El Sevilla reina en la ansiedad y se coloca segundo
Los de Lopetegui rompen su mala racha ante un Granada que dio mucha guerra
El Sevilla y el Granada jugaron un partido trepidante, donde la ansiedad de los disc¨ªpulos de Julen Lopetegui y la necesidad de los visitantes derivaron en un estado cercano a la locura. Fue un choque sin control, con groseros errores defensivos que provocaron un partido en el que cualquiera de los dos pudo ganar. Lo tuvo el Sevilla despu¨¦s de remontar un 0-1 y tambi¨¦n un gran Granada que empat¨® a dos y goz¨® de ocasiones para llevarse un triunfo de oro. Gan¨® el Sevilla con un gol de Mir en el minuto 93 despu¨¦s de que V¨ªctor D¨ªaz empatara en el 88. Fue un alargue de aut¨¦ntica locura, en el que reinaron los nervios, impropios de un aspirante a jugar la Liga de Campeones como el Sevilla (de nuevo segundo). El Papu, en el minuto 99, hizo el cuarto para zanjar un pleito donde el Granada mereci¨® m¨¢s. El equipo nazar¨ª se la jugar¨¢ la pr¨®xima jornada ante el Levante.
El Sevilla es un equipo descompuesto, pero tiene alma. Le salv¨® ese car¨¢cter y el hecho de que el Granada, muy ambicioso, busc¨® el tanto de la victoria cuando ten¨ªa el empate en los bolsillos. Los de Rub¨¦n Torrecilla jugaron un buen partido y merecieron, al menos, el empate. Pero se fueron de vac¨ªo. Result¨® imperdonable para sus intereses recibir un gol con dos toques en el ¨¢rea en el minuto 93. Rakitic, a lo Santillana, habilit¨® a Mir, que hizo un gol que vale mucho, pues encauz¨® el triunfo y devuelve al Sevilla a la segunda plaza en espera de lo que hagan Barcelona y Atl¨¦tico de Madrid.
No hubo un minuto de tregua en un partido que se jug¨® a un ritmo alto. Lopetegui dise?¨® su Sevilla m¨¢s atacante para privar a su equipo de lo que mejor hace, controlar el juego en el centro del campo. Sin un pivote defensivo y con Martial de mediapunta, el Sevilla sufri¨® una barbaridad ante el buen planteamiento del Granada. Torrecilla debi¨® olerse el planteamiento local, reforzando su centro del campo y soltando a Mach¨ªs como delantero. El venezolano es un futbolista diferente y letal. Sin un pivote que tapara la salida al bal¨®n en un saque de banda, Luis Su¨¢rez fue objeto de falta en una salida alocada de Diego Carlos. El colegiado dictamin¨® la ley de la ventaja con buen criterio y ah¨ª apareci¨® Mach¨ªs para colarse por un inmenso agujero y colarla en la meta de Bono. El Sevilla sufr¨ªa el mal de los equipos a la baja. Los cambios no funcionaban, con un alarmante estado de forma de sus jugadores de ataque, y el primer disparo a puerta del Granada se convert¨ªa en gol.
Ni Jord¨¢n ni Rakitic sosten¨ªan a un Sevilla que tir¨® de orgullo ante la delicada situaci¨®n que se le ven¨ªa encima despu¨¦s de una racha liguera de cuatro partidos sin ganar (tres empates y una derrota ante el Barcelona). Los locales articularon un ataque muy atropellado, con demasiados balones al ¨¢rea que el Granada iba solventando con cierta facilidad. Incluso Kound¨¦ salv¨® un disparo de Mach¨ªs con mucho peligro. El hombre que le ofreci¨® a una salida al Sevilla fue Navas. El capit¨¢n decidi¨® darle la tarde a su excompa?ero Escudero ante la impotencia de Martial, Corona, Ocampos y En-Nesyri. Un centro medido al segundo palo de Navas fue rematado con rabia por Diego Carlos.
El Sevilla someti¨® a un asedio al Granada en la segunda mitad, aunque su f¨²tbol careci¨® de fluidez e ideas. Encontr¨® el 2-1 despu¨¦s de que el VAR validara el tanto de Ocampos. El resto fue una aut¨¦ntica locura. El VAR anul¨® con justicia un gol a Mir y despu¨¦s del cambio de Diego Carlos por Gudelj el Granada le dio un soberano repaso al Sevilla. Empat¨® en un buen remate de V¨ªctor D¨ªaz y cuando acariciaba el triunfo perdi¨® el partido en un alargue de nueve minutos. Pudo llevarse el choque el Granada y lo perdi¨® en el descuento con los tantos de Mir y el Papu.
Puedes seguir a EL PA?S Deportes en Facebook y Twitter, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.