El Madrid estar¨¢ en la final de la Liga ACB

ACB - semifinal - jornada 4

Joventut Badalona

73 94

Finalizado

Real Madrid

El Real Madrid estar¨¢ en la final de la Liga ACB despu¨¦s de su segundo triunfo consecutivo en el Ol¨ªmpic de Badalona, que se qued¨® mudo en los instantes finales ante la dolorosa evidencia. Los madridistas esperan ahora rival para los partidos que deciden el t¨ªtulo.

No quer¨ªa el Joventut quedarse otra vez a unos metros de la orilla a la que no llega desde hace una treintena de a?os, cuando jugaban Jofresa, Villacampa y Morales, y que reverdec¨ªa los laureles de los hermanos Margall o de Nino Buscat¨®. Por eso Dur¨¢n trat¨® de plantearle un partido f¨ªsico al Real Madrid, con el que hay que hacer un trabajo casi perfecto para rascar algo.

Le sali¨® bien el plan en los primeros minutos al entrenador del equipo verdinegro y el marcador oscil¨® en unos par¨¢metros aceptables. Es complicado despegar al Real, pero el Joventut lo manten¨ªa a raya e incluso lo miraba desde la ventaja. Un triple de Parra encendi¨® a la grada del Ol¨ªmpic y no fue hasta que sali¨® a la cancha la vieja guardia madridista, Chacho Rodr¨ªguez, Llull y Rudy, cuando un tiro lejano del tercero puso por delante a los blancos por primera vez (15-17).

A pesar de los defectos que Chus Mateo trataba de corregir desde la banda, el Madrid hac¨ªa bastantes cosas bien. Entre otras, secar a Kyle Guy, que ha ido de m¨¢s a menos en la serie. Hasta el descanso, el partido estuvo equilibrado, aunque en los minutos finales del segundo cuarto, el Joventut mostr¨® algunos s¨ªntomas de debilidad en el rebote. El Madrid, con Tavares implacable cuando tocaba reba?ar los balones que escup¨ªa el aro, corr¨ªa al contragolpe para anotar en cuanto ten¨ªa la oportunidad. Al descanso, el jugador de Cabo Verde ya hab¨ªa cazado cuatro, que se doblaron tras el tercer parcial. Dur¨¢n acab¨® contento con el juego de su equipo en la primera parte, que acab¨® con tres puntos por debajo (35-38), pero con las aspiraciones intactas.

Pero entre Tavares y Yabusele se las ingeniaron para, seg¨²n avanzaba el tercer cuarto, ir deshaciendo la resistencia de la Penya, que sobreviv¨ªa apenas gracias a Broszianski, porque nadie encontraba soluciones en ataque, y las p¨¦rdidas provocaban que el Madrid fuera aumentado poco a poco su ventaja. Ni siquiera una doble falta antideportiva de Rodr¨ªguez y Hezonja, que otorg¨® cuatro tiros y saque de banda al Joventut, provoc¨® algo m¨¢s que un rasgu?o al equipo blanco. Feliz fall¨® dos de los cuatro, respondi¨® el Madrid con un triple, y la ventaja, que rondaba los quince puntos, se mantuvo bastante estable a medida que avanzaba el reloj.

Por momentos aparec¨ªa Tomic para encender a la grada, o levantaba Vives al p¨²blico con un triple, pero la evidencia se iba abriendo paso. Lleg¨® el Joventut a reducir la diferencia a once puntos (60-71), pero pidi¨® Mateo un tiempo muerto para reconducir el partido de su equipo, y con seis minutos por delante, Musa, con tres tiros libres, elev¨® de nuevo la diferencia, que ampli¨® Chacho Rodr¨ªguez con una canasta imposible con la zurda. A falta de cuatro minutos, el Joventut busc¨® los tiros triples, pero recibi¨® la misma respuesta madridista. Con 2:53 en el luminoso, el Real alcanz¨® su m¨¢xima diferencia (66-86), y liquid¨® la eliminatoria. ¡°No quiero triples¡±, les dijo Mateo a sus hombres, que obedecieron hasta dejar morir el partido.

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