Mikel Landa: ¡°Los fallos no se ven tanto cuando eres gregario, pero sigo con hambre¡±

Como cantaban los Clash, should I stay or should I go, los ciclistas, como todo el mundo, se dividen en dos grupos, los que a mitad de una etapa tienen que tomar una decisi¨®n, ataco o sigo a rueda, y los que esperan a que les digan lo que tienen que hacer, baja a por comida para tus compa?eros, tira delante unos cuantos kil¨®metros, lo que desean arriesgarse en territorios desconocidos, los que sue?an con seguridad y calma. Nada est¨¢ predeterminado, y menos que ninguno Mikel Landa, alav¨¦s de Murgia, que a los 34 a?os ha abandonado el mundo de la duda creativa y her¨¦tica, para alojarse en la seguridad de la rutina y la pr¨®xima semana, en la Itzulia, la carrera de su tierra que tanto le quiere y m¨¢s le jalea, se olvidar¨¢ de mirar la carretera desbrozando el horizonte como un velero desafiando el viento, como hizo en la reciente Volta, el primero en persecuci¨®n de Pogacar, y correr¨¢ mirando atr¨¢s, pendiente de las necesidades de su nuevo jefe, Remco Evenepoel, aplic¨¢ndole su conocimiento, su saber ver qui¨¦n se mueve, d¨®nde se mueve, por qu¨¦ se mueve, y hasta d¨®nde puede llegar el que se mueve, como hizo en el Algarve, donde ense?¨® al fen¨®meno belga a medir el tiempo en relaci¨®n con el espacio. La nueva encarnaci¨®n del landismo, el movimiento que naci¨® con el grito de guerra #FreeLanda en sus tiempos de sirviente de Chris Froome y la denuncia del tripartito del Movistar en el Tour del 19. ¡°Eso ya qued¨® atr¨¢s hace mucho¡±, dice.

Pregunta. ?C¨®mo se lo pas¨® en el Algarve haciendo de sherpa de Remco Evenepoel?

Respuesta. Me encuentro, sobre todo, c¨®modo, fuerte para hacer ese trabajo, y cuando me toca lo disfruto. Adem¨¢s, si luego trabajas para Remco, que responde, que est¨¢ siempre ganando o disputando, pues mejor a¨²n.

P. FreeLanda es ahora siervo de Evenepoel. ?A la fuerza o por elecci¨®n?

R. Bueno, el calendario es muy amplio, ?no? Y este equipo, el Soudal, tampoco ten¨ªa muchos m¨¢s l¨ªderes. Vi que aparte de ayudar a Remco, sab¨ªa que iba a tener mi oportunidad de vez en cuando, y para m¨ª eso es suficiente. Y ya se ha visto en la Volta, donde estuve de l¨ªder con m¨¢s calma.

P. ?Mejor que en el Sky con Froome?

R. Remco es un corredor que me gusta, que me atrae. Me he identificado un poco en ¨¦l, y me motiva especialmente ayudarle. Y tambi¨¦n me anima la posibilidad de crear un nuevo proyecto. Aqu¨ª, en el Soudal-Quick Step, quieren aprovechar que tienen a Remco para disputar el Tour de Francia o alguna grande. Estar en esa empresa de inicio es algo especial.

P. ?Buscaba tambi¨¦n la vida rutinaria de gregario, olvidarse de tener que tomar decisiones y responder por ellas?

R. He buscado un poco, tambi¨¦n, m¨¢s, digamos, no s¨¦, m¨¢s tranquilidad. O no s¨¦ c¨®mo decir, c¨®mo llamarlo, porque sigues teniendo presi¨®n. Ser el ¨²ltimo hombre de Remco tambi¨¦n tiene su presi¨®n. Hay que estar ah¨ª, en la ¨²ltima subida, en las mejores condiciones, dejarlo lo mejor posible. Eres igual de importante que antes. Al final, tu trabajo tambi¨¦n es importante, aunque, claro, s¨ª que es cierto que no te llevas esos palos que te dan cuando no ganas.

Esos fallos no se ven tanto cuando eres un gregario, as¨ª que s¨ª, quiz¨¢s puede ser un poco m¨¢s relajado. Pero bueno sigo con la misma hambre, con la misma presi¨®n, las mismas ganas de hacer las cosas bien.

P. Y dir¨¢ adi¨®s al estr¨¦s de estar siempre bien situado en las primeras etapas del Tour, a la obligaci¨®n de estar todos los d¨ªas pendiente de la general¡­

R. En el Tour esta vez no me tocar¨¢ estar pendiente los d¨ªas de transici¨®n sin poder relajarme hasta que no cruce la meta, pero ya me tocar¨¢ en la Vuelta, que quiz¨¢s es un poco m¨¢s f¨¢cil, pero siempre hay tensi¨®n. En el Tour lo disfrutar¨¦ de otra manera.

