Jon Rahm, el campe¨®n que disfruta sin miedo

Segu¨ª la ¨²ltima ronda del Masters con la convicci¨®n de que Jon iba a ganar. Sab¨ªa que esperar¨ªa su momento y as¨ª fue. Brooks Koepka ven¨ªa de meter todos los putts del mundo y eso no pasa todos los d¨ªas. Cuando Jon atrap¨® el liderato en el 6, y luego ara?ando otro golpe en el 8, y se ve¨ªa que Koepka no estaba tan acertado como en otras jornadas, empezamos a sentir que Augusta era este a?o para ¨¦l.

Y en esos momentos con tanta presi¨®n y tensi¨®n, en los que se estaba jugando un grande, le vi disfrutar, muy concentrado, con la mirada en el suelo y en el golpe. Le hab¨ªa escrito unos d¨ªas antes dici¨¦ndole que disfrutara del momento y de la familia. ?Es eso posible, se puede disfrutar de verdad, cuando te est¨¢s jugando ganar el Masters? S¨ª por la seguridad que tiene ¨¦l en s¨ª mismo, por el estado emocional en el que juega, por esa confianza que le hace espantar todos los miedos. Cada golpe es un reto para ¨¦l. Lo prepara. Se concentra. Y va a por ¨¦l. Es la sensaci¨®n que transmite vi¨¦ndole moverse por el campo.

Jon Rahm casi siempre est¨¢ entre los primeros en cada torneo, y entre los mejores en muchas estad¨ªsticas, y eso en el mundo del golf es muy dif¨ªcil. Demuestra su regularidad y la solidez de su juego. Miremos los jugadores que no han hecho un buen Masters de Augusta. Rory McIlroy, Sergio Garc¨ªa, Dustin Johnson¡­ grandes golfistas. Al final era un duelo entre Koepka y Rahm porque los de atr¨¢s no apretaban hasta al final, y acab¨® convertido en la primera gran final entre el PGA y LIV Golf en la lucha por un grande. Gan¨® Jon por delante de Mickelson y Koepka. En el circuito americano tendr¨ªan que ponerle una alfombra roja a Jon.

A esa confianza a?ade una t¨¦cnica que le permiti¨® dar un recital de drives en el Masters, unos bombazos como en el hoyo 13 cuando se estaba jugando la chaqueta verde y pod¨ªa haber optado por un golpe m¨¢s conservador para mantener su ventaja en la tabla. Aunque para m¨ª el golpe del torneo fue el segundo en el 14, un tirazo a green con efecto para hacer el birdie que fue un homenaje a Seve por sus tiros entre los ¨¢rboles, cuando todo el mundo se preguntaba c¨®mo lo hab¨ªa hecho. Un golpe marca de Seve, con unas manos m¨¢gicas como las que ten¨ªa Ballesteros y como las que tiene Jon. Dos genios.

Ser el primer europeo con el US Open y el Masters de Augusta es incre¨ªble, y creo que el juego de Jon se adapta para ganar cualquier grande. En el Masters los greens marcan la diferencia, los pueden poner a la velocidad que quieran para volverte loco gracias a la calefacci¨®n que tienen debajo y ah¨ª Jon es de los mejores del mundo por la facilidad que tiene desde ni?o en leer las ca¨ªdas.

El US Open pone al l¨ªmite al jugador con sus calles estrechas y hoyos muy largos, con una preparaci¨®n muy dura, y Jon no tiene problemas con la distancia. El Open Brit¨¢nico puede tener un clima diferente cada d¨ªa, y Jon est¨¢ acostumbrado a jugar con fr¨ªo y lluvia, y los parones le afectan menos que a otros jugadores. No est¨¢ inc¨®modo como muchos americanos que van al Open con gorro de invierno. Rahm est¨¢ en un momento en el que ojal¨¢ gane la Jarra de Clarete. Y el PGA es el grande m¨¢s abierto, en un campo m¨¢s generoso, entre comillas el m¨¢s f¨¢cil. En todos estos escenarios hay jugadores que se adaptan a unos terrenos mejor que a otros. Jon es bueno en todos.

Jack Nicklaus gan¨® 18 grandes. Todav¨ªa nos quedan 16.

Eduardo Celles fue el primer entrenador personal de Jon Rahm, en la Escuela de Golf Celles.

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