El aciago verano de Federer
El campe¨®n de 20 grandes, apeado por Dimitrov en Flushing Meadows, cierra el a?o sin ganar ning¨²n ¡®major¡¯ aunque no pierde la fe: ¡°Mi nivel de decepci¨®n es bajo, ha sido una buena temporada¡±
Se atusa el pelo Roger Federer mientras enfila el t¨²nel de vestuarios de la Arthur Ashe contrariado y dolido, porque se le acaba de escapar otro tren. Rostro p¨¦treo el del suizo, que digiere por dentro un ¨²ltimo sinsabor: cuando todo parec¨ªa haber cambiado despu¨¦s de haber corregido el mal rumbo en Nueva York con dos partidos fabulosos, Grigor Dimitrov, la fotocopia est¨¦tica que todos quisieron que fuera pero nunca ser¨¢, le derrota por primera vez en su carrera despu¨¦s de siete intentos previos. 3-6, 6-4, 3-6, 6-4 y 6-2, en tres horas y 12 minutos. La corriente salvaje que circula por Flushing Meadows se lleva por delante a la leyenda, cuya ca¨ªda tiene una doble consecuencia: cerrar¨¢ el a?o en blanco en los majors y, en consecuencia, a su r¨¦cord de 20 grandes le rodean ahora m¨¢s interrogantes.
¡°Mi nivel de decepci¨®n es bajo. Simplemente estoy decepcionado porque despu¨¦s de dos partidos dif¨ªciles [Nagal y Dzumhur] estaba jugando realmente bien [Evans y Goffin]. Es solo una oportunidad perdida, pero en un par de d¨ªas lo habr¨¦ superado¡±, dice el n¨²mero tres, de 38 a?os y profesional desde 1998. ¡°Ten¨ªa buena pinta, pero las derrotas son parte del juego. Tengo muchas ganas de estar con la familia¡ La vida est¨¢ bien. ?Si voy a tener m¨¢s oportunidades? No tengo la bola de cristal, no lo sabemos. Eso espero. En cualquier caso ha sido una temporada positiva¡±, rebaja antes de despedirse de Nueva York, territorio que se le niega desde 2008 y en el que el a?o pasado se llev¨® otro buen trompazo al caer en los octavos frente a Millman, entonces 55 del mundo.
Reflexiona serio Federer, al que algunos dan ya por amortizado y le abren la puerta de la jubilaci¨®n. Sin embargo, la realidad dice que contin¨²a siendo competitivo. Este curso alcanz¨® las semifinales de Roland Garros y se le escap¨® incre¨ªblemente el trofeo de Wimbledon cuando ya lo hab¨ªa cogido con una mano; antes celebr¨® ¨¦xitos nada menores como su t¨ªtulo 100, en Dub¨¢i, el d¨¦cimo en Halle y el Masters 1000 de Miami, dando prueba de que su raqueta todav¨ªa tiene cosas que decir. La inc¨®gnita, no obstante, reside en saber si resistir¨¢ la comparativa hist¨®rica con Rafael Nadal (33) y Novak Djokovic (32), ambos m¨¢s j¨®venes y que este a?o han a?adido una y dos muescas m¨¢s, respectivamente, a su colecci¨®n de Grand Slams.
Federer, enterrado deportivamente innumerables veces, sigue vigente. Ahora bien, el presente le propone el en¨¦simo desaf¨ªo, escapar de una din¨¢mica derrotista en los grandes escenarios. Esta es la sexta vez que sellar¨¢ un a?o en blanco tras las de 2011, 2013, 2014, 2015 y 2016, luego est¨¢ obligado otra vez a salir del secarral. La pregunta del mill¨®n es si podr¨¢ y cu¨¢nto tiempo tardar¨¢. La ¨²ltima vez, la sequ¨ªa se prolong¨® cuatro a?os, desde el ¨¦xito de Wimbledon en 2012 hasta el de Australia en 2017. Ven¨ªa precisamente de Londres deprimido, d¨¢ndole un mill¨®n de vueltas a esas dos bolas de partido que desperdici¨® contra Djokovic. Y emocionalmente ha terminado pag¨¢ndolo, aunque ¨¦l lo niegue.
¡°Es algo del pasado. Recuerdo haber jugado unas buenas semifinales all¨ª [contra Nadal], no estuvo mal¡±, despeja sabiendo ya que esta ser¨¢ la sexta ocasi¨®n que concluye un a?o sin ganar ning¨²n major, tras las de 2011, 2013, 2014, 2015 y 2016; ¡°s¨¦ que la gente lo piensa, pero definitivamente esa no es la raz¨®n por la que he perdido aqu¨ª esta noche. Estaba preparado, lo hice lo mejor que pude. No fue suficiente. Todo responde puramente a esta noche¡±.
De Londres a Cincinnati, y de ah¨ª a Nueva York
Vest¨ªa Federer de negro, por completo, elegantemente acorde a la sesi¨®n nocturna. Se situ¨® dos veces por delante de Dimitrov, pero se qued¨® en blanco en la recta final. Por la tarde, cuenta, ya hab¨ªa notado algo extra?o en la zona posterior del cuello, unas molestias cervicales en las que no quiere entrar y que desliga del tropiezo frente al b¨²lgaro, que sonr¨ªe a m¨¢s no poder porque despu¨¦s de un largo periodo perdido en la nada disputar¨¢ su tercera semifinal de un Grand Slam; las anteriores, en Wimbledon 2014 y Australia 2017.
¡°Los ¨²ltimos siete meses han sido muy duros para m¨ª, pero segu¨ª creyendo en el trabajo, en la rehabilitaci¨®n [una lesi¨®n de hombro le oblig¨® a parar], en los entrenamientos... Han sido muchos ajustes en un corto periodo¡±, valora al que bautizaron como Baby Federer.
Se convirti¨® Dimitrov (28 a?os) en el semifinalista de Nueva York con peor ranking desde que Jimmy Connors desembarcase en la pen¨²ltima ronda en 1991, como el 174 del mundo; y en t¨¦rminos globales, hay que rebobinar a 2008 para dar con el alem¨¢n Rainer Schuettler, el 94 en Wimbledon. El b¨²lgaro despach¨® al suizo en una velada que cierra un verano aciago para ¨¦l. Al mazazo de Londres le sucedi¨® el patinazo contra Andrey Rublev (70) en Cincinnati, y ahora la ca¨ªda de Nueva York le abre a Nadal la puerta para situarse a un solo major, siendo ya el mallorqu¨ªn el ¨²nico integrante del Big Three que sobrevive en el cuadro neoyorquino.
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