Asalto al b¨²nker psicol¨®gico de Nadal

Melbourne Park est¨¢ a punto de bajar la persiana cuando Rafael Nadal irrumpe en la abarrotada sala de conferencias. Est¨¢ pensativo y an¨ªmicamente tocado, porque antes, sobre el cemento de la pista central, Dominic Thiem le ha descabalgado del torneo y ha profanado el espacio sagrado, el del reino mental del balear: 7-6(3), 7-6(4), 4-6 y 7-6(6), en 4h 10m. Por primera vez en su carrera, el austriaco le ha ganado un partido en un grande y, tambi¨¦n por primera vez en toda su trayectoria profesional, el n¨²mero uno (33 a?os) se ha inclinado cediendo tres tie breaks.

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¡°El otro d¨ªa no s¨¦ por qu¨¦ gan¨¦ dos desempates contra Kyrgios y hoy [por ayer] tampoco tengo una explicaci¨®n clara para lo contrario. Probablemente porque ¨¦l jug¨® mejor que yo. Normalmente, esa es la raz¨®n por la cual se pierden o ganan los desempates¡±, responde el mallorqu¨ªn, que en sus 19 a?os en la ¨¦lite del tenis ha ido edificando un imperio, el de lo psicol¨®gico, defendido sin parang¨®n. No hay en este deporte, seguramente, un desaf¨ªo superior al de imponerse a Nadal en esa otra dimensi¨®n en la que la mayor¨ªa se pierde y ¨¦l se multiplica.

En total, el balear ha disputado 400 muertes s¨²bitas, de las que sali¨® airoso en 243 ocasiones (60,7%). Nadie controla como ¨¦l la incertidumbre ni el terreno en el que impera, sencillamente, la ley del m¨¢s fuerte de mollera, de ah¨ª que Thiem haya superado una frontera de un valor incalculable. El austriaco, de 26 a?os y n¨²mero cinco del mundo, le hab¨ªa batido cuatro veces en 13 pulsos previos, pero en los cinco dirimidos en los cuatro grandes escenarios no hab¨ªa podido hacerlo hasta ahora.

¡°No siento que haya derribado ninguna barrera. Simplemente ha sido un partido incre¨ªble, ¨¦pico¡±, describe el semifinalista, que tampoco hab¨ªa llegado nunca tan lejos en Australia. ¡°Si quieres tener alguna oportunidad contra Rafa, todo tiene que salirte perfecto¡±, prosigue, ¡°y creo que la clave ha estado en mi defensa. Atacar siempre ha sido mi punto fuerte, pero no la defensa, y es esencial para ganar a jugadores tan buenos como ¨¦l. Cuando no tienes el control del punto, es muy importante tener la capacidad de darle la vuelta¡±.

Siete semifinales consecutivas en los grandes

Al final, Thiem termina apeando a Nadal porque ha completado un partido formidable, de principio a fin. Su bola cargada de revoluciones y efectos, adem¨¢s, se ha empe?ado en golpear la cinta en varios instantes clave para aterrizar mansa e inalcanzable para el mallorqu¨ªn. Una reiteraci¨®n que no es casual. ¡°No soy un gran seguidor de hablar de suerte. Cuando est¨¢ de tu lado es porque la est¨¢s buscando y cuando est¨¢ del lado del contrario ocurre lo mismo. El partido no merece ser analizado por ah¨ª¡±, matiza Nadal, que encadenaba siete Grand Slams, desde Australia 2018, desembarcando al menos en las semifinales.

¡°Claro que a veces las cosas se deciden por cent¨ªmetros, pero t¨² has hecho con la mano eso para que la bola vaya ese cent¨ªmetro de m¨¢s o menos. ?l ha estado muy bien, ha jugado con mucha determinaci¨®n. Ha estado muy r¨¢pido y muy fino de mano¡±, precisa, sabiendo que un triunfo de Djokovic en Melbourne le apartar¨ªa del trono del circuito en favor del balc¨¢nico; ¡°yo creo que tambi¨¦n he estado bien, aunque en alg¨²n momento me ha faltado un golpe ganador, ya que las condiciones eran un poco pesadas; me ha faltado un pel¨ªn de finura y en estos partidos las diferencias son peque?as¡±.

