La Vuelta da la bienvenida a las tarjetas amarillas

Aunque son transparentes, porque todav¨ªa est¨¢n en un periodo de pruebas, test en pos de la seguridad que ahora coge forma y que el 1 de enero entrar¨¢ en vigor para las carreras World Tour, en la Vuelta a Espa?a han aparecido las tarjetas amarillas como se hiciera en la Cl¨¢sica de San Sebasti¨¢n y como sucede en la Vuelta a Polonia. Una amarilla es advertencia; dos, expulsi¨®n. Es la iniciativa del planeta ciclismo, la modernizaci¨®n de un deporte centenario de h¨¢bitos inflexibles desde hace d¨¦cadas, la idea de proteger al corredor ante las acciones que ponen en peligro su seguridad. Pero hay que ajustar y regular las sanciones, definir las normas porque no llueve a gusto de todos.

Hace dos a?os, todas las familias implicadas en el ciclismo ¡ªUCI, equipos, corredores y organizadores¡ª decidieron reunirse para crear un organismo (SafeR) te¨®ricamente independiente para tratar de reducir los incidentes en carrera. ¡°Te¨®ricamente independiente porque se debe financiar y porque, con el tiempo, nos dimos cuenta de que era mucho m¨¢s pr¨¢ctico aprovechar el paraguas de la UCI, estar a su amparo por si, por ejemplo, se necesitaba un departamento legal¡±, cuenta Kiko Garc¨ªa, director t¨¦cnico de la Vuelta y part¨ªcipe del proceso. As¨ª, se sucedieron las reuniones ¡ªal principio semanalmente y de forma presencial en la sede de la UCI, ahora mensuales y casi siempre telem¨¢ticas¡ª y pronto se dieron cuenta del axioma repetido. ¡°Gran parte de los incidentes ven¨ªan por errores humanos, de comportamiento, de ciclistas, de un piloto, de un fot¨®grafo, de un mal movimiento de un coche¡­¡±, revela Garc¨ªa. Y se decidi¨® implantar las tarjetas y sus sanciones. A saber (y a priori): el corredor que reciba dos amarillas ser¨¢ descalificado de la carrera y suspendido por siete d¨ªas; el que vea tres en un plazo de 30 d¨ªas ser¨¢ suspendido por 14 d¨ªas; y el que absorba seis en el plazo de un a?o ser¨¢ suspendido por un mes. Pero una cosa es la idea y otra la aplicaci¨®n.

¡°No hace falta tener una amenaza encima para tener conciencia y sentido com¨²n, pero es una fase de pruebas y veremos c¨®mo funciona¡±, se?ala Juanma G¨¢rate, director deportivo del EF. ¡°No tiene sentido hacerlo ahora en agosto porque no hay un reglamento especificado. Las reglas del juego se tienen que poner al empezar el juego y no despu¨¦s¡±, se lamenta Joxean Matx¨ªn, su hom¨®logo del UAE. Aunque Xabier Zandio, del Ineos, lo pone en formol: ¡°El ciclismo evoluciona y est¨¢ bien hacer un test para ver si funciona¡±. Algo parecido opina su compa?ero Gorka Gerrikagoitia, del Cofidis: ¡°Es una innovaci¨®n que intenta que la imagen del ciclismo sea m¨¢s limpia, que no se hagan peque?as trampas como agarrarte a un bid¨®n o meter a un ciclista tras el coche. Veremos c¨®mo funciona porque no est¨¢ claro del todo¡±.

No les cuadra la desproporcionalidad de las sanciones, ya que no es lo mismo una carrera de un d¨ªa, de tres o de 21, pero s¨ª que se aplica la misma norma de que dos cartulinas amarillas equivalen a expulsi¨®n. ¡°No se pueden meter todas las carreras en el mismo saco¡±, exponen G¨¢rate y Matx¨ªn. ¡°En 21 d¨ªas es m¨¢s f¨¢cil cometer m¨¢s errores¡±, aclara Zandio. ¡°S¨ª, es un poco desproporcionado¡±, concede Garc¨ªa. Del mismo modo, entienden los directores, las tarjetas no deber¨ªan valer lo mismo porque no todas las infracciones son igual de peligrosas, toda vez que no es lo mismo tirar un bid¨®n de agua fuera de una zona limpia como, por ejemplo, originar una ca¨ªda por un mal movimiento. ¡°Por eso no creo que saquen las tarjetas a la ligera¡­¡±, desliza Zandio. ¡°Deber¨ªan, adem¨¢s, valorar el momento de la carrera, porque si uno se queda atr¨¢s por aver¨ªa y se refugia en el coche para volver a enlazar con el grupo no es lo mismo que si lo hace uno que se queda porque no tira¡±, analiza Gerrikagoitia.

Por ahora, los equipos saben que hay 21 art¨ªculos de la UCI que se deben estudiar al dedillo para no incurrir en infracciones de seguridad, esos que hasta el momento comportan sanciones econ¨®micas. Los comisarios, siempre al final de la etapa, enviar¨¢n su sentencia. ¡°Los equipos, como sucede ahora, podr¨¢n apelar a la UCI aportando im¨¢genes y argumentos¡±, rese?a Garc¨ªa. Es el nuevo ciclismo, el de las tarjetas amarillas, pero, por ahora, transparentes e indoloras.

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