El Mallorca se jugar¨¢ una plaza en Primera contra el Deportivo

Sufri¨® m¨¢s de lo que debi¨®, pero el Mallorca se gan¨® en Albacete el derecho a jugar la final del play-off de ascenso a Primera Divisi¨®n, m¨¦rito indudable para un equipo que hace un a?o retorn¨® a la categor¨ªa de plata tras una campa?a en Segunda B. Cay¨® el cuadro de la isla en su visita al Carlos Belmonte (1-0), pero hizo valer los dos goles que hab¨ªa logrado en su feudo. All¨ª se sellar¨¢ en la v¨ªspera de San Juan el tercer visado para jugar entre los grandes. El Deportivo opta tambi¨¦n a ¨¦l, en un cruce que se iniciar¨¢ el pr¨®ximo jueves en Riazor.

Todo se le complic¨® al Mallorca m¨¢s de lo debido en Albacete. Primero encaj¨® un gol en el albor del partido, luego desperdici¨® su superioridad, dej¨® pasar numerosas opciones para marcar el gol que hubiese laminado a un oponente al que antes de la hora de juego ya se le encendi¨® el testigo del dep¨®sito de gasolina. Acalambrado, dolorido, cansado, el Albacete lleg¨® con vida al final y tuvo un par de claras oportunidades para llevar el partido a la pr¨®rroga y jugarla en ventaja, porque el empate le favorec¨ªa por su mejor clasificaci¨®n liguera. Con todo, aguant¨® el Mallorca y alz¨® los brazos ganador.

Es un equipo tan peculiar como meritorio el Mallorca. Siempre va a hacia delante, sus laterales se despliegan, sus centrocampistas conducen, sus extremos encaran. En ocasiones da la sensaci¨®n de que juega sin mirar al marcador. Le pas¨® en la antepen¨²ltima jornada del campeonato en Riazor, cuando concedi¨® una contra que acab¨® por derrotarle con el reloj a cero y un resultado que le favorec¨ªa. En Albacete se sinti¨® superior durante bastantes minutos y profundiz¨® en ese desparrame. Llam¨® al gol, este no acudi¨® y por ah¨ª le llegaron los problemas.

El Albacete bastante hizo con llegar en pie al final. Jug¨® la eliminatoria con las piernas duras, sin acabar de explotar los recursos que le hicieron fuerte en un campeonato tan meritorio como el que cumpli¨®. En esta ocasi¨®n gener¨® alguna duda en el rival desde la pizarra con la aportaci¨®n de Bela y Eugeni, que part¨ªan desde el exterior para buscar superioridades por dentro. Bela, que pareci¨® un AVE durante meses, acab¨® el partido como un mercanc¨ªas, pero antes tuvo tiempo a embocar un libre directo que reaviv¨® en su parroquia la ilusi¨®n de la remontada. Con hora y cuarto por jugar quiso creer el Albacete, pero las piernas no le dejaron. Tampoco el Mallorca, que le hizo correr m¨¢s de lo que deseaba. Debi¨® empatar el equipo rojillo, que tuvo opciones de todos los colores, una peinada de Pedraza, un testarazo de Valjent, dos combas de Dani Rodr¨ªguez y Sastre, un cabezazo desde el punto de penalti de Salva Sevilla o uno ¨²ltimo de Pedraza que sac¨® Tomeu Nadal sobre la l¨ªnea.

Tanto perd¨®n pudo convertirse en pecado. Al Albacete le costaba llegar a zonas de remate, incluso por acumulaci¨®n. Pero se entreg¨® a un final a cara o cruz. Tir¨® la moneda y le pudo salir de cara si Zozulia atina un remate en boca de gol o Reina no saca con sus dedos un ajustado intento de Eugeni. Contuvo la respiraci¨®n hasta el final el Mallorca, hasta que Rei Manaj no fue capaz de levantar sobre la barrera un libre directo en la ¨²ltima acci¨®n del partido. Y festej¨®. Como para no hacerlo cuando se viene de Segunda B y el ascenso a Primera est¨¢ a dos partidos. El Mallorca se ha ganado el derecho a so?ar.