China tambi¨¦n apaga el f¨²tbol

China ha vuelto a enviar un mensaje al mundo deportivo internacional: prohibido criticar sus asuntos internos. La cadena de televisi¨®n estatal CCTV ha censurado este domingo la emisi¨®n en directo que ten¨ªa prevista del partido de la jornada de la Premier League inglesa, el Arsenal-Manchester City, que fue sustituido por el Tottenham-Wolverhampton en diferido. El apag¨®n es una aparente represalia despu¨¦s de que el n¨²mero 10 de los Gunners, el internacional alem¨¢n de origen turco Mesut ?zil, se pronunciara con dureza en las redes sociales contra la represi¨®n a la minor¨ªa uigur, de religi¨®n musulmana, en la regi¨®n china de Xinjiang.

La reacci¨®n de China es similar a la que tuvo en octubre pasado, cuando el directivo de los Houston Rockets Daryl Morey expres¨® su apoyo en un tuit a los manifestantes de Hong Kong. Aquel mensaje desencaden¨® una tormenta entre el p¨²blico nacionalista, las instituciones y los patrocinadores chinos, que amenazaron con retirar su publicidad. Pese a que el equipo se desvincul¨® de las opiniones de su dirigente, China suspendi¨® la emisi¨®n de partidos de exhibici¨®n de la NBA en su territorio cuando esta liga profesional sali¨® en defensa de la libertad de expresi¨®n.

Ahora la situaci¨®n se repite, con otro foco tan sensible como el de la situaci¨®n en Hong Kong para las autoridades chinas: el de su trato a las minor¨ªas en Xinjiang, donde seg¨²n la ONU m¨¢s de un mill¨®n de uigures y de miembros de otras etnias de religi¨®n musulmana han sido trasladados a campos de reeducaci¨®n, dentro de lo que China describe como una campa?a contra el terrorismo.

?zil, de 31 a?os y musulm¨¢n devoto al que no es raro ver rezando en el campo de juego, public¨® el viernes un largo mensaje en turco en Twitter e Instagram. En ¨¦l denunciaba que en Xinjiang ¡°se queman los Coranes; se destruyen las mezquitas; las escuelas isl¨¢micas, las madrasas, se proh¨ªben; se mata a los acad¨¦micos religiosos uno tras otro, (los uigures) son enviados a los campos por la fuerza¡±. El exmadridista, uno de los pocos personajes p¨²blicos que han defendido abiertamente la causa uigur, se muestra tambi¨¦n muy cr¨ªtico con el silencio de los musulmanes sobre la situaci¨®n de sus hermanos de fe: ¡°se quedan callados, no se oye su voz¡±.

El mensaje aparece sobre un fondo azul celeste, el color de la bandera de ¡°Turkest¨¢n Oriental¡±, el nombre con el que se refieren a Xinjiang los grupos independentistas y los uigures en el exilio.

El Arsenal se ha desmarcado de las opiniones de su jugador, que subraya que son estrictamente personales. En un comunicado en su cuenta de Weibo -el Twitter chino, donde cuenta con cinco millones de seguidores-, el club del norte londinense insiste en que siempre ha ¡°seguido el principio de no meterse en pol¨ªtica¡±.

Los Gunners son uno de los equipos m¨¢s populares de la Premier League inglesa en China. Adem¨¢s de frecuentes visitantes para partidos de pretemporada, cuentan con un restaurante y un bar deportivo en suelo de este pa¨ªs y a comienzos de este a?o hab¨ªan anunciado planes para expandir aqu¨ª su marca.

Pese al comunicado, los aficionados chinos reaccionaban con ira. Alguno mostraba la foto de su camiseta de ?zil hecha trizas. Otros ped¨ªan que el ex internacional alem¨¢n fuera expulsado del club. La Federaci¨®n china de F¨²tbol declaraba al peri¨®dico de propiedad gubernamental The Paper que se sent¨ªa "decepcionada y furiosa" por las declaraciones del jugador, que "han herido los sentimientos del pueblo chino". Y la censura china se mov¨ªa con rapidez: si horas despu¨¦s del comentario del mediocampista un hashtag traducible como ¡°?zil dice algo inapropiado¡± se hab¨ªa convertido en tendencia, este fin de semana la b¨²squeda de ese t¨¦rmino no arrojaba ning¨²n resultado.

?zil no es un jugador ajeno a la pol¨¦mica por razones pol¨ªticas. Cercano en los ¨²ltimos tiempos a Recep Tayyip Erdogan -el presidente turco fue su padrino de boda en junio pasado-, una serie de fotograf¨ªas con el dirigente antes del Mundial de Rusia en 2018 le motiv¨® un aluvi¨®n de cr¨ªticas en Alemania, su pa¨ªs natal. El futbolista anunci¨® entonces que dejaba la selecci¨®n germana por el ¡°racismo y falta de respeto¡± que hab¨ªa sentido.