Queralt Casas, la jugadora que temblaba cada vez que lanzaba a canasta, ya no tiene miedo
La catalana, que cambi¨® su mec¨¢nica para mejorar sus malos porcentajes en los tiros libres, lidera a un Valencia Basket que por primera vez parte con ventaja de campo en la final de la liga femenina ante el vigente campe¨®n, el Perfumer¨ªas Avenida
A Queralt Casas (Bescan¨®, Girona; 1992) le temblaban las piernas cada vez que iba al tiro libre la temporada pasada. Se colocaba en la l¨ªnea, botaba el bal¨®n y escuchaba un molesto runr¨²n en el pabell¨®n de la Fuente de San Luis. Luego lanzaba y a veces no tocaba ni el aro. Cada vez que iba a tirar, le llegaba el cuchicheo de la afici¨®n del Valencia Basket, su afici¨®n. Tan recurrente era esto, falta, fallo, ruido, que decidi¨® no forzar las faltas personales para no tener que tirar. Un d¨ªa, muy cerca ya de tocar fondo, estaba en el banquillo y suplic¨® a Rub¨¦n Burgos que no la sacara a jugar. Ten¨ªa p¨¢nico.
Hoy Queralt Casas desborda confianza y lidera, sobre todo en defensa, al Valencia Basket. El equipo de Rub¨¦n Burgos ha dominado la liga regular y por primera vez tendr¨¢ la sart¨¦n por el mango, con el desempate en casa, en las finales de la Liga Femenina Endesa, en un duelo con el Perfumer¨ªas Avenida, el campe¨®n en las dos anteriores ante el mismo rival, en lo que se ha convertido ya en el gran cl¨¢sico del baloncesto femenino de esta d¨¦cada. El primer partido ser¨¢ este jueves (a las 20.00, Teledeporte) en la Fonteta. El segundo, el domingo, en Salamanca. Y si fuera necesario un tercero, volver¨ªan a Valencia el jueves. El equipo charro disputa su decimos¨¦ptima final consecutiva.
El pasado verano, cuando Queralt regres¨® de las vacaciones, Esteban Albert, el director deportivo del Valencia Basket, estaba esper¨¢ndola. ¡°Me hab¨ªa preparado mentalmente y hablando con ¨¦l nos propusimos lanzar a una mano. Ojo, yo no fallaba por un tema de mec¨¢nica, pero el cambio me serv¨ªa para empezar de cero y romper con lo anterior. Con una mano va s¨²per recto y aunque se vea raro lo importante es que entre y, sobre todo, que no deje de hacer mi juego por no ir al tiro libre. As¨ª lo acord¨¦ con Esteban y luego, con Rub¨¦n (Burgos), empec¨¦ a hacer una rutina antes de cada entrenamiento¡±.
No hubo que investigar mucho para elevar los porcentajes de la escolta: ha pasado de un 36,7% en la temporada 21-22 a un 61,8% en la 22-23, su mejor promedio en Espa?a. Queralt ya sab¨ªa lanzar as¨ª, pero le daba verg¨¹enza. Si la gente ya cuchicheaba cuando iba al tiro libre, qu¨¦ pasar¨ªa si encima luego cog¨ªa y tiraba a una mano, algo muy poco ortodoxo. Cuando su cabeza estuvo fortalecida con la ayuda de un psic¨®logo, ya le dio igual. ¡°?Qu¨¦ m¨¢s da c¨®mo lances? Como si lanzas de cuchara, ?si entra?¡±.
Queralt Casas siempre fue una ni?a el¨¦ctrica. Con cuatro a?os, su madre la llev¨® a ver si pod¨ªa apuntarla a taekwondo, pero las normas obligaban a tener m¨¢s de cinco a?os. Aquella mujer insisti¨® y el entrenador dej¨® que hiciera una prueba. Cuando volvi¨® a por ella, le dijeron que estaba dentro. ¡°La de leches que deb¨ª repartir all¨ª dentro para convencer a aquel entrenador¡¡±, se r¨ªe Queralt, que lleg¨® a ser cinco veces campeona de Catalunya de taekwondo.
Su carrera como taekwondista acab¨® el d¨ªa que se fue a la Blume, la residencia de deportistas de alto rendimiento de Barcelona que cerr¨® en 2015, para entrenar con el club Siglo XXI. Queralt ten¨ªa solo trece a?os y a¨²n recuerda el viaje en coche con su padre, los nervios, el miedo a dejar su casa. ¡°Pero luego llegu¨¦, entr¨¦ por la puerta y se acab¨® todo lo malo. No tengo un recuerdo traum¨¢tico de aquello. Quiz¨¢ porque he sido muy independiente desde peque?a¡±.
All¨ª se form¨® con Ram¨®n Jordana hasta los 18 a?os. Luego vinieron otros equipos y un a?o fich¨® por el Galatasaray. All¨ª, en Estambul, sin entender una palabra de turco y con muchos problemas para expresarse en ingl¨¦s, se agobi¨® y se hundi¨®. La catalana estuvo tentada de marcharse, pero N¨²ria Mart¨ªnez, la base espa?ola, la anim¨® y aguant¨®. ¡°Esa fue la primera vez que me sent¨ª mal. No hablaba el idioma, estaba lejos de casa, era joven y le cog¨ª tirria al baloncesto. Sin N¨²ria Mart¨ªnez no hubiera aguantado¡±.
Hace cuatro a?os recal¨® en Valencia. El entrenador, Rub¨¦n Burgos, le dijo que no tuviera prisa, pero Queralt Casas termin¨® el curso como MVP. Desde el primer d¨ªa destac¨® como una defensora excepcional. Es su pasi¨®n. ¡°Me flipa desde siempre. De ni?a yo era muy cabrona. Mi objetivo era que la jugadora rival no cruzara la l¨ªnea de medio campo, y me motivaba verla con miedo al botar. Mi padre vino a un entreno cuando yo ten¨ªa diez a?os y recuerda que la entrenadora me dio la bola. Cuando eso pasaba todas las jugadoras se pon¨ªan a atacar, a tirar, a intentar driblar¡ Y mi padre me cuenta que yo cog¨ª la bola, se la di a otra ni?a y me puse a defenderla¡±.
Antes de esta ¨²ltima mala experiencia en Valencia, ya hab¨ªa trabajado con un psic¨®logo. Fue en el verano de 2018, cuando se derrumb¨® su autoestima en una concentraci¨®n de la selecci¨®n espa?ola -Casas ha ganado dos veces el Eurobasket-. ¡°Ven¨ªa el Mundial y no quer¨ªa que me afectaran ciertos comentarios, as¨ª que empec¨¦ a ir al psic¨®logo y lo solucion¨¦¡±.
Queralt ya no tiene miedo y este jueves empieza la lucha por conquistar la primera Liga para el Valencia Basket. Hay dos plantillas sensacionales, aunque el Perfumer¨ªas Avenida ha perdido a Michaela Onyenwere porque la WNBA obliga a las jugadoras a estar en la pretemporada. Enfrente, la escolta catalana est¨¢ preparada para aportar sus mejores virtudes: defensa, velocidad, intensidad y un extra?o tiro a una mano que ha mejorado sus porcentajes.
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