El vendaval en el Masters de Augusta es Scottie Scheffler

D¨ªa trampa en el Masters de Augusta. El sol disfrazaba un mal enemigo, un viento que azot¨® a los jugadores, juguete¨® con el vuelo de la bola y engord¨® las tarjetas. Nadie se escapaba de un vendaval que tensaba las banderas como si fueran velas en alta mar. Las piezas fueron cayendo. Los bogeys (o peor) saltaban uno tras otro en la clasificaci¨®n. El Masters se convirti¨® en una pesadilla bajo esas r¨¢fagas de hasta 25 kil¨®metros por hora... para todos menos para Scottie Scheffler. El n¨²mero del mundo, galard¨®n que caz¨® en solo 42 d¨ªas desde su primera victoria profesional en el circuito americano, se alz¨® imperial como un faro en la tormenta y es el l¨ªder del Masters con ocho golpes bajo par, cinco de ventaja sobre Schwartzel, Im, Lowry y Matsuyama. Es el liderato m¨¢s amplio en la historia de Augusta despu¨¦s de 36 hoyos, registro en el que iguala a Harry Cooper en 1939, Herman Keiser en 1946, Jack Nicklaus en 1975, Raymond Floyd en 1976 y Jordan Spieth en 2015. Todos menos el primero acabaron logrando la chaqueta verde.

Jon Rahm y Sergio Garc¨ªa est¨¢n en la 23? posici¨®n con +2 despu¨¦s de una jornada de sudores. Como ejemplo, solo 13 jugadores bajaron del par en el d¨ªa. Las estad¨ªsticas de algunos hoyos explican bien la sangr¨ªa: el 11 registr¨® 56 golpes sobre el par en la ronda (hubo casi tantos bogeys, 36, como pares, 41); el cinco, +36; el 1 y el 18, +30...

Del barro al viento. Jon Rahm comenz¨® la jornada en medio del pelot¨®n, dos sobre el par despu¨¦s de una ronda inicial en la que el fango pring¨® su bola en cuatro hoyos (5, 8, 10 y 11) y la someti¨® a condenados efectos en el aire. Tocaba remar y remar para no perder de vista a los l¨ªderes, y el vasco se levant¨® de la cama con el mono de faena puesto. Dos birdies seguidos en los primeros hoyos cambiaron la din¨¢mica y el gesto de su cara. Estaba entonces en paz con el campo. Borr¨®n y cuenta nueva en busca de las sensaciones que en su debut no hab¨ªa encontrado. El obligado camino de recuperaciones que tuvo que recorrer el jueves se convert¨ªa ahora en un pu?ado de ocasiones para ir descontando golpes y acercarse a los n¨²meros rojos. En el tres y en el cuatro se fabric¨® dos putts de birdie que no cayeron por un me?ique. Y entonces comenzaron las curvas.

El aterrizaje en el bunker en el hoyo cinco marc¨® el comienzo de un trayecto pedregoso. Rahm invirti¨® un golpe en devolver la bola a la calle y otro putt fallado por una pesta?a le carg¨® con el primer bogey del d¨ªa. El vasco se acercaba m¨¢s a esa versi¨®n de jugador que domina todos los palos, pero Augusta estaba para pocas bromas. Mucho viento y greens duros. La estampa soleada era una ilusi¨®n y cualquier despiste se castigaba de manera severa.

En los mayores aprietos tambi¨¦n se ve a ese golfista may¨²sculo que es Rahm. Esa bola ca¨ªda en la pinaza del hoyo siete dio paso a un approach por debajo del green que dej¨® la bola muy cerca de bandera entre el aplauso de reconocimiento de Augusta. Le sigui¨® otra visita al bunker en el ocho. Las opciones de birdie iban desvaneci¨¦ndose conforme avanzaba la ronda y el viento luc¨ªa vez m¨¢s m¨²sculo. M¨¢s de uno tuvo que parar a la hora de golpear porque en esas condiciones era jugar a la ruleta rusa.

Los ¨¢rboles se aliaron con Rahm. Dos veces. En el 11 su bola rebot¨® en las ramas y volvi¨® a la calle cuando parec¨ªa que Augusta se la tragaba. Igual en el 13. Entre medias un bogey en el 12, coraz¨®n de Amen Corner, despu¨¦s de una sacada corta de bunker. Cada hoyo era ya una lucha por la supervivencia. Y en la batalla, Rahm es un competidor de a¨²pa. Lejos de conformarse, con la mirada puesta en recortar posiciones, el n¨²mero dos mundial apret¨® los dientes. Correr algo de riesgo val¨ªa la pena. El hoyo 14 que el jueves le hab¨ªa dado una alegr¨ªa volvi¨® a descontarle un birdie, y en el siguiente escal¨®n confirm¨® que en los pares cinco no ha dado con la tecla: de ocho jugados en las dos rondas solo en uno, el segundo hoyo de este viernes, ha firmado cuatro golpes. El resto, par o peor. Y para terminar, otro golpe cedido en el 18: mal swing de salida y mal putt de llegada, para el par en el d¨ªa, +2 en total.

¡°Es lo que me fastidia, que con todo lo que he luchado acabe de esta manera¡±, explic¨® Rahm. ¡°No he estado c¨®modo desde el tee, sobre todo con el drive. Aun as¨ª, me veo en la pelea. Una buena ronda este s¨¢bado y me pongo ah¨ª¡±, a?adi¨®, antes de que Scheffler acabara su ronda.

En la misma encrucijada se mantiene Sergio Garc¨ªa, que viaj¨® de menos a m¨¢s para seguir en la trinchera. El Ni?o toc¨® la gloria cuando en 2017 gan¨® su primer grande, el Masters de Augusta. Sin embargo, desde que se visti¨® con la chaqueta verde no levanta cabeza en el torneo. Fall¨® el corte en 2018, 2019 y 2021 (no jug¨® en 2020 al dar positivo por covid), y este viernes se salv¨® con dos birdies finales de un nuevo tropiezo: +2 en el total. Se recuper¨® as¨ª de un triple bogey en el 11 al mandar su bola al agua. Desde que conquist¨® el Masters, el castellonense no ha logrado completar una ronda bajo el par de Augusta. Olazabal qued¨® fuera del corte con +17.

Tiger Woods se hab¨ªa preparado para resistir, pero no contaba con un invitado tan inc¨®modo como el viento. Despu¨¦s de su -1 del jueves, El Tigre comenz¨® engullido por el torbellino con cuatro bogeys en los cinco primeros hoyos y una colecci¨®n de golpes desajustados en cada rinc¨®n del campo. El mito volv¨ªa a ser humano. Altern¨® algunas pinceladas de genio con instantes en los que mostr¨® que, despu¨¦s de m¨¢s de 500 d¨ªas fuera de los torneos oficiales, a¨²n debe engrasar la maquinaria. Lo que estaba claro es que no hab¨ªa sufrido tanto para morir en la orilla y no pasar el corte. Con +2 en el d¨ªa, marcha +1 en el total. Le quedan dos d¨ªas m¨¢s de homenajes.

Clasificaci¨®n del Masters de Augusta.

TV: Movistar Golf. S¨¢bado, de 18.00 a 1.00. Domingo, de 18.00 a 0.30.

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