La prospectiva de Jordan D¨ªaz tras sus 17,76m: ?ser¨¢ el espa?ol el primero que supere los 18,29m de Jonathan Edwards?
Iv¨¢n Pedroso, el entrenador del plusmarquista nacional de triple salto, advierte de que no dejar¨¢ de tratar al atleta como el joven de 21 a?os que es y que solo piensa en que crezca ¡°paso a paso, paulatino¡±
Salta Jordan D¨ªaz 17,76m y, al d¨ªa siguiente el mundo del atletismo se enfrasca en admiradas prospectivas, mantiene la boca abierta y habla, abiertamente, no solo de que el prodigioso atleta espa?ol, de 21 a?os, ser¨¢ el s¨¦ptimo que en la historia del triple salto supere la barrera de los 18 metros, sino tambi¨¦n de que, evidentemente, no hay duda, es el elegido para batir los 18,29m que el brit¨¢nico Jonathan Edwards fij¨® como r¨¦cord mundial inalcanzable en 1995, en el siglo pasado, cuando D¨ªaz (La Habana, 23 de febrero de 2001) no hab¨ªa a¨²n nacido.
Todo el mundo hierve e Iv¨¢n Pedroso ni parpadea. El t¨¦cnico cubano que entrena a D¨ªaz en Guadalajara desde hace casi un a?o sabe de qu¨¦ van las expectativas de los aficionados. ?l mismo, cuando era atleta y casi tan joven como D¨ªaz, 22 a?os, salt¨® 8,71m en longitud. Ecce homo, clam¨® la multitud, he aqu¨ª el primer hombre que llegar¨¢ a la luna de la longitud, el primero que saltar¨¢ m¨¢s de nueve metros. Pedroso fue un campe¨®n tremendo, nueve mundiales, un oro ol¨ªmpico, lo gan¨® todo, pero no salt¨® nunca m¨¢s de 8,71m. Y ahora habla pausado del atleta en el que, quiz¨¢s ¨¦l se vea prolongado, pues Pedroso siempre ha confesado que su verdadera vocaci¨®n es la de saltador de triple. ¡°A Jordan todos le conocen. Viene ganando todos los campeonatos mundiales de su categor¨ªa. Est¨¢ en 17,76m y mi objetivo es que siga subiendo a partir de aqu¨ª. Y aunque salte ya tanto, mi objetivo es a largo plazo¡±, dice Pedroso, de 49 a?os, que siempre ha seguido las ense?anzas del poco a poco en el camino de la excelencia, y as¨ª, recuerda, en pocos a?os, Yulimar Rojas, joven talento de gran capacidad f¨ªsica y m¨ªnimos rudimentos t¨¦cnicos cuando empez¨® a entrenar con ¨¦l, se ha convertido en la mejor triplista de la historia. ¡°Con Jordan, la parte de carrera, el ritmo, ya lo tiene, y lleva su proceso. Es muy joven y no estoy apurado con ¨¦l. Pensamos en m¨¢s adelante. Tiene todo un camino. Con Yuli empec¨¦ igual, 19-20 a?os, y ¨¦l tiene un tiempo que necesito controlarlo porque como tiene un nivel tan alto... Pero yo le digo que tranquilidad¡±.
Cuando lleg¨® a Espa?a (Jordan D¨ªaz es espa?ol desde hace cinco meses), el saltador de La Habana ten¨ªa una mejor marca de 17,49m, conseguida a los 18 a?os. Ha disputado cuatro competiciones desde febrero y en todas ha ido mejorando. Ha batido el r¨¦cord nacional tres veces. Ya salta 17,76m, la mejor marca mundial del a?o, la 24? de la historia. Ya salta m¨¢s que cuando era cubano.
¡°Jordan es as¨ª. Es complicado que no salga su calidad, pero no me gusta adelantar a ning¨²n atleta. La edad es la clave. Tiene 21 a?os y tienes que trabajarlo como a un saltador de 21 a?os, no como a uno de 25. Quiero que vaya paso a paso, quiz¨¢s siguiendo el mismo camino que Pedro Pablo Pichardo [cubano de nacimiento, portugu¨¦s de nacionalidad, campe¨®n ol¨ªmpico en Tokio, uno de los seis magn¨ªficos del triple salto, con una mejor marca de 18,08m], paulatino, tranquilo, mejorando cada a?o un poquito¡±, desgrana Pedroso. ¡°Velocidad, t¨¦cnica de carrera, t¨¦cnica de salto, y el cuerpo solo saldr¨¢... Tiene mucho talento y claro que puede saltar mucho, pero no lo estoy apurando para que salte. Simplemente le estoy dando la t¨¦cnica y con la t¨¦cnica los resultados salen solos¡±.
¡°Jop¨¦, me ha metido m¨¢s de un metro¡±, dice Ram¨®n Cid, entrenador de Mar¨ªa Vicente y, cuando atleta, ol¨ªmpico en Mosc¨² y plusmarquista espa?ol de triple, con 16,71m en M¨¦xico 1979. ¡°Cuanto m¨¢s corre, m¨¢s salta, y esto no es as¨ª para todos. Los que vuelan alto, pierden distancia si corren demasiado¡±.
