cuando Ricardo Villa y yo llegamos a Inglaterra en el 78 fuimos los primeros jugadores extranjeros. El f¨²tbol era extraordinariamente distinto y los centrocampistas s¨®lo ve¨ªamos volar el bal¨®n sobre nuestras cabezas. Parec¨ªa otro deporte. Y como a algunos nos fue muy bien, de repente¡ ?Upa! Todos comenzaron a fichar extranjeros. Luego gente como Canton¨¢, Henry, Klinsmann y tantos otros le dieron una jerarqu¨ªa grande a esta liga. Ahora los t¨¦cnicos for¨¢neos completaron aquella revoluci¨®n.
P. En 1984 usted disput¨® la final de la Copa de la UEFA frente al Anderlecht. Empate a uno en Bruselas y el mismo resultado en White Hart Lane en la vuelta. Los Spurs ganaron por penaltis a un gran equipo contra pron¨®stico. Fue el ¨²ltimo t¨ªtulo europeo del Tottenham.
R. Jugu¨¦ apenas 15 minutos en el partido de vuelta y por pura necesidad, ya que yo estaba lesionado y ten¨ªamos muchas bajas. Est¨¢bamos al borde de la derrota y Peter Shreeves, el segundo entrenador, le dijo a Kate Burkinshaw, el principal: ¡°?Saca a Ossie?¡±. ¡°?A Ossie? ?Pero si casi no puede ni moverse!¡±, le contest¨®. ¡°?Saca a Ossie ahora?¡±, insisti¨®. Sal¨ª al campo, estaba muy tocado, pero me hicieron marca hombre a hombre porque me ten¨ªan mucho respeto. Y se desorganizaron. Otra vez el coraz¨®n, lo emocional¡ di el pase del gol del empate y despu¨¦s vencimos por penaltis. Pero ganamos aquella UEFA por la pasi¨®n colectiva del grupo.
P. Usted suele decir que prefiere ¡°un jugador mediocre lleno de confianza a un Maradona sin confianza¡±.
R. ?Claro! Mire a este equipo. La confianza lo es absolutamente todo. Es lo que predica Mauricio. Hay que creer. Yo pensaba que los cimientos del club estaban muy bien asentados y que s¨®lo era cuesti¨®n de tiempo que jug¨¢ramos finales y cosechar triunfos. ?Que llegue tan pronto es por el efecto m¨¢gico de Mauricio! Eso es lo que ha conseguido. Que este s¨¢bado el Tottenham dispute el partido m¨¢s importante de su historia.
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