Rafa Mart¨ªnez, un tipo normal que deja una huella inmortal en Valencia
El jugador con m¨¢s t¨ªtulos en la historia del equipo de baloncesto deja la formaci¨®n tras 11 a?os en los que se ha ganado la estima por su sencillez y sus triples
Rafa Mart¨ªnez es un tipo normal. El paso del tiempo no le ha cambiado. No ha perdido ni una pizca de la humildad con la que aterriz¨® en Valencia en el verano de 2008. Salvo alguna cana incipiente que se abre paso entre su cabello, apenas se vislumbran cambios en el rostro de aquel risue?o chico de Santpedor (tierra sagrada para el guardiolismo) que lleg¨® a Valencia procedente del Manresa con el sue?o de hacer grandes cosas. Y ahora, 11 a?os despu¨¦s y con la misi¨®n cumplida con creces, se marcha igual: risue?o, cercano y bonach¨®n. Sin negarse a una sola fotograf¨ªa o aut¨®grafo, paseando, junto con Olatz y Paula -su mujer y su hija-, por el centro de la ciudad y compr¨¢ndose un bocadillo de calamares en el hist¨®rico Casa Mundo. Una estampa inimaginable en cualquier futbolista hoy, aun con un curr¨ªculum esquel¨¦tico comparado con el de Rafa.
No le hace falta colocarse sobre sus hombros los galones de capit¨¢n o las medallas que ha ido obteniendo en once a?os de exitosa trayectoria en Valencia. Es el jugador con m¨¢s t¨ªtulos en la historia del Valencia Basket: tres Eurocups, una Liga ACB y una Supercopa de Espa?a. Cuatro de esos t¨ªtulos los ha levantado ¨¦l como capit¨¢n -la Eurocup de 2010 la elev¨® al cielo de Vitoria el valenciano V¨ªctor Claver-. Tambi¨¦n es el m¨¢ximo anotador en la historia del club taronja. Y el segundo con m¨¢s partidos (623), muy cerca del otro gran capit¨¢n: V¨ªctor Luengo. Pero nada de esto le ha cambiado. ?l sigue siendo Rafa, el tipo normal.
Por este motivo, su sencillez, le tuvieron que convencer durante varios d¨ªas desde su entorno y la c¨²pula del Valencia Basket para protagonizar un acto emotivo de despedida. Una marcha con honores. Colocarse en el centro del Pabell¨®n Fuente de San Luis y recibir una merecida dosis de afecto sobre el parqu¨¦ que tantas veces ha pisado, intimidando con su defensa a los rivales y destroz¨¢ndoles con sus triples letales. Esa misma pista sobre la que Rafa ya derram¨® sus l¨¢grimas el pasado lunes en el tercer y ¨²ltimo partido de las semifinales de la Liga Endesa ante el Real Madrid. Su entrenador, Jaume Ponsarnau, le meti¨® en pista faltando un minuto para que el capit¨¢n se despidiera en el campo de batalla, vestido de corto y recibiendo una ovaci¨®n de m¨¢s de 7.500 personas que aplaudieron a rabiar y corearon el cl¨¢sico ¡°Rafa, Rafa¡± que tanto ha retumbado en la Fonteta en los ¨²ltimos once a?os. Ese d¨ªa, el capit¨¢n llor¨®. Llor¨® mucho. Y lo pas¨® mal, aunque suene parad¨®jico: tanto cari?o recibido le hizo sufrir. De ah¨ª que le tuvieran que convencer para otro acto emotivo: no quer¨ªa volver a llorar.
Esta vez, cuatro d¨ªas despu¨¦s de su ¨²ltimo partido, la Fonteta volvi¨® a abrir sus puertas para un acto m¨¢s ¨ªntimo. Aficionados, amigos, compa?eros de equipo, entrenador y representantes de todos los estamentos del club. Y, c¨®mo no, Olatz, su compa?era de vida y a la que, tras romper a llorar y guardar unos segundos de emocionado silencio, le agradeci¨® en un emotivo discurso ¡°formar parte del otro equipo, el de las cosas importantes¡±. ¡°Vinimos dos y nos volvemos con una valenciana con nosotros, Paula¡±. Efectivamente, Rafa se lo tem¨ªa y llevaba raz¨®n: volvi¨® a derramar sus l¨¢grimas sobre el parqu¨¦ de la Fonteta, adornado para la ocasi¨®n con los cinco t¨ªtulos ganados en once a?os.
Pero la despedida de Rafa Mart¨ªnez no es definitiva, ni en el Valencia Basket ni en el baloncesto profesional. A sus 37 a?os, se ve capaz de dar guerra en otro de los clubes ACB que le pretenden y se marcha a un nuevo destino que todav¨ªa no ha decidido para apurar dar sus ¨²ltimos coletazos sobre las pistas. Y cuando ya decida colgar las zapatillas, se consumar¨¢n los homenajes en su club del alma: Valencia Basket retirar¨¢ el dorsal n¨²mero 17, colgar¨¢ su camiseta del techo de la Fonteta -acompa?ando a las ya retiradas de V¨ªctor Luengo y Nacho Rodilla- y una de las pistas de La Alqueria del Basket -las instalaciones donde el club trabaja su cantera- recibir¨¢ su nombre. Todos los homenajes, los de ahora y los que vendr¨¢n, m¨¢s que merecidos para el gran capit¨¢n: Rafael Mart¨ªnez Aguilera. Un tipo normal, una leyenda del Valencia Basket.
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