La ruleta de Espa?a no encuentra el gol en la Eurocopa femenina

Despu¨¦s de derrotar sobre la campana a Dinamarca y confirmar el pase a los cuartos de la Eurocopa, Espa?a suspir¨® de alivio m¨¢s que sonri¨® de alegr¨ªa. Nadie de la expedici¨®n se pod¨ªa permitir una eliminaci¨®n tan temprana. Las caras que se vieron en el Brentford Community tras el gol de Marta Cardona evidenciaron el camino sufriente que hab¨ªa recorrido la selecci¨®n en las dos ¨²ltimas semanas, marcadas por la lesi¨®n a tres d¨ªas del debut de su jugadora bandera, la Bal¨®n de Oro Alexia Putellas. Aquella fatalidad coloc¨® sobre las muchachas de Jorge Vilda una densa nube y todo lo que se ha visto despu¨¦s en el campo han sido curvas y una sensaci¨®n general de apuro. Este torneo es el primero en el que la Roja se presentaba con aspiraciones reales de hacer algo grande, y el percance de la azulgrana, unida a la ausencia tambi¨¦n de Jenni Hermoso aduciendo problemas f¨ªsicos, destempl¨® la atm¨®sfera.

Los efectos han resultado visibles en las dos ¨¢reas y en unas alineaciones que no han dejado de mutar en la zona ofensiva. Hu¨¦rfana de su m¨¢xima anotadora hist¨®rica (Hermoso, 42 dianas en 82 partidos) y de la efervescencia de Putellas (fija en los ¨²ltimos 33 partidos), el recurrente problema del gol se ha multiplicado. Los cinco tantos de Espa?a en la primera fase han quedado muy lejos de los 14 de su rival en cuartos, Inglaterra (ocho a Noruega), y los nueve de Alemania, que adem¨¢s no han encajado ninguno. Un agujero agravado por los apagones atr¨¢s, se?al o consecuencia directa de los equipos que dudan. A los 50 segundos del estreno, contra Finlandia, un desajuste defensivo oblig¨® a Espa?a a remontar y, cuatro d¨ªas despu¨¦s, ante Alemania, un error grosero de la portera Sandra Pa?os en el minuto tres confirm¨® que la selecci¨®n se mov¨ªa entre sombras.

El escenario general de los tres duelos ha sido similar: la Roja domina la posesi¨®n y el rival se mete atr¨¢s a la caza de las contras. Las germanas le concedieron la pelota a la selecci¨®n el 66% del tiempo, pero eso no evit¨® que la noche discurriera por donde quer¨ªan las teutonas. M¨¢s si cabe tras el fallo de Pa?os nada m¨¢s empezar. Y, este s¨¢bado, Dinamarca elev¨® la angustia de la selecci¨®n durante un buen tramo con el mismo plan. ¡°Cuesta contra equipos que salen a defender y buscan los espacios¡±, admiti¨® este s¨¢bado el seleccionador, Jorge Vilda.

La t¨¢ctica de las oponentes contra un conjunto que amasa tanta posesi¨®n ha sido tan conocida como da?ina. En gran parte, por la falta de tino ante el marco rival. La estad¨ªstica oficial revela que a la Roja no le han faltado disparos (62, frente a los 69 de Inglaterra y los 61 de Alemania), sino pericia y, por consiguiente, sensaci¨®n real de amenaza.

Las vacilaciones atacantes han tenido su reflejo, o quiz¨¢s tambi¨¦n parte de la causa, en la composici¨®n de los onces. Con una meta (Pa?os), una defensa (Batlle, Paredes, Le¨®n y Ouahabi) y dos piezas de la medular (Bonmat¨ª y Guijarro) m¨¢s Caldentey como elementos intocables, el resto ha estado en permanente cambio. Las ausencias de Hermoso y Putellas m¨¢s la escasez de gol han introducido las alineaciones de Vilda en una batidora.

Tres partidos, tres ataques

Durante meses, un soniquete acompa?¨® a la selecci¨®n: Espa?a no tiene plan B m¨¢s all¨¢ de un once muy marcado, apoyado en el Bar?a campe¨®n de Europa. Una tesis que tom¨® vuelo durante la primera fase. En cada partido, las elecciones del seleccionador han ido cambiando.

Contra Finlandia fue jugadora por jugadora: Irene Guerrero por Alexia Putellas en el medio, con Esther Gonz¨¢lez como nueve. Ante Alemania, situ¨® a Laia Aleixandri en el pivote (posici¨®n que no ocupaba desde los 15 a?os), desplaz¨® a Guijarro al volante y arriba opt¨® por Sheila Garc¨ªa. Y frente a Dinamarca, devolvi¨® a Guijarro a su puesto natural, retras¨® a Caldentey a la medular y dio pista a Athenea del Castillo en el extremo izquierdo. No obstante, el descanso dej¨® otro giro: Gonz¨¢lez y Cardona por las dos Garc¨ªas (Luc¨ªa y Sheila), que hab¨ªan repetido respecto a Alemania.

La que no ha aparecido, de momento, ha sido Amaiur Sarriegi, fuera de la lista inicial pese a los 17 goles con la Real Sociedad el curso pasado (m¨¢s 12 con Espa?a desde septiembre) y reclutada de urgencia por la ca¨ªda de Alexia; y de Claudia Pina, de quien el seleccionador dijo en la previa que las met¨ªa ¡°de todos los colores¡±, solo hubo noticias fugaces y a la desesperada contra Alemania. Quiz¨¢s consciente de las dificultades que le esperaban, Vilda incluy¨® en la convocatoria al elemento sorpresa de Salma Paralluelo -t¨¦cnica, velocidad y desconocida para muchas rivales-, pero otra lesi¨®n la descabalg¨®.

Superada la angustia de la primera fase, en cuartos espera la inabordable Inglaterra, impoluta atr¨¢s y un martillo arriba. ¡°Tendremos que mejorar si queremos plantarles cara¡±, advirti¨® Vilda. Al examen contra las anfitrionas, eso s¨ª, las muchachas de Vilda viajar¨¢n aligeradas del estr¨¦s mental que las ha limitado hasta ahora.

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