Hist¨®rica triple corona de una Dinamarca arrolladora

Dinamarca alcanz¨® una cima que nadie hab¨ªa tocado hasta ahora en el balonmano: tres t¨ªtulos mundiales consecutivos. Arranc¨® la final como un avi¨®n, aplac¨® las rebeliones francesas e hizo valer una bater¨ªa de recursos casi infinita. Para gobernar el partido no le hizo falta el tibur¨®n Mikkel Hansen, que se qued¨® en un ¨²nico gol anotado de penalti al comienzo de la segunda mitad (acumulaba 40) y sigui¨® la mayor parte del desenlace desde el banquillo.

Se vali¨® del inicio arrollador de sus j¨®venes (Gidsel, de 23 a?os y autor seis dianas, y sobre todo de Pytlick, de 21 a?os y responsable de nueve goles), y de una actuaci¨®n enorme de Rasmus Lauge en la segunda mitad. El central del Veszprem apenas se hab¨ªa dejado ver en el torneo por problemas f¨ªsicos, pero se destap¨® a lo grande con la triple corona en juego: 10 goles en 11 lanzamientos. Para rematar, en la porter¨ªa cont¨® primero con Niklas Landin y luego con Kevin Moller.

Francia, la vigente campeona ol¨ªmpica, resisti¨® como pudo y, despu¨¦s de verse muy sometida al principio, apret¨® de lo lindo, con Remili y Fabregas al frente. Del magullado Nikola Karabatic apenas hubo noticias (un lanzamiento errado en 16 minutos en pista). Los galos forzaron el empate a la vuelta del descanso (16-16) y todav¨ªa volvieron a ponerle el aliento en el cogote a los daneses (21-22 en el minuto 42). Pero ya no tuvieron m¨¢s respuesta para el martillo que no dejaba de golpearles y poco a poco fueron cediendo. Su porter¨ªa, vital en estas alturas, result¨® intrascendente: siete paradas en toda la velada.

En Dinamarca, en cambio, hab¨ªa para casi todos. Sali¨® Mensah Larsen, que hab¨ªa tenido una participaci¨®n testimonial contra Espa?a, y anot¨® dos tantos seguidos en un momento todav¨ªa caliente. El estado de gracia era absoluto en los n¨®rdicos, que de postre sumaron su 28? duelo invicto. No pierden desde 2017 (solo han cedido dos empates). Ese r¨¦cord hac¨ªa d¨ªas que lo hab¨ªan batido (lo ten¨ªa precisamente Francia, con 25). Este domingo, lograron el m¨¢s grande, el de verdad.

Salvo un empate que se dejaron ante una necesitada Croacia en la segunda fase, su paso por Polonia y Suecia ha resultado abrasador. Los cuartos los resolvieron contra Hungr¨ªa por una ventaja de 17 goles (40-23). Casi su mayor inconveniente han sido sus continuos viajes de Polonia a Suecia, y viceversa, debido al ca¨®tico calendario del campeonato. A Espa?a, pese a su aguante cong¨¦nito y el arrim¨®n final, la ataron en corto, igual que a Francia en la final. Los gales les vencieron hace un a?o y medio en la final ol¨ªmpica, y en el Mundial, el territorio dan¨¦s, se la devolvieron.

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