Los efectos especiales del Rayo

De Vallecas a la cuarta plaza de la Liga. O lo que es lo mismo, a ocupar una de las cuatro posiciones Champions. La regularidad en su estadio (ocho victorias y un empate, 25 puntos de 27 posibles, y 19 goles a favor por tan solo tres en contra) han colocado a este valiente Rayo de Iraola como el mejor equipo local de los cinco grandes torneos dom¨¦sticos de Europa. Al PSG, con la misma puntuaci¨®n, le adelanta por diferencia de goles (+15, uno menos que los espa?oles), y al resto por puntos: Bayern y Borussia (24), y City y Arsenal (22) quedan por detr¨¢s con igual n¨²mero de duelos.

RAYRayo

2

Dimitrievski, Saveljich, Catena, Balliu, Fran Garcia, ?scar Valent¨ªn, Isi (Falcao, min. 87), Comesa?a (Path¨¦ Ciss, min. 87), ?lvaro Garc¨ªa (Beb¨¦, min. 42), Trejo (Unai L¨®pez, min. 75) y Sergi Guardiola (Nteka, min. 75)

ALA Alav¨¦s

0

Pacheco, Rub¨¦n Duarte, Laguardia, Mart¨ªn Aguirregabiria (Alexandru Tirlea, min. 76), Tachi, Luis Rioja (Pellistri, min. 75), Miguel De La Fuente (Mamadou, min. 61), Mamadou Loum , Pere Pons (Manu Garcia, min. 61), Toni Moya (Edgar M¨¦ndez, min. 54) y Joselu

Goles 1-0 min. 19: Sergi Guardiola. 2-0 min. 25: Catena.

?rbitro Antonio Miguel Mateu Lahoz

Tarjetas amarillas Trejo (min. 9), Rub¨¦n Duarte (min. 24) y Tachi (min. 70)

A un partido de finalizar la primera vuelta, su posici¨®n ya no es una casualidad, sino pura regularidad. Rendimiento mantenido. Desde la quinta jornada est¨¢ por encima del d¨¦cimo puesto, con nueve sextas posiciones y dos quintas antes de llegar a esta privilegiada situaci¨®n actual. La del Rayo es una apuesta constante por un modelo muy definido.

Se trata de un equipo valiente, profundo, perpendicular, que prefiere atacar los espacios abiertos que elaborar el juego en la zona de creaci¨®n, y que intenta jugar m¨¢s en el campo contrario que en el suyo. Sus posesiones son cortas y r¨¢pidas, y sus transiciones defensa-ataque, su mejor se?a de identidad. No cae en la tentaci¨®n de defender adelantado. Todo lo contrario. Su ¨²ltima l¨ªnea siempre tiene la frontal de su ¨¢rea como referencia y no le importa que haya muchos metros de distancia con su jugador m¨¢s adelantado. Su intenci¨®n es mostrarse robusto por dentro con una columna vertebral muy definida, con sus dos centrales (Catena-Salveljich) y sus dos mediocentros (Comesa?a-Valent¨ªn). Y, a partir de ah¨ª, ser veloz por las bandas donde los laterales (Balliu y Fran Garc¨ªa) alternan profundidad y amplitud.

En el epicentro de la organizaci¨®n, en la media punta, se planta el capit¨¢n ?scar Trejo, de 33 a?os. Casi siempre elige bien. Mitad instinto, mitad inteligencia. Sabe cu¨¢ndo tiene que acercarse a los mediocentros o dejarse caer en las bandas, y d¨®nde crear las superioridades. Mide los tiempos y es el jugador de Primera con m¨¢s pases de gol (ocho). T¨¢cticamente, el equipo es un libro abierto. Iraola ha apostado por un mismo sistema (1-4-2-3-1) y mantiene un once titular bien definido donde la posici¨®n que m¨¢s ha variado es la referencia ofensiva: Guardiola (siete partidos, los cinco ¨²ltimos), Nteka (seis), Falcao (cuatro) y Andr¨¦s Mart¨ªn (uno).

A pesar de conocer el trabajo y las circunstancias, los primeros sorprendidos son los propios interesados. David Cobe?o, director deportivo, lo reconoce con una sonrisa. ¡°Hay que ser sinceros, no nos esper¨¢bamos estar donde estamos ahora. Sab¨ªamos que lo pod¨ªamos hacer bien porque ven¨ªamos con una base de equipo y de trabajo del a?o pasado en Segunda, pero lo que nos est¨¢ pasando ni en nuestros mejores sue?os. ?Nuestro gran secreto? La intensidad. Tenemos el juego muy mecanizado y todos los jugadores parecen robots, siempre saben lo que deben hacer¡±.

Peor a domicilio

Desde ese conocimiento interno, Cobe?o tampoco encuentra una raz¨®n espec¨ªfica que pueda explicar la diferencia de resultados entre casa y fuera, donde el Rayo solo ha sumado cinco puntos. ¡°Los planteamientos t¨¢cticos son los mismos. Yo estoy en las charlas del entrenador. Lo poco que se puede modificar es m¨¢s por el rival, no la idea general. Pensamos que las medidas de Vallecas son un poco m¨¢s peque?as y se adaptan mejor a nuestro juego. Llegamos antes a cubrir espacios, a la presi¨®n que hacemos en todo el campo. Tambi¨¦n puede favorecer nuestras transiciones r¨¢pidas. Evidentemente, el efecto de la afici¨®n es una realidad porque empuja mucho y nos ha llevado a esa inercia de pensar que somos superiores a los dem¨¢s¡±, comenta.

El otro gran interrogante que se plantea es si va a poder aguantar este ritmo. David Cobe?o se muestra realista. ¡°Si nos respetan las lesiones, las sanciones y la covid, estoy convencido de que podemos mantenernos. No s¨¦ si tanto como hasta ahora, pero s¨ª que nos van a dar las piernas. La segunda l¨ªnea del equipo, que ahora est¨¢ jugando menos, cuando sale no solo no rinde peor, sino que mejora lo anterior porque sube la intensidad. Hemos perdido a ?lvaro Garc¨ªa, que es importante para nosotros. No tenemos un jugador de sus caracter¨ªsticas, pero s¨ª podemos hacer un apa?o con Beb¨¦, con Kevin Rodr¨ªguez, Andr¨¦s Mart¨ªn¡­¡±.

Paco J¨¦mez, ¨²ltimo entrenador del Rayo antes de la llegada de Iraola, tambi¨¦n saborea la ocasi¨®n desde su perfecto conocimiento del club y del equipo. ¡°Es indudable que el efecto Vallecas transforma al equipo hasta el punto de que casi arrolla a los rivales y muestra una autoridad impresionante. Es un equipo vertical y alegre. No tiene tanta salida de bal¨®n desde atr¨¢s como puedan tener otros, pero luego s¨ª despliega un juego muy r¨¢pido por las bandas, con mucha llegada de los laterales. T¨¢cticamente, en el f¨²tbol est¨¢ casi todo inventado, pero el Rayo todo lo que hace lo hace bien¡±, zanja.

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