Los sabios del triple espa?ol no quieren, tanto les gusta, ni podr¨ªan, ocultar su entusiasmo por el joven saltador, y, aunque por su experiencia saben que muchas veces es imposible que el talento siga el ritmo de los humanos, tampoco le piden bulla a Pedroso. ¡°Jordan tiene un esquema de salto muy bueno, en el que la distancia es producto de la velocidad¡±, a?ade Cid, mientras que Juan Carlos ?lvarez, entrenador, entre otros, de Carlota Castrejana, anterior plusmarquista espa?ola, y de Pablo Torrijos, anterior plusmarquista nacional, y hasta entrenador de Pedroso cuando el cubano de Guadalajara intent¨® hace unos a?os regresar a la competici¨®n, tampoco puede dejar de elogiarlo al diseccionar su 17,76m de La Nuc¨ªa el domingo. ¡°Su capacidad de salto es una locura. Un hop [primer salto que aterriza en la misma pierna de batida] de entrada, y si el primero es as¨ª, no te frenas, mantienes la velocidad, el cuerpo te va pidiendo m¨¢s; un step [segundo] profundo, y, as¨ª, a simple vista, por la distancia de la arena a la que rebot¨® y bati¨® el jump, el salto final, entre los dos lleg¨® a 11,70m¡ Una forma muy efectiva¡±.
¡°Su progreso depender¨¢ siempre del ¨²ltimo salto, el decisivo¡±, se?ala Cid. ¡°Pero la escuela cubana no es as¨ª¡±.
¡°De toda la vida, desde que los entrenadores sovi¨¦ticos implantaron su escuela, en la isla no le han dado tanta importancia a la velocidad porque aprovechaban a fondo la gran saltabilidad [capacidad de salto] natural de sus atletas, y muchas veces botan como pelotas de playa en el triple, muy alto pero poco efectivo¡±, explica ?lvarez. ¡°Pichardo rompi¨® ese esquema, y ahora Jordan. Los dos tienen un nivel de velocidad muy alto¡±.
Y ambos definen la t¨¦cnica del triple, y as¨ª lo expresa Edwards, como un ricochet, no como un muelle sino como el canto plano que lanzado con habilidad a las aguas tranquilas de un lago rebota raso y se acelera en cada contacto m¨ªnimo con el agua. ¡°El pie no aterriza sobre los dedos ni en el hop ni en el step. El atleta pisa de tal¨®n y no tiene que aplicar fuerza, la propia velocidad le impulsa¡±, dice ?lvarez. ¡°Adem¨¢s, Jordan tiene muy buenas palancas, buena conexi¨®n m¨²sculo-tend¨®n, y un nivel de capacidad de salto extraordinario...¡±
Jordan D¨ªaz ser¨¢ un ni?o, pero su nombre, asociado a prodigios nunca vistos, circula en Madrid al menos desde 2020, cuando ten¨ªa 19 a?os y el equipo cubano le pidi¨® a Juan Carlos ?lvarez que analizara uno de sus saltos con c¨¦lulas fotoel¨¦ctricas para adaptarle los entrenamientos. ¡°Vino al m¨®dulo cubierto del INEF de Madrid y salt¨® 17,50m¡±, recuerda Juan Carlos ?lvarez, que dirigi¨® el ensayo. ¡°Bati¨® el r¨¦cord del mundo j¨²nior en un entrenamiento en pista cubierta...¡±
D¨ªaz igual¨®, en realidad, los 17,50m que Mai V?lker, alem¨¢n, a¨²n mantiene como plusmarca mundial j¨²nior, o sub 20, desde 1985.
¡°Le medimos la velocidad de entrada en 10,30 m/s \[a 37,08 km/h\], y calculo que en el 17,76m, entr¨® a 10,50 m/s. Nunca ser¨¢ tan veloz como Christian Taylor [18,21m, el saltador, ahora lesionado, que m¨¢s cerca ha estado del r¨¦cord del mundo de Jonathan Edwards], un atleta de 10,80 m/s y hasta 11 m/s [casi 40 kil¨®metros por hora], pero tiene una saltabilidad que Taylor no¡±.
Hace a?os, el biomec¨¢nico Philip Graham Smith, que trabaj¨® con Jonathan Edwards, public¨® un estudio en el que aventuraba que para saltar 18,35m, dando un margen de p¨¦rdida en la tabla y la distancia entre dedos y tal¨®n, Taylor necesitar¨ªa entrar a tabla a 11 m/s, hacer un hop de 6,25m, soportar sobre su pierna una fuerza de reacci¨®n de la superficie equivalente a 18 veces su peso, un step de 5,41m y un jump de 6,69m: 18,35m. Las dos primeras partes, Jordan D¨ªaz ya las tiene. Solo necesita un poco de velocidad y un mucho de tiempo, paso a paso.
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