P. En la Volta ha sido l¨ªder, el mejor de los dem¨¢s detr¨¢s de Pogacar, pero la pr¨®xima semana disputar¨¢ su primera Itzulia, la carrera de su tierra, donde la afici¨®n le aclama, sin poder responder a sus expectativas, al servicio de otro¡­

R. Y ya tengo muchas ganas de vivirlo. Aparte de que este a?o, con ese recorrido, se me antojar¨ªa dif¨ªcil pelear por el podio, con las bonificaciones y la contrarreloj, me apetece mucho ayudarle a Remco en mi tierra, ense?arle, guiarle por mis carreteras. A ¨¦l y a todo el equipo. Es algo que me apetece especialmente. Adem¨¢s, ¨¦l puede ganar la carrera, as¨ª que me apetece mucho ayudarle.

P. ?No echar¨¢ de menos la adrenalina que le alimentaba el alma de escalador en fuga, el ¨¦xtasis, que era su ser?

R. Jajajaja¡­ Ese protagonismo, s¨ª¡­ Pero, bueno, la carrera tiene muchas vidas, y habr¨¢ momentos en los que quiz¨¢s me toque moverme, correr un poco el ataque para que luego lo aproveche Remco, o incluso alguna victoria parcial podr¨ªa ser posible. Creo que habr¨¢ momentos para todo.

P. ?C¨®mo es Remco? ?Arrogante? ?Simp¨¢tico?

R. Es exigente, pero primero con ¨¦l mismo. Yo creo que tiene tanto talento que opta a todo, y esa ambici¨®n le hace a veces tener un car¨¢cter que puede parecer duro o fr¨ªo. Pero luego es una persona muy normal. Le ha llegado tan pronto la capacidad de disputar carreras que a veces le ves desubicado. Es tan joven que le falta madurez, tranquilidad en ciertos momentos.

P. Quiz¨¢s eso se vio bien en la Par¨ªs-Niza, en la etapa en la que se le fueron Jorgenson y Hindley. Seguro que le ech¨® a usted de menos en ese momento.

R. Yo creo que un poco s¨ª, s¨ª. Yo sufr¨ª bastante adem¨¢s viendo la carrera.

P. Usted tambi¨¦n se revel¨® muy joven, ganando con 21 a?os en las Lagunas de Neila, en la Vuelta a Burgos, justo nueve a?os antes de que Evenepoel se destacara en el mismo terreno a los 20¡­

R. S¨ª, s¨ª, y ¨¦l se acuerda mucho adem¨¢s de esa etapa, y en el Pic¨®n Blanco, y ya me lo suele recordar.

P. ?C¨®mo fue el fichaje?

R. Pr¨¢cticamente el mismo d¨ªa habl¨¦ con Patrick [Lef¨¦v¨¨re, jefe del Soudal] y pr¨¢cticamente el mismo d¨ªa habl¨¦ con Patrick, primero, y con ¨¦l. Patrick me dijo que el proyecto giraba en torno a Remco, y este me confirm¨® luego el inter¨¦s de Patrick, y que, en realidad, el inter¨¦s era m¨¢s suyo que de Patrick. Ah¨ª empez¨® nuestra relaci¨®n. Y no tuve muchas dudas.

P. ?Qu¨¦ les puede ofrecer?

R. Yo creo que se ha fijado un poco en mi regularidad, en mi experiencia. He estado en muchas grandes siempre ah¨ª, peleando entre los cinco mejores. Quiz¨¢s no he ganado, pero son muchas grandes ya en mis espaldas, y muchas experiencias. Creo que han visto primero mi disponibilidad para ayudarles y luego mi experiencia, tan necesaria para tener tranquilidad. Les ha encajado y de momento estamos contentos.

P. A los 34, ?ha colmado ya sus ambiciones personales o ser¨¢ un gregario cabreado como puede ser Vlasov con Roglic, que nunca se sabe si dar¨¢ el 100% por el jefe?

R. No, no. Conmigo no puede haber ninguna duda, aunque la verdad es que persigo a¨²n alg¨²n triunfo parcial. Me motiva eso ahora mucho m¨¢s que volverme loco peleando por las generales.

P. Hace dos a?os qued¨® tercero en el Giro y parec¨ªa que estaba ah¨ª, sin m¨¢s¡­

R. S¨ª, bueno. No tengo la punta velocidad que ahora mismo hace falta para disputar etapa. Si te centras en la general es complicado pelear una etapa.

P. Para el landismo, para tu mito, ?qu¨¦ significa esto? ?Otra capa de la misma persona? ?Otra persona?

R. Yo creo que es otra etapa, ?no? Vamos a disfrutar igualmente. Habr¨¢ momentos en los que me toque hacer mucho da?o al pelot¨®n, a otros l¨ªderes, y disfrutaremos con ello. Tendremos landismo en peque?as dosis como hemos tenido en la Volta y luego, a lo grande, en la Vuelta, donde va a ser todo a una baza.

P. Landismo m¨¢s soso, ?no?, sin tanta chispa. Sin las telenovelas limpiando zapatos en el tripartito con Valverde y Nairo del Movistar o sin el #FreeLanda del Sky de Froome¡­

R. Jajajaja. S¨ª, s¨ª, eso ya qued¨® atr¨¢s hace mucho.

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