El traspi¨¦ priva a Nadal de cazar a Roger Federer, de momento. Ocurra lo que ocurra entre el suizo y Nole ¨Ccitados hoy en las semifinales, a las 9.30, Eurosport¨C, el de Basilea abandonar¨¢ la ciudad con su registro de 20 grandes protegido. Era la primera oportunidad para el espa?ol de atrapar el registro dorado, pero dice marcharse satisfecho del torneo. Lleg¨® fatigado, fue de menos a m¨¢s y se fue con el escozor propio del ganador que ha sido rendido, pero con la sensaci¨®n de haber competido a un nivel notable hasta que Thiem, el tenista con dos derechas, porque lo de ese rev¨¦s tambi¨¦n es un esc¨¢ndalo, ha podido reducirle.

¡°?El ¡®warning¡¯? Hab¨ªa sido un puntazo...¡±

¡°Lo he intentado hasta el final y me he dado oportunidades en todo momento. F¨ªsicamente he hecho el esfuerzo y mental y ten¨ªsticamente tambi¨¦n. He estado muy cerca¡±, valor¨®. ¡°Estoy satisfecho con mi actitud y con lo que he propuesto ah¨ª dentro. Al final, cuando uno hace lo que puede no est¨¢ obligado a m¨¢s. Te vas con la satisfacci¨®n de haber hecho lo que has podido. Hay que seguir trabajando para acercarme a ese nivel m¨¢ximo para ganar los torneos¡±, abunda un tanto descolocado, porque ¡°se acepta y nos vamos, aunque a¨²n no s¨¦ a d¨®nde¡­¡±.

Inc¨®modo la mayor parte de la noche, Nadal tuvo la gentileza de atender una ¨²ltima cuesti¨®n, cuando desde la ATP daban su comparecencia por finalizada. Intercedi¨® a favor del periodista y se refiri¨® a la juez de silla, la francesa Aur¨¦lie Tourte, que le amonest¨® por retrasarse con el saque. ¡°Al final, necesitamos gente que entienda de los momentos y las situaciones. Cada uno aplica las cosas como quiere. Simplemente le he dicho que si quiere pitarme un warning por tiempo, despu¨¦s del punto que hab¨ªamos jugado, es que no aprecia el tenis. Era un puntazo incre¨ªble y si no hay tiempo para recuperarse de ese puntazo¡­¡±, se despidi¨® de madrugada.

LOS JUECES DE SILLA Y EL FUTURO

En la respuesta final, Nadal dio un paso m¨¢s all¨¢ de lo que hab¨ªa acontecido. "Estoy de acuerdo con el cron¨®metro, lo que pasa es que llegar¨¢ un momento dado en el que los jueces de silla perder¨¢n su funci¨®n. Al final, hacen pocos overrules, tenemos el Hawke-Eye¡­ Al final, todas estas cosas extras que van sucediendo lo que hacen es quitar el trabajo a los jueces de silla, que es el siguiente paso, porque es lo l¨®gico que ocurra¡­ Y ellos necesitan poner de su parte para hacerse significar y tomar decisiones; si no, est¨¢n ah¨ª, aprietan un bot¨®n y cantan el resultado", manifest¨®.

"Yo, personalmente, me gustan que los jueces de silla intervengan y entiendan qu¨¦ es el tenis y el partido. Hoy d¨ªa, la realidad es que con todo lo que tenemos pierden su funci¨®n. Dicho esto, ning¨²n problema con la juez de silla, simplemente le he dicho que cre¨ªa que no era el momento adecuado para ponerme un warning (advertencia) despu¨¦s del puntazo que nos hab¨ªamos jugado, nada m¨¢s", incidi¨®; "creo que hab¨ªa momentos en los que despu¨¦s de puntos muy largos apretaba el cron¨®metro muy r¨¢pido, y se lo he transmitido¡­ Pero nada m¨¢s, se lo he dicho y se lo he dicho bien".