Juan Carlos Navarro: ¡°La Bomba empez¨® con mi hermano Ricardo¡±
La estrella del Bar?a y de la selecci¨®n se invent¨® el tiro que le caracteriz¨® cuando era un chaval en el patio de su casa
La fascinaci¨®n infantil hacia sus hermanos Ricardo y Justo forj¨® su pasi¨®n por el baloncesto. Tres d¨¦cadas despu¨¦s Juan Carlos Navarro destila su magisterio tutelando los primeros pinitos de sus j¨®venes hijas Luc¨ªa y Elsa en este deporte. Entre medias, una carrera que le situ¨® de 1997 a 2018 como icono del Bar?a y del baloncesto espa?ol y europeo. Todo empez¨® con un aro desechado por el colegio donde estudiaban en Sant Feliu de Llobregat, a 14 kil¨®metros de Barcelona. Su padre Ricardo lo adquiri¨® por 1.500 pesetas y lo instal¨® en el patio de casa.
¡°Mis hermanos fueron b¨¢sicos para mi carrera. Me inculcaron su amor y su pasi¨®n por este deporte. Yo era el menor y los ve¨ªa como ¨ªdolos porque jugaban bien al deporte que a m¨ª me gust¨®. Yo era muy peque?¨ªn, pero intentaba superarles. Fueron ellos los que me vieron aptitudes ya en aquel patio y me apuntaron al Santfeliuenc¡±, relata Navarro. En agosto de 2018 pas¨® a ocupar el cargo de secretario t¨¦cnico del baloncesto formativo de Bar?a despu¨¦s de haber completado un palmar¨¦s deslumbrante: dos Euroligas, ocho Ligas y siete Copas del Rey con el Bar?a, y un Mundial, tres Eurobasket y dos medallas de plata en los Juegos Ol¨ªmpicos con la selecci¨®n, en la que, con 253 apariciones, estableci¨® el r¨¦cord de internacionalidades superando a Epi, su legendario predecesor en el Bar?a.
¡°Ricardo era mi ¨ªdolo. Jugaba en los infantiles y en los juveniles del Bar?a y era al que segu¨ªamos todos los d¨ªas. Yo aprovechaba sus entrenos y sus partidos y, mientras ¨¦l se duchaba, antes de sus partidos o en los descansos, practicaba¡±, cuenta Juan Carlos, el menor de los tres hermanos Navarro. Ricardo tiene siete a?os m¨¢s que ¨¦l y Justo es el mediano. ¡°A Juan Carlos ten¨ªamos que echarlo de la pista porque empez¨¢bamos la rueda de calentamiento del equipo y ¨¦l, que era un tirillas, segu¨ªa all¨ª tirando y tirando¡±, explica Miguel L¨®pez Abril, entonces uno de los responsables de la cantera azulgrana.
Ricardo jug¨® durante cuatro temporadas en la cantera del Bar?a antes de marcharse al Granollers, cumplir el servicio militar y abandonar muy pronto el baloncesto. ¡°Era un cuatro, un p¨ªvot peque?o, pero jugaba muy bien. Ten¨ªa buen tiro y buenos movimientos. Yo trataba de imitarle y de aprender. El simple hecho de que ¨¦l y Justo fueran mayores que yo, hac¨ªa que tuviera que superarme. Por ejemplo, cog¨ª el tiro en aquella canasta del patio de casa porque mis hermanos eran m¨¢s grandes, el espacio era muy reducido y ten¨ªa que bombear la pelota para librarme de ellos. Nos pic¨¢bamos bastante. Hemos sido muy competitivos y alguna pelea ha habido¡±. La estrella del Bar?a y de la selecci¨®n durante 20 a?os patent¨® aquel tiro conocido como La Bomba, apodo que con el que le bautiz¨® Agust¨ªn Cuesta, otro de sus entrenadores en la cantera.
Navarro se pasaba el d¨ªa jugando a baloncesto. ¡°En el patio jug¨¢bamos hasta que anochec¨ªa, hasta que no se ve¨ªa nada. Y las ma?anas de los domingos me encantaba ir con Justo a jugar unas pachangas. Por entonces, yo era muy peque?o y no siempre me dejaban jugar. Me cabreaba, pero aquellos partidos eran muy duros¡±. Despu¨¦s de jugar en el Santfeliuenc, fich¨® por el Barcelona. Ten¨ªa 12 a?os. Poco despu¨¦s, y procedente del Cornell¨¤, se le uni¨® un chaval espigado con el que hizo muy buenas migas. Se llamaba Pau Gasol. Se forj¨® un d¨²o fundamental en la historia del baloncesto espa?ol.
¡°He tenido la suerte de jugar con much¨ªsimos jugadores y muy buenos. He hecho grandes amigos y nos hemos tenido un gran respeto. Eso es lo m¨¢s importante que me he llevado de este deporte, aparte de los t¨ªtulos que he ganado. He jugado contra LeBron James y el que me impresion¨® much¨ªsimo fue Shaquille O¡¯Neal cuando lo vi por primera vez porque es muy grande, muy grande. Con el primero que empec¨¦ a levantarme por las noches, independientemente de si ten¨ªa partido o no al d¨ªa siguiente, fue Michael Jordan. Ahora he visto la serie The Last Dance y me parece algo sobrehumano. Fue mi ¨ªdolo. A veces intentaba imitar sus jugadas, pero sin su cuerpo y sus condiciones f¨ªsicas, es imposible. Tuve la oportunidad de conocerle en Barcelona hace unos a?os. Me pareci¨® una persona genial¡±.
Juan Carlos se remonta a las lecciones que recib¨ªa de principiante, a sus inicios. ¡°Mis hermanos me aconsejaban simplemente que me divirtiera, que cada d¨ªa aprendiera un poco. Es lo mismo que les digo yo ahora a mis hijas. Al cabo del tiempo tienes que ver una evoluci¨®n y tienes que tener pasi¨®n y ganas de mejorar, como en cualquier profesi¨®n¡±. Siempre lo tuvo muy claro: ¡°Creo que hay jugadores con m¨¢s condiciones individuales. Pero si comparamos mi f¨ªsico con lo que he conseguido... Yo ten¨ªa claro lo que pod¨ªa hacer: improvisar, salirme un poco del sistema con mi desparpajo... Nunca he tenido miedo a nada. Aunque fallara muchos tiros, sab¨ªa que la siguiente la iba a tirar igual. Le pasa a mucha gente, a mis hijas: como han fallado dos tiros, piensan que tirar otra vez es excesivo. Nunca me ha pasado¡±